En Línea...||Akito Yamada||

Cap 23.

P.o.v Omnisciente:

Eita, Akane y Ruri estaban sentados en los columpios, Akane iba a hablar con Ruri respecto a Yamada pero aún no sabía cómo empezar la conversación...

Eita solo miraba y esperaba escuchar, y Ruri solo estaba curiosa por saber que era eso tan importante que su hermana le iba a hablar...

– entonces... —Ruri rompió el silencio— ¿que es eso que debes hablarme, acerca de...el?.

– bueno... —Akane parecía nerviosa, confundiendo a Ruri— bueno...Yamada...vino hoy a verme al trabajo...

– si...ya lo se... —dijo Ruri, sin sorpresa alguna.

– bueno, pues...estuvimos hablando un poco... —la mayor desvió la mirada, un tanto desanimada—  ...hemos hablado de ti...

– ¿de mi?. —Ruri se confundió aun más— *¿por qué hablarían de mi?...*

– a ti...¿te ocurre algo que no me hayas contado?...—preguntó ella hacia su hermana menor.

– ¿por qué lo preguntas? —la menor sonrió, un poco nerviosa.

– dijo...que lo has estado evitando...

– *wa~, Akito siendo evitado, eso es nuevo...* —pensó Eita, divertido.

– ¿y-yo?, ¿evitarlo?, no es así, solo... —Ruri no sabía bien como responder a eso, ya que era absolutamente verdad.

– Ruri...¿pasó algo...esa vez que me enfermé?... —Akane tomó la mano de Ruri, mirándola fijamente— el dijo que todo empezó desde esa vez...

– no es nada, hermana, no estoy evitandolo, solo es un malentendido. —Ruri se suelta del agarre de Akane, y negó lo dicho por ella.

– ¿de verdad?, por que esa vez también te noté un poco rara... —Akane estaba preocupada por Ruri en verdad, pero la otra solo intentaba no dejarla saber lo que en realidad pasaba.

– así es, no pasa nada, ¡todo bien!. —la ojiazul dio su mejor sonrisa, evadiendo la mirada de su hermana— *¡debo irme o ella acabará preguntando más y más!*

– Ruri...en realidad, sospecho lo que podría estar pasando...¿es por que a mi-...  —Akane iba a preguntar algo más, pero un ruido la detuvo antes de hacerlo.

El sonido de del teléfono de Ruri, indicando una llamada, inundó el ambiente serio que había, y Ruri se apresuró a contestar.

– *sea quien sea, gracias.* —exclamó ella en sus adentros, aliviada— ¿hola?.

– Ruri-san...¿podrías por favor acompañarme hoy?... —la voz de Tsubaki se escucha al otro lado de la línea.— se que es posible que me odies, pero eres mi única amiga y...no quiero estar sola si el llega a recha-... —Tsubaki no logró decir más, ya que Ruri la interrumpió.

– ¡claro que si, ahora mismo voy!, ¿donde nos vemos?. —respondió ella absolutamente feliz de que la hayan sacado del interrogatorio.

– ¿en serio?, ¿estas bien con eso?. —Tsubaki se oía sorprendida.

– ¡claro que si, dime donde nos vemos! —dice Ruri animadamente.

– bu-bueno...en el puente cerca de la estación, ¿sabes donde es?...

– ¡si, estaré ahí en un momento!. —aceptó Ruri rápidamente.

– si, eh, Ruri-san...

– ¡de cuerdo!, ¡nos vemos Yukari-san!. —y de nuevo Ruri no la dejó terminar, y colgó la llamada.— lo siento Akane, pero una amiga necesita de mi ahora mismo, debo irme.