Capítulo 5 (Re-edit)

75 6 0
                                    

Cada día que pasa, es un dolor inmenso. Ya no aguanto ver a ambos felices. Siento como si se burlarán de mi existencia a propósito. Sus caras sin vergüenza me causan repugnancia... O tal vez, son celos, en realidad.

Celos de no tenerla cerca. Celos de que ya no me acompañe a casa. Celos de la atención que le presta, aun teniéndome a su lado.

No sé qué más puedo hacer. Me siento ahogar en esta marejada de emociones, dónde siento tantos cambios en pocos minutos.

El único momento en el que me siento tranquilo, es aquél en el que no están en mi campo de visión. ¡Ya no lo soporto! —Los ojos de Nishikata se quiebran y unas pequeñas lágrimas caen en su cuaderno. — No, no puedo llorar no aquí.

No, por favor... No aquí.

Capítulo 5 (Re-edit)

"Catarsis"

Aquél muchacho, mientras tanto, inmerso en sus pensamientos; sigue sintiendo un dolor tan profundo, que podría herir con unas cuantas palabras ante lo que siente. Mantener la boca cerrada se ha convertido en la mejor defensa del mundo hacía con él; ya no le interesan las sonrisas o el amor que le puedan brindar, solamente asiste por costumbre y obligación. Las aves que gozaban de distraerle con su canto, son brutalmente ignoradas. El azul del cielo, que se ha vestido de gala, para su admiración, pasa desapercibido, y sus compañeros que existen para que su historia escolar se enriquezca, no son más que una molestia.

La campana del almuerzo le salvan de aquél asfixiante momento. Sumiré y Kimura se percatan del Nishikata que camina muerto en vida. Su amigo se acelera a llegar con él. Sumiré voltea a ver a Takagi, quién se junta con Amagucchi de forma intencional; aprieta sus puños con la impotencia de no poder hacer nada ante las malas prácticas de su amiga, pero, al mismo tiempo, entiende lo que debe hacer.

— ¡Nishikata! — Le grita Kimura preocupado.

— ¡Déjame solo! Por favor. — Le replica, mientras baja corriendo las escaleras.

—Por favor, déjame ayudarte. No te aísles así.

—No quiero ver a nadie, ¡Déjenme! — Comienza a limpiarse sus lágrimas, mientras aprieta el paso y pierde a su amigo. Lo deja muy detrás, apenas sosteniéndose de tremenda carrera, en medio patio.

Quiero ayudar a mi amigo en verdad. —Inundo en sus pensamientos, Kimura toma un sorbo de agua, de los bebederos del patio. — Pero no tengo argumentos para poder ayudarle. Incluso si yo le mencionara que sospecho de algo muy malo, no tendría como argumentarlos. Lo siento Nishikata, al parecer, soy un inútil.

— ¿Y si tuvieras una oportunidad, la tomarías? — Una voz dulce se escucha, justo detrás de él.

Nishikata se da cuenta que ha dejado atrás a Kimura. Camina con la cabeza boca abajo. —Soy un cobarde. Ya me había decidido hacerles algo y no puedo hacer nada. — Se lleva las manos a la cara, mientras camina. —Ya estoy harto, de que todos me traicionen. —

Se escucha un golpe y el grito de una chica, mientras cae al suelo. Nishikata se quita las manos de la cara de inmediato. — ¡Yo, lo siento! No veía por dónde caminaba— De inmediato trata de ayudar a la chica que ha tirado.

—Esta bien. — Menciona aquél hermoso rostro con caireles en el cabello.

— ¿Ho-Houjou-san? — Menciona tembloroso, él.

— ¿Eh?! — Ella levanta a vista. — ¡Nishikata-kun! —

—Lo siento en verdad. No te vi, venía pensando.

—Está bien. — Menciona en un tono cabizbajo.

¿Está bien? Esto no es algo que diría Houjou-san, ¿O al menos, no estando bien? ¿Algo no va bien? Será tal vez... —Nishikata, se pierde por un momento entre sus pensamientos. — Que sabe lo de Takagi y Amagucchi... Pero, entonces, ¿No lo sabía?

