V

649 102 24
                                    

Recuerden votar y comentar para actualización más pronta <3

Recuerden votar y comentar para actualización más pronta <3

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

1947

A la mañana siguiente el sol que entraba por la ventana hizo que los ojos de Jungwon se abrieran, no quemaba su cuerpo aquellos rayos solares, simplemente lo calentaban, observo a su lado en la pequeña cama improvisada que había para Jay, no estaba ahí.

Aun era temprano, y ese día descansaría, como cada viernes de la semana, Jay descansaba, asumió que estaría fuera, no se preocupo mucho, sabía que Jay no se arriesgaría a nada, Jungwon cobijo sus brazos y espalda para seguir durmiendo un poco más.

Grata fue su sorpresa cuando sintió una mano al rededor de su cintura, su corazón dio un brincó y casi grito.

Sus pensamientos habían estado equivocados cuando la respiración en su cuello lo hizo volver a la realidad, Jay no había salido, solo estaba a su lado.

Giró un poco su vista, notando claramente el cabello del mayor tapando su frente y parte de sus ojos, desde la primera vez que Jungwon había visto a Jay, su cabello había crecido, ahora tapaba sus ojos a la perfección, esos mechones podían demostrar el tiempo que llevaba ahí.

Jungwon sonrió inconscientemente.

Desde aquella noche donde el menor había pedido a Jay que lo abrazara y durmieran juntos, se había vuelto una costumbre dormir así, muchas veces terminaban juntos en la misma cama, antes de cerrar los ojos, otras, alguno se pasaba al lado contrario.

¿Por qué?.

Podría ser el frío de las noches de lluvia, que eran muy pocas ocasiones.

Tal vez, la soledad en la cama.

O simplemente, la seguridad y el calor que había en el otro.

Jungwon giró su cuerpo, quedando cara a cara con Jay, su rostro lucia tranquilo, muy relajado, como si estuviera teniendo el sueño más lindo.

Sus largas pestañas, su pie tan linda, esos lindos lunares que casi nadie notaba, tal vez la forma tan linda de su nariz, o aquellos labios que Jungwon moría por besar.

El castaño no sabía que parte del rostro de Jay era, o que ocasionaba que su corazón brincara de emoción cada vez que lo veía o daba ese paseo por su mente.

Los ojos de Jungwon vagaban por cada parte del rostro ajeno, aprendiendo cada detalle, quitando con delicadeza los mechones en su frente, acariciando suavemente su piel, desde sus cejas, hasta su mandíbula, memorizando con su tacto, la piel ajena. Rozando levemente con la yema de sus dedos; pasando por sus pómulos, hasta sus mejillas, llegando a sus labios.

19:47 - Jaywon -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora