Antonio salió de la habitación y se dirijió al sillón, cuando notó que detrás de este habían tres botellas de vino vacías, no sabía de donde habían salido pero si a donde habían llegado.
A: Ay, Less...
No estaba enojado, estaba cansado y lo unico que le importaba era dormir.
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P: Buenos días, Less, ¿dormiste bien?
L:¿Desde tan temprano ya estás jodiendo?
Less dió un par de vueltas en la cama más sublime en la que se había acostado, se estiro un poco y se hundió entre las cobijas con los ojos aún entre cerrados.
L: Mmmm, ¿Que día es? -boztezó
P: es jueves, son las 10 am
L: mjmm
P: Abre los ojos, ¿ya viste en donde estás?
Less miró a su alrededor, vió su camisa interior tirada a un lado de la cama y el espacio vacío en donde debería de estar Antonio
L: Está bien -suspiro
Era un chico tranquilo que no se esmeraba en dramas ni sentimentalismos, probablemente se había acostado con A y ni siquiera lo recordaba. Pero no le importó mucho, siguió acostado unos 10 minutos más y luego se paró con solo los bóxer puestos, recogió su camisa, se la puso y buscó a Antonio.
El pobre de su anfitrión estaba mal acomodado y roncando un poco en el sillón.
L: Mierda ¿Qué hace aquí?
P: Si tú no lo sabes, menos lo sabré yo
L: Sino vas a ayudar vete a otro lugar
A sintió la mirada de Less y se despertó.
A: Eres un mañoso, cabrón
Levantó una caja de cigarros del suelo y se la lanzó
A: mariguano mañoso
Less sonrió, pero A estaba bastante serio
L: Perdón, no recuerdo mucho de anoche, ¿Que paso?
A se tocó el corazón y le contestó
A: nada, fuiste a mitad de la noche a dormir a mi cuarto y ocupaste tanto espacio en mi cama que preferí el sillón
L: ja, perdón por eso, y muchas gracias por dejarme dormir ahí
A: No es nada
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Después de hacer el desayuno y pasar una mañana muy linda juntos, Less recogió sus cosas y se despidió de Antonio, seguían siendo un equipo estupendo, pero no quería volver a estar con él solamente porque se sentía mal.
L: Gracias por todo -le dijo con una sonrisa mientras lo abrazaba- te quiero muchísimo
A: No fue nada -su ida le daba un tanto igual pero le era incómodo a su vez
Less salió del departamento, y regresó a su coche, con nuevas bolsas de oxxo para meter sus cosas.
Ahora tendría que ver en donde pasar sus siguientes noches.
Pero se sentía por mucho mejor