—Houjou-san, ¿Estás bien?

—Sí, yo, am... Sólo estaba dando un paseo cuándo tropecé contigo, en verdad lo siento.

—No te ves bien.

—Es sólo...— Hunde la mirada más, al tener frente a ella a Nishikata.

—Oye... Tú... ¿Sabías lo de Tkagi-san y Amagucchi-kun?

Nishikata se pone rojo como tomate. — ¿Saber qué? —

—Bueno, se rumorea que, son pareja... Aunque nadie me ha podido decir cuándo se confesaron o si alguien los vio.

—Realmente, no sé nada... O bueno, no se mucho. Sólo que Takagi-san, ha estado muy distante desde la elección de los representantes para el festival.

— ¿En serio? — Menciona Houjou con una mirada cristalina.

—En serio, pero, no puedo garantizar o negar algo. Sólo, estoy buscando respuesta a lo que está pasando. No quiero ser yo quién te lo diga, pero pareciera que ambos se volvieron incluso más cercano que nosotros con ellos.

—Entiendo, entonces supongo que... Sólo queda esperar. — Se da media vuelta y da un paso al frente.

— ¡Espera! — Nishikata le toma del hombro, evitando que se vaya. —Creo que ambos estamos en una situación similar, y...— Nuevamente se sonroja. —Posiblemente podríamos hacer más si compartimos información. —

— ¿Hablas de trabajar juntos?

—Sí, así es. Creo que una alianza entre ambos puede conocer más sobre lo que están tramando, ¿Qué opinas?

Houjou le sonríe —Me parece una gran idea. Es bueno tener un aliado. —

En verdad está muy mal. —No puede parar de pensar él. — Pero puede que ambos podamos conocer exactamente que pasa; además, olvide que Houjou también resultaría afectada ante todo esto.

—Houjou-san, ¿Tienes Line?

—Claro, te paso mi contacto.

—Sí, así si alguno tiene información, puede compartirla al otro.

—Claro...— Ella coloca su teléfono móvil, sobre el de Nishi. —Y, bueno, si quisiera platicar de algo más, ¿podría...?

—Por supuesto, ahora somos aliados. — Le sonríe fraternalmente a ella.

En el patio de la escuela, Kimura voltea de inmediato su rostro, y se queda perplejo por un momento, abriendo sus ojos como platos. —Sumiré San. — Replica al verla.

— ¿Si tuvieras una oportunidad de ayudar a tu amigo, la tomarías?

—Yo...— La mira fijamente por un momento —Sí, lo haría. —

—Incluso, ¿Sí eso supone retar a la maestra de las bromas?

—Tus amenazas no me intimidan.

Sumiré camina, con una sonrisa en los labios hasta llegar frente a él. —No podrás ganarle solo. —

— ¿Qué es...?

—Ella tiene alguien de su lado, y poco a poco tendrá más aliados. En cabio, tú potencial aliado te ha dejado solo, y te has metido en una guerra que es muy probable que pierdas.

—Aun así, debo intentarlo...

—Bien. — Le extiende la mano.

— ¿Y la mano para qué...?

—La maestra de las bromas es invencible... A menos, que la forcemos a combatir fuera de su terreno. — Le guiña un ojo. —Vamos a declararle la guerra a mi mejor amiga. Combatiremos juntos, a Takagi-san. —

Nota del autor:  En la primer versión que se realizo, teníamos al capítulo cinco, por lo que doy por concluido el listado de los capítulos re-editables, a partir del capítulo seis, serán capítulos 100% originales, sin guion o modificaciones primarias.  Como podrán ver los que leyeron la primer versión, algunos eventos han cambiado, pero otros se verán en un futuro, ya que se busco mejorar la calidad de la historia, incluyendo desarrollo de personajes.  ¡Espero les agrade esta mejorada versión y los capítulos que vienen!

La Broma Maestra (Fanfic)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora