Quinta Carta

3 1 0
                                    

Esperanza,aprecio, alegría.

Aveces me sienia cabizbaja pensando en todo la mayor parte del tiempo y solo quería apagar mi cabeza con un interruptor en busca de descanso hasta que organizas mis pensamientos y empiezar a tecomponerme y a sentirme mejor.

Imparable el la cima del mundo, lista pasa todo lo que venga, para luchar contra aquellos monstruos con todo lo que tengo con tal de conservarme intacta sin un rasguño. Sintiénde victoriosa, orgullosa de saber enfrentarme a los golpez que da la vida.

Aquella vida cruel que me da los golpes más duros acabando conmigo en cuestión de segundos, aprovechandose de mi poca experiencia que apenas estoy enfrentandome a todas esas cosas.

Cuando después de intentarlo logro entender a mi cabeza y conectarla a mi corazón para que trabajen en una sincronía perfecta ayudándomme,dominado todo.

Y siempre es bueno cuando tienes personas a tu lado que te cubren la espalda y son tu apoyo si tropiezas.

Quinta  Carta.

Querida karla.

Con el pasar de los años recuerdo como floreció nuestra bella amistad que cuidamos tanto como si fuera una extraordinaria pieza de cristal una en el mundo e irremplazable.

Nos conocímos cuando fui a una biblioteca buscado un libro que se había publicado hace unas semanas y que se habia vendido casi en todas las bibliotecas, estaba por tomar el último que quedaba en la estantería cuando una mano se poso sobre la mía tomando también el libro.

Volteó para ver a quien le pertenece la mano, una chica catana, delgada, de tez blanca un poco bronceada de ojos cafe. Estabas tomando aire con tu otra mano en tu pecho recuperando el aliento para hablarme.

Estaba lista para pelear por aquel libro pero cuando te vi decidí que no tenía porqué hacerlo.

Me dijiste que llevabas meses esperando que fuera publicado porque era tu autora favorita, por lo que dejé que te lo llevaras aunque insitiste en comprarme otro cuando saliera la siguiente edición. Me pediste mi número para estar en contacto hasta ese entonces.

Dos meses después de que nos vimos en la biblioteca me escribiste diciendome querías enviarme un regalo y que nos encontramos para entregármelo.

Al llegar conversamos tanto sobre varios libros que estaba por anochecer y había olvidado por completo el regalo. Cuando abri aquel paquete vi el libro que con el que comenzó nuestra amistad pero no era una nueva edición si no el que compraste ese día, con las páginas llenas de pos'its y algunas frases resaltadas con plumones de varios colores.

Lo guarde como un bello recuerdo de nuestro amor por los libros, algo de las demás cosas que teníamos en común.

Eras la persona más maravillosa, amable cariñosa, risueña y atenta que conocí en toda mi vida.

Estuviste allí para mí siempre, leyendo todo lo que escribía impulsandome simpre a hacer más, porque era capaz de muchas cosas más.

Te gustaba dibujar, te quedaban hermosos tus dibujos y tus pinturas. Un día te convencí de hacer una exposición en una galería.

Fue un completo éxito, todo se vendió y a todos les encantó tu trabajo, un señor estirado y rico te contrato para procinarte e impulsar tu carrera como artista.

Ese día estábamos súper felices, emocionadas por todo lo que vendria en el futuro.

Hisite un curso de dibujo digital y también  hacías ilustraciones, hisite varios cómics.

Trabajabamos juntas yo escribía y tú hacías los dibujos. Hasta que un día se te ocurrió la brillante idea de que escribiera un libro y tú te encargarías de las ilustraciones y la portada para que fuera publicado.

Me negué millones de veces hasta que al final te di la razón. A las pocas semanas ya se había vuelto tan famoso que se había agotado la primera edición, le había gustado a todo el mundo.

Celebramos como locas durante dos días en mi casa sin poder creer que nuestro sueño se había cumplido por fin.

Me acompañaste a mi primera firma de libros y a las entrevistas. Siempre alentandome a mucho más.

Por primera vez en muchos años sentí que de verdad estaba viviendo la verdadera felicidad, una verdadera amistad y era feliz, tan feliz como se podía serlo.

Tan feliz que mi corazón se inchaba al tener a mi mejor amiga a mi lado siendo mi compañera en cada batalla.

Las Cartas de Rose Where stories live. Discover now