Emily Forbes llevaba una vida común y aburrida, hasta que a su hermana la mordió un vampiro. Desde entonces, Emily deberá enfrentarse a todo tipo de obstáculos que este nuevo mundo propone, pero todos sus planes cambian cuando los Mikaelson llegan a...
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—¡Nik, para! —Gritó Emily mientras huía del híbrido. Elijah los miraba divertido desde la cocina de casa Forbes.
Niklaus atrapó a la morena usando su velocidad vampírica. La chica frunció el ceño, fingiendo estar molesta.
—Eso es trampa.
—No lo es, amor.
—Sí, si lo es. Eres un tramposo.
Ambos originales rieron divertidos por la actitud de la chica. Había que decir que habían pasado unos cuantos días, y que después de una cita, y miles de disculpas, la morena había perdonado al híbrido, con la promesa de que no volvería a atacar a ninguno de sus amigos.
El sonido del teléfono del híbrido llamó la atención de los tres. Mientras Niklaus contestaba la llamada, Emily fue a desayunar con Elijah. Pues con tanta broma no le había dado tiempo.
—Vale, voy ahora mismo. —Se despidió. —Amor, debo irme. Los últimos retoques del ritual. —Explicó.
La morena asintió, aún estando con la espalda apoyada en el pecho del original mayor.
—Vale, adiós Nik.
Emily sabía que Elena debía morir en ese ritual, y aunque quería pensar que se lo merecía, ambas había sido amigas desde pequeñas y aún le tenía algo de cariño.
—Ella estará bien, Elskan. Conseguiré salvar a Elena.
—Gracias, 'Lijah.
Era de noche ya cuando Elijah y ella caminaban por el bosque, cogidos de la manos, buscando al híbrido.
—Ahí.
—Hola, amor. Hermano. —Niklaus saludó.
—Niklaus.
—Hola, Nik.
—¡Emily! —Damon gritó cuando la vió. —¡Tienes que parar esto! No dejes que le haga daño a Elena.
—¿Ahora quieres mi ayuda? —Preguntó con una ceja levantada. —Lamento decirte, Damon, que no voy a hacer eso.
Niklaus sonrió orgulloso cuando oyó eso. Emily caminó hacia el altar donde debía colocarse la bruja. Niklaus había despedido a su bruja cuando Emily le pidió hacer ella el ritual. El híbrido confió completamente en el ella desde el primer momento, sin embargo, temía que la pasara algo.
—Ya es la hora.
El círculo de fuego alrededor del vampiro cayó. Emily pudo agradecer a que Niklaus no había puesto a Jenna ahí. El vampiro, llamado Jerry, utilizó sus últimos segundos de vida para intentar salvarse, atacando a Emily. Al segundo de morderla, su cuello fue roto por Elijah, para luego Niklaus sacarle el corazón.
—¿Estás bien?
—Estoy bien, 'Lijah. No ha sido para tanto.
El ritual siguió, y el siguiente fue el hombre lobo. Jules esperaba en su círculo de fuego su final. Sabía que ella había sido la elegida porque días antes había atacado a Caroline, y ahora Emily se quería vengar.
—Espero que te lo pases bien en el infierno, Jules.
Después de que el híbrido también sacara su corazón, él se acercó a Elena, en el tercer círculo de fuego.
—Gracias, Elena.
La doppelganger asintió de mala gana, antes de sentir como el híbrido clavaba sus colmillos en su cuello, succionando toda su sangre. Lo último que pudo ver, fue a Stefan, en el suelo con una estaca en la espalda, y a Emily, que aunque estaba recitando el ritual, pudo ver en sus ojos algo de pena.
—¡Está pasando!
La morena sonrió alegremente al ver al, ahora 100% híbrido. Su sonrisa cayó cuando un grito de dolor de Niklaus la invadió los oídos. Elijah también cayó al suelo a su lado, gritando de dolor, y detrás de él, pudo ver a Bonnie.
—Bon, ¿qué haces?
—Lo siento, Em. Puedo soportar a Elijah, pero no a Klaus. No dejaré que lastime a nadie más.
—Bonnie para.
—No, Emily, no. Con él, todos nuestro problemas desaparecerían.
—¡Bonnie, para, maldita sea!
La magia empezó a fluir sola a través de Emily, lanzándose contra Niklaus y Elijah como un escudo, en un intento de protegerlos de la magia de su amiga. Sus ojos se volvieron rojos, y Bonnie pudo jurar que ya no era Emily la que estaba ahí, ese poder no parecía el suyo.
—¡Te he dicho que pares!
Niklaus, ahora convertido en lobo tras haber terminado su transformación gracias al escudo de su compañera, gruñó al ver a la bruja Bennett tratando de hacer daño a su pareja. Elijah a su lado ahora, se sentía nervioso, gracias al escudo no podía salir de ahí y ayudarla.
En cuando Bonnie cayó al suelo inconsciente, Emily también lo hizo. Elijah llegó a tiempo para sujetarla antes de llevarsela de ahí.
