La Mamá del ASL ( One Piece y tu )

Capitulo 4

Narrador Omnisicente.

Todos los piratas se encontraban escapando del lugar despues de que Ace fue salvado por su hermanito y su madre, felices pero en guardia para proteger a los que se encontraban mas cerca de la plataforma de ejecucion, pero claro la marina no se rendirea facilmente, Kizaru y Aokiji se acercaron con velocidad para pelear con TN, algo dentro de ellos sabian que no era rivales para ella, pero claro eran almirantes y debin cumplir con su mision.

TN esquivó con facilidad el primer ataque y, con un movimiento de su mano, deshizo el hielo que se dirigía hacia ella. Sin embargo, en ese momento en el que se enfrentaba a dos de los tres almirantes, el almirante de lava se acercó a Luffy y Sabo con la intención de acabar con ellos, ya que no podía permitir que el hijo de Dragon siguiera con vida. Sabo se dio cuenta de esto y logró esquivar el ataque, pero tropezó con algo en el suelo, haciendo que se cayera y Luffy cayera de su espalda al lado de él. La pelinegra, al darse cuenta de la situación, invocó un leon  de oscuridad para que acabara con los dos almirantes que estaba peleando y luego corrió hacia donde estaban sus hijos tirados en el suelo. Lamentablemente, Akainu logró lanzar un ataque devastador, pero TN logró desviarlo lejos de sus hijos con una patada. Sin embargo, una roca de lava alcanzó a Luffy, golpeándolo directamente en el pecho.

Un grito de dolor proveniente de Luffy hizo que todo alrededor se detuviera por unos momentos. Los ojos de Ace y Sabo se agrandaron de preocupación por su hermano menor, mientras Takashi se echaba la culpa por no haber estado más pendiente. Sin embargo, había una persona que estaba peor que todos, alguien que normalmente era tranquila pero que ahora se llenaba de ira, y esa persona era TN.

Narra TN.

El estruendo de la pelea pareció desvanecerse en un instante cuando aquel pedazo de lava cayó en el pecho de mi hijo menor, Luffy. El tiempo se ralentizó mientras observaba impotente cómo mi amado hijo caía al suelo, soltando un grito de dolor que retumbó en sus oídos como un lamento desgarrador.

Un grito desgarrador escapó de mis labios  mientras corría hacia Luffy. El mundo se redujo a ese momento, a su hijo herido y a la furia que crecía en su interior. La ira, sileciosa pero matadora, se apoderó de mi en estos momentos, mi  visión se tiñó de un rojo incandescente.

El hombre de lava, aún tambaleante por el ataque que hice para desviar la lava, me miró con sorpresa y mas cuando me empece a acercar con una determinación feroz. Mis movimientos se volvieron más rápidos y letales. Cada paso que daba resonaba como un tambor de guerra.

TN: ¡Te arrepentirás de haber lastimado a mi hijo!- rugi con enojo, mi voz llena de furia contenida.

Akainu: Es un demonio merece morir.- gruño con enojo sin darse cuenta que estaba cavando su propia tumba. 

Mis poderes  se amplificaron  con mi creciente ira. La  sangre respondió a mi  voluntad con una intensidad que no había sentido en siglos. Con mi poder la sangre de Luffy, ahora mezclada con el pedazo de lava, fluyó hacia él, sanando sus heridas ligeramente hasta que pudiera curarlo por completo en un lugar seguro, mientras veia como  luchaba por mantenerse consciente.

TN: Quieres ver un verdadero demonio.- sisee mientras dejaba de ver a mis hijos que parecian en shock por lo que acaba de pasar.- Te voy a enseñar lo que un verdadero demonio puede hacer.

Akainu: Que puede hacerme tu, una mujer y madre de unos demonios.- pregunto con burla.

TN: Muchas cosas, maldito hombre de lava, voy a enseñarte a no meterte con mi hijos, pedazo de basura insignificante.- comente con voz baja.

Akainu: No me hagas reir, nisiquiera me miras a los ojos.- dijo con burla. 

TN: No eres nadie.- comento mientras las sangre de mis venas corria con rapides.- Solo una escoria que debe aprender modales. 

El hombre de lava rugió y avanzó, transformando su brazo en una masa ardiente y arremetiendo contra mi. Pero yo era más ágil de lo que parecía. Con un movimiento fluido, transforme mi  propia sangre en lanzas afiladas que se clavaron en el hombre de lava. Un grito de dolor llenó la caverna cuando las lanzas de sangre perforaron la superficie ardiente del hombre de lava. Pero este no lo detuvo. Con una ráfaga de energía, intentó atraparme en un abrazo abrasador. Pero supe que debía actuar rápido. Concentre mis poderes y enfrió la sangre en mis  venas hasta que se convirtió en hielo. Luego, lanzó el hielo hacia el hombre de lava. El contraste entre el frío y el calor fue insoportable.

Me enfrentó al hombre de lava con una ferocidad implacable. Cada movimiento de mi cuerpo estaba imbuido de un instinto asesino que desafió las leyes de la física. Mis ataques eran precisos y mortales, y el hombre de lava apenas podía defenderse. El piso bajo nosotros  temblaba con la intensidad de la batalla, y el calor se volvía insoportable. Akainu, ahora claramente superado, buscó desesperadamente una vía de escape. Pero TN lo persiguió, sin darle respiro, con la única meta de vengar a su hijo. Finalmente, con un golpe devastador, TN derrotó al hombre de lava. Este se desplomó en el suelo, derrotado y exhausto. 

Me acerque a el con lentitud y por fin lo mire a los ojos como el deseaba que hiciera desde que empezamos la batalla.

TN: Esta es la unica manera que podras ver mis ojos.- comente con voz fria.- No te mato porque no queiro que mis hijos vean esto, pero atrevete a parate y desapareceras de la faz de la  tierra.

Dicho esto me fui del lugar y empece a caminar a donde estaban mis hijos que miraban todo con sorpesa,  la ira en mis  ojos comenzó a desvanecerse lentamente, reemplazada por una profunda preocupación y amor por su hijo.Cuando llego a su lado acaricie su mejilla.

TN: Perdon debi llegar mas rapido.- susurre mientras lo cojian en brazos.

Luffy: Estoy bien ma.- murmuro mientras intentaba sonreir.

TN: No te esfuerces, duerme ya nos vamos de aqui.- le dije mientras le daba un beso en la frente para dormirlo.- ¿Estan bien mis pequeños?- pregunte mirando a Ace y Sabo.

Ace: Si mami.- murmuro todavia sorprendido por lo que vio.

Sabo: Yo tambien. -murmuro y aparto la vista de mi.

TN: Takashi, vamonos de una vez.-comente y el solo asintio para seguir corriendo.

Le sonrei a Sabo mientras acariciaba su cabello y empezamos a correr mientras eramos protegido por el resto de piratas, cuando llegamos a donde estaban los barcos un submarino aparecio, donde aparecio un joven pidiendo a mi hijo para poder revisarlo y curarlo.