Repetir lo nuestro [pablo gavi]

𝗖𝗮𝗽𝗶𝘁𝘂𝗹𝗼 𝟯𝟬

25 de Julio del 2023
Lara

Me desperté en mi cuarto de la universidad, era sábado y no teníamos clases, supongo que después es de la fiesta a Emma le pareció mejor irnos a casa.

Si les soy sincera no recuerdo nada de lo qué pasó anoche, solo recuerdo unas manos en mi cintura y alguien tratando de besarme, nada más.

Me paré de la cama con una resaca horrible, no podía con mi cuerpo, caminé a la cocina donde estaba Emma haciendo waffles.

—Buenos días...—se me quedo viendo y empezó a reír—no es por nada pero parece que te arroyó un camión.

—Gracias Emma, que amable eres—dije sarcásticamente mientras tomaba un poco de café.

—Era broma Larita, toma esto, son pastillas para la resaca—me entregó las pastillas.

—Gracias Emma, siempre me salvas la vida —digo tomándome las pastillas.

De repente a mi teléfono le llegan un montón de notificaciones.

—Vas atender el teléfono?—dice señalándolo.

Agarro mi teléfono y veo que tengo 25 mensajes de Gavi, 10 llamadas de Dani y un mensaje de Sira con un link adjuntado, lo abro y me encuentro con un video mío en la fiesta donde Valentino me besó sin MI consentimiento.

Sentía como mis ojos se humedecían, no podía creer que toda puta España se había enterado en una sola noche.

—Qué pasó?—me preguntó Emma preocupada.

—Que qué pasó?—dije sin parar de llorar—Que toda puta España se enteró de que me besó un tío mientras estoy saliendo con el futbolista mas atractivo del mundo—dije desesperada.

—Lara—dijo con un tono de voz compresivo—Se que estás muy nerviosa y alterada pero te tienes que calmar—me toma la mano—nada se resuelve ni llorando ni gritando y lo importante es que Valentino fue el que te besó sin tu consentimiento recuerdas? Tú nunca quisiste que esto pasara, pero si en verdad quieres arreglar las cosas es mejor que los llames, seguro lo entenderán—dice tratando de calmarme.

Suspiro y trato de calmarme—Si tienes razón, los voy a llamar ahora mismo.

Y fui a buscar mi celular para llamar a Dani, escuché los tres tonos de voz y al fin escuché a Dani

—Hola...—dije con un hilo de voz.

—Lara no quiero pensar que lo hiciste, dime que es mentira, pero para pensarlo necesito una explicación ahora mismo—dijo con un tono serio.

Le expliqué todo, como me agarró de la cintura, como habló de Gavi y por supuesto como me besó forzadamente

—Lara...—dijo con un tono de comprensión—lo lamento tanto, no sé como pensé que tú harías una cosa así, perdóname.

—Esta bien Dani te entiendo, el video se ve muy convincente no voy a mentir, pero ahora tengo peores problemas, Cómo le voy a explicar a Gavi esto?—dije triste.

—Lara si en verdad lo quieres—suspiró—yo creo que sería mejor que se lo dijeras frente a frente, que lo hablen en persona.

Suspiré.

—Tienes razón, voy a agarrar un vuelo y se lo voy a explicar todo, no lo quiero volver a perder.

Compré mi boleto, empaque mis cosas y cerré mi maleta.

Al parecer nos vamos devuelta a Barcelona.

↧↧↧

Después de 11 horas de vuelo, haber llorado unas cuantas veces y sentir que me estaba ahogando en mis propios pensamientos, por fin llegue a Barcelona.

Por suerte, tuve tiempo de explicarle rápidamente la situación en la que estaba atrapada a Ricki y le pedí que si me podía venir a buscar al aeropuerto. Después de haberle dicho unas cuantas veces que cuando estuviéramos juntos le iba a responder todas sus preguntas acepto.

Salí del avión, pasé seguridad y todo el control de pasaporte. Después salí del aeropuerto y me monte rápidamente en el Audi gris de Ricki, mi hermano.

—En verdad pensé que ibas a durar menos— bromeó mirándome.

—No es gracioso— le dije molesta.

—Yo se lari, te deseo suerte hablando con Gavi. Creo que ya estaba cabreado con lo del video, ademas le sacaron roja hoy en el partido.

Sabía que era mi culpa.

—Ojalá lo de anoche nunca hubiera sucedido.

—Desgraciadamente, siguen existiendo hombres que no saben respetar así que— dijo mirándome antes de poner los ojos de nuevo en la carretera.

Después de un rato de silencio llegamos a el edificio de Gavi. El vivía en el penthouse y yo tenía una llave con la que podría entrar perfectamente pero, prefería no usarla por la situación en la  que estábamos, no sabía cómo el iba a reaccionar.

Entre en el ascensor llena de valor y cuando llegue frente a su puerta me quedé pensando.

¿Que me dirá?

Realmente no lo sabía, solo tenía que tocar el timbre, entrar y hablar con el.

Me llene de valor y presione el ring.

A los pocos segundos alguien abrió la puerta.

—¿Lara?