twenty-eight

115 14 0
                                    

Jungkook miraba a la pelirroja que se encontraba a su lado, no estaba drogado, mucho menos borracho, pero si desconcertado. Recordaba todo lo que había sucedido la noche anterior, la chica había ido por un tatuaje, terminaron yéndose juntos del local y se encontraban en casa del pelinegro, luego de una noche de sexo, que no estuvo para nada mal. Recordaba como la rubia se movía encima suyo, sus besos calientes y sus manos acariciando su torso, sin duda era buena en el sexo, pero eso no servía para llenar al pelinegro.

Siempre supo que le gustaban los hombres, era 100% gay, pero hacía un tiempo que había estado con un chico, se dedicaba a tener sexo casual con chicas y rara vez lo hacía con un hombre. Suspiro y se sentó en la cama, debía reunirse con sus padres, aun debían acordar como debía "comportarse".

- ¿Piensas irte ya? —la rubia pregunto abrazándolo por la espalda.

- Asuntos que resolver —respondió sin reaccionar ante el tacto de la chica.

- ¿Puedo llamarte luego? —cuestiono con ilusión.

Jungkook no quería recibir una llamada de la rubia, era probable que se apareciera nuevamente por el local, pero no tenía intenciones de volver a verla. Se puso de pie ignorando la pregunta de la chica, se puso los pantalones y cuando parecía que querían atravesarlo con la mirada, se enfocó en la pelirroja, quien lo miraba con expresión decepcionada.

- No te aconsejo que lo hagas —fue la respuesta que pudo darle.

Su celular empezó a vibrar, el nombre de su madre apareció en la pantalla, no respondió y dejo el celular en la mesa de noche. Miro a la chica que se encontraba aun recostada en la cama. ¿Cómo le decía que se fuera de su casa? Era primera vez que traía una chica a casa y aunque no le molestaba, pensaba que no era propio de él.

—el pelinegro se acomodó el cabello y observo a la pelirroja— Debes irte, no pienso dejar a una desconocida en mi casa.

- ¡Eres un idiota! —grito quitándose la sabana y mostrando su desnudez.

Algo que no pasó desapercibido por Jungkook, sus ojos solo podían enfocarse en el cabello rojizo de la chica. Sintió entonces una opresión en su pecho, se sentó nuevamente en la cama, había traicionado a Taehyung nuevamente.

* * *

- ¡La casa huele a sexo! —un grito se escuchó desde la entrada de la casa.

El pelinegro se limitó a rodar los ojos y esperar el gran drama que se vendría.

—un chico pálido se acercaba pisando ruidosamente el suelo— ¿Desde cuándo traes viejas a tu casa? —pregunto cruzándose de brazos, mirando mal a Jungkook.

- ¿Desde cuando eres más dramático de lo normal?

- Siempre —respondió con obviedad— ¿Por qué una chica pelirroja salía de tu apartamento con expresión furiosa?

- Es la primera vez —respondió con sinceridad— Pareces más mi novio y no el de Hobie, te voy a acusar con hyung.

- ¡Mocoso! Hoseok sabe que lo amo solo a él —Yoongi se acercó al comedor y puso las bolsas— Como soy un buen amigo, hermano, casi papá, traje comida, fruta y algunos artículos de limpieza —hablaba mientras sacaba cada cosa de la bolsa.

- ¿Cuándo dejaras de hacer esto? —Jungkook miraba a su amigo con expresión serio.

- Nunca, solo dame las gracias —respondió mirando mal al menor.

- No es necesario que gastes tu dinero comprándome cosas o que pierdas el tiempo preparando comida, puedo hacerlo yo solo.

- Si claro, de no ser por mi habrías muerto hace meses.

Yoongi se percató de que había usado la palabra prohibida. Dio una rápida mirada a su amigo y noto la tristeza que cargaba el pelinegro. Aquella tristeza que no desaparecía con los años, al contrario, parecía que aumentaba.

- Gracias por la comida y los artículos, gracias por todo Yoongi hyung —hablo en tono bajo.

Sentirse en deuda con sus amigos y con su abuelo, era algo constante en Jungkook. A veces pensaba que si no hubiera tenido la compañía de lo que para él era su familia, quien sabe dónde se encontraría en estos momentos.

- Hey ¿Todo bien? —la expresión de Yoongi cambio por completo.

- Todo bien, debo reunirme con mis padres hoy —respondió sintiéndose irritado.

- ¿Cuándo nos harás caso e iras a terapia? —indago preocupado—Lo hemos hablado con el abuelo y tiene buenos contactos, no me gusta verte así.

Yoongi se acercó a su amigo y peino un poco su cabello, aquellos acercamientos no serían posibles de no ser por el estado del menor, habían pasado 8 años de la muerte de Taehyung, lo que en palabras de Jungkook, Tae era su vida entera. El pálido supo que nada andaba bien cuando observo a la pelirroja salir del apartamento, porque Kook nunca llevaba mujeres a su apartamento y menos se metía con pelirrojas.

* * *

El padre de Jimin se encontraba totalmente serio, parecía que su presencia traía malos momentos a su progenitor, algo de lo que ya estaba acostumbrado. Había dejado a su hyung descansando en casa y mientras había ido al hospital a ver a su padre. No había noticias nuevas, la operación aún no estaba autorizada y por lo que le menciono el doctor cuando casualmente se lo encontró por los pasillos, a su padre podrían darle salida para que mejor descansara en casa hasta que programaran la operación. Esa había sido una muy buena noticia, por un lado, pero tendría que quedarse en su antiguo hogar y no le traía buen sentimiento.

- Contrate una enfermera para que me cuide en casa —la voz de su padre lo saco de sus pensamientos— No tienes que venir a casa.

Jimin suspiro ante la confesión de su padre, prácticamente le había hecho un enorme favor, pero aun sentía cierto rechazo de parte del señor Park y eso era algo que lo dejaba triste.

- Como quieras, de todas maneras, iré a visitarte a casa.

- ¿Cuándo entenderás que no necesito que estés aquí? —pregunto enojado.

En ese momento el doctor junto a una enfermera ingresó a la habitación. El pelinegro miro avergonzado al doctor Song, le dio una última mirada a su padre y se puso de pie dispuesto a salir de la habitación e irse a casa de su hyung.

- Gracias por todo doctor Song, mi padre no requiere mi presencia aquí, por lo que me retiro y cualquier cosa que necesite comentarme, puede llamarme.

No espero a recibir respuesta, porque salió de la habitación con las lágrimas queriendo bajar por sus mejillas. Hace mucho no se sentía humillado, su padre lo había prácticamente echado, no necesitaba su presencia y a pesar de la mala relación con su padre, le dolía. 

* * *

Debía transferirle el dinero a Franchesca, había perdido totalmente la apuesta.

Los labios fríos de Jungkook yacían dando pequeños besos en su cuello, culpaba a su hyung por haberlo convencido de irse a divertir, la discoteca a la que habían elegido entrar era nada más y menos que de Kim Namjoon, copas demás, bailes y sudor en su cuerpo, su mente ya borrosa diviso a un Jungkook mirándolo fijamente desde la distancia y siguiendo sus instintos. Se acercó al guapo pelinegro, con su mente ya distorsionada y las ganas de besar a su crush, se arriesgó y con la gran sorpresa de ser correspondido, ahí se encontraban, comiéndose la boca con la atenta mirada de unos hyungs sorprendidos. 

¿Quién Es JP? ~ Kookmin (Finalizada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora