TITANS - GREEN MOON

9

Llevo aproximadamente dos días en el hospital, me tuvieron que hacer varios chequeos, exámenes y diagnósticos. Todo porque Dick les dijo que me caí de las escaleras de mi casa y que me golpeé muy fuerte.

- ¿Como estas? – pregunto Dick entrando al cuarto del hospital donde estoy ahora mismo

- Bueno, tengo una costilla rota, un hematoma en el estómago, tengo un pequeño derrame en el ojo, tengo una linda cicatriz aparentemente permanente en la ceja, tengo la muñeca torcida, pero bien – dije sonriendo

- Bueno, si fue una pregunta tonta. ¿Qué te dieron para el ojo? – pregunto acercándose a mi

- Me dieron unas gotitas las cuales me tengo que colocar cada cinco horas, sin falta. – dije suspirando – Me dijeron que las tengo que usar durante tres meses y ya luego me cambian la receta. Pero lo que no saben es que mi sistema inmunológico es más rápido que el de cualquiera de ustedes.

- Eso es bueno – dijo sonriendo

- Lo sé – suspire triste

- ¿Qué pasa?

- Es que, quizás yo hubiera podido ayudar a Dawn, pero ese niño estúpido – dije enojada

- No fue tu culpa

- Hubiera ayudado más, ahora ella está en coma – dije con los ojos cristalizados

- Hey, no pienses más en eso, ¿sí? Dawn es una mujer fuerte, saldrá de esto – dijo intentando consolarme

- Eso ya lo sé, pero es difícil para mí. Mas que para ustedes – dije sollozando

- ¿De qué hablas?

- Yo siento todo lo que ustedes sienten, escucho todo lo que ustedes piensan, sienten y desean. Se que tú también te culpas, Hank también lo hace, siento la desesperación y la culpa de ambos, y eso me sofoca, porque, aunque no quiera yo absorbo todo eso. ¿Por qué crees que Hank no se ha ido a buscar a la familia chiflada?

- ¿Porque tu absorbes su enojo?

- Exacto, y no es algo que yo decida, es automático. Siento algo y ya lo absorbo.

- Dellazhka, tengo que decirte algo – dijo Dick mirándome fijamente

- ¿Qué sucede? – dije acomodándome en la cama

- Voy a ir a buscar a la familia chiflada – dijo mirándome seguro

- No, no lo harás – dije mirándolo seria

- Tengo que hacerlo, se llevaron a Rachel

- Ella está bien – dije segura – He estado buscándola, pero no doy con su ubicación, pero se que esta bien, ella y yo tenemos una especie de vinculo, créeme, te ayudare a buscarla y a matar a la familia loca apenas salga de aquí

- Tengo que hacer esto, ahora.

- Un día, dame un día – dije mirándolo suplicante

- Esta bien. Solo un día Dellazhka.

- Ahora ya no soy "Dell" – dije con burla el chico al frente mío bajo el cabeza avergonzado – o ¿Lo dijiste solo por la presión del momento?

- No, no es eso. Es solo que, no lo sé, sentí la necesidad de hablar rápido contigo, sentí que cada segundo importaba – dijo mirándome

- Me gusta el sobrenombre... Dell – dije sonriendo

- Me alegra que te guste, intente de todo por encontrar un diminutivo para tu nombre y encontré ese y "Alaska", que lo puedes usar cuando la gente no sepa como pronunciar tu nombre, es una idea.

- Gracias, nunca me había tomado el tiempo de buscar algún diminutivo para mí, gracias. – dije sonriendo

Ese día Dick se quedo hasta que anocheció a mi lado, ambos conversábamos cosas sin sentido, pero también hablamos de como íbamos a buscar a Rachel, Dick también fue a ver a Dawn durante unos minutos en los cuales habló con Hank, el cual esta muy preocupado, pero menos que antes ya que me he encargado, sin querer, que sus sentimientos bajen de nivel, por lo cual ahora esta calmado pero preocupado.

- ¿Todavía sientes algo por Dawn? – pregunté cuando vi a Dick en la puerta de mi habitación

- No – dijo sin mirarme

- Mírame – el hiso lo que le pedí – Mientes, deja de mentir Dick. – dije frunciendo el entrecejo

- Dawn y yo ya no somos nada

- Eso lo sé, pero, ¿Solo es porque Hank esta con ella? O ¿Dejaste de sentir atracción por ella de verdad? – le pregunte confundida

- Ella y yo no íbamos a funcionar como pareja, solo éramos niños. Ella y Hank ahora son felices, no quiero interrumpir eso solo por egoísmo.

- Uno no siempre obtiene lo que quiere ¿verdad?

- Cierto – dijo mirándome, vio la hora en su reloj y me miro nuevamente – Me tengo que ir, tengo cosas que hacer, nos vemos mañana, descansa.

- Descansa – murmure cuando el salió de mi vista.

Esa noche no logre dormir mucho, ya que estaba pensando en como encontrar a Rachel, ¿Qué era lo que me inyectaron? ¿Qué quiere la familia chiflada con Rachel? ¿Cómo eran tan fuertes esos niños?, no sentí ninguna especie de poder en ellos.

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