II

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Sakura se queda muda con lo que ve.

Su mejor amiga y su esposo la han traicionado y su mente no encuentra siquiera algún detonante de la situación.
Pero sabe muy bien que no es su culpa, sabe que definitivamente es resultado de dos personas mentirosas.

Ellos están perdidos en su propio éxtasis, después de algunos minutos donde la doctora no se ha movido de la entrada de la recámara, Sasuke termina con una estocada final y se levanta algo exhausto de la cama, pero el espejo frente a él le arrebata la sonrisa ladina que adornaba su rostro, mientras la rubia se ha quedado con los ojos cerrados recuperándose del orgasmo que ha tenido.

El espejo aunque un poco empañado refleja la silueta de la esposa de Uchiha Sasuke.

—Sakura. —Dice su nombre en un susurro y se gira, la ve más blanca que el papel, los ha pillado.

Ella no dice nada, solo lo mira diferente.

Ya no es la mirada dulce y amorosa que le da con solo verlo.
Ahora es una donde la decepción se ve marcada en sus pupilas y eso le cala.

—¡Sakura! — Ahora ya saliendo de su sorpresa, es él quién se levanta apresurado y dispuesto a cubrirse, como  si eso pudiera ocultar la verdad a su joven esposa, como si ponerse sus prendas pudiera ocultar su adulterio.

Ino quien ya estaba ensimismada y dispuesta a dormitar un rato después de su sesión de sexo, abre los ojos de golpe  al escuchar el nombre de su mejor amiga de los labios de su amante.

Ella había estado dando la espalda a la puerta y se gira rápidamente, contempla casi lo mismo que Sasuke. Sakura sigue pegada a la puerta observado cada movimiento, está pálida y no dice nada.

El azabache empieza a vestirse sin lograr encontrar su camisa, tal vez se ha quedado en la sala.
Eso no le impide ponerse el resto de la ropa e intenta acercarse a su mujer.

—Esto lo podemos arreglar en la  casa, lo debemos hablar a solas.— Sabe lo temperamental que es su esposa y su mente formula todos los posibles escenarios, puede llorar y reclamar, pero lo va a perdonar.

Eso es lo que él cree.

—Amiga, perdón, nosotros...— La rubia intenta excusarse ante la mirada atenta de la pelirosa, quién la mira sin mirar, repasando en su mente todos los momentos que ha estado con ella, considerando su mejor amiga, incluso cuando fue dama de honor en su boda.

—¡Cállate, Ino! — Sasuke ordena sabiendo que lo que diga, puede ser perjudicial, porque él  ya está intentando armar el mejor montaje, uno creíble.— Yo arreglo esto. Sakura, vámonos.

El Uchiha se acerca más intentando tomar su hombro y ella ahora sí retrocede, sigue sin mediar palabra. Pero rebate su toque, no lo quiere cerca. Saber que ha estado entre las piernas de otra le produce asco.

Sasuke no se achanta y quiere volverla a tomar, pero ella se aleja de la puerta dispuesta a retirarse del apartamento. Una ceremonia la espera, a la que acudirá aunque sea así, con el vestido manchado y el alma rota.

—¡Sakura!— Él la llama furioso y la jala por el brazo haciéndola girar.

Ella solo se deja por ese momento, pues será lo último que permita bajo las manos de Uchiha Sasuke. —Nuestro matrimonio no va bien, ella llegó como un consuelo a la monotonía, tienes que entender que soy hombre y tengo instintos, pero ya no será más así.

Sakura estaba dispuesta a bromear con la absurda explicación que su hasta ahora esposo le ofrecía. Pero solo se deshizo de su agarre.

—No te he pedido explicación alguna. Tramitaré el divorcio.

Y eso hace enfurecer al azabache, su mirada cambia a una llena de enojo.

—¡Te dije que esto lo arreglaremos en la casa! — Grita, su interior le está quemando ante esa mirada determinada de la pelirosa.

Ino aparece de pronto envuelta en una sábana blanca, Sakura la mira con asco.
En esa sabana están los fluidos de los amantes. Los cuales tal vez horas después irían a abrazarla hipócritamente.

—Sakura yo no quise hacerte daño, pero él y yo nos enamoramos...—Ofrece de nuevo como disculpa la rubia.

Ella no quiere escuchar, no le interesa en lo más mínimo ninguna excusa.
Pero ante lo dicho por Ino, enarca una ceja mirando de nuevo despectivamente a Sasuke quien le niega con la cabeza, esto pasa desapercibido por la rubia, pero a Sakura no le importa. Solo vuelve a mirarlos y se apresura a la puerta ante los gritos de Sasuke quien va tras ella.

Falacias.Where stories live. Discover now