Prólogo: la malvenida

111 7 5
                                    

Pov: T/n

Siempre quise mudarme, alejarme de mi gran y loca familia, alejarme del maldito Gravity Falls.

Pero nunca pensé que me iría en una situación que me haría sentir mal; aún menos pensé que el lugar al que me iría estaría al otro lado del país.

— Mamá, ¿no estamos ya lo suficientemente lejos del pueblo?

— No.— Ante lo seca que estaba mi madre, no me quedó más que acomodarme y dormir, vaya error...

-{ ⨺ }-


— Yo, te veré, donde y cuando no sé, solo sé que pronto yo te encontraré...— Escuchaba un piano ser tocado de una excelente manera, además de una voz algo distorsionada cantar. Me sentía aturdida y estaba tirada en el piso, pero al ver el cuadro de una pirámide con un ojo, manos, piernas, y sombrero, entendí perfectamente donde estaba—. Sé que me escuchas, y vine a agradecerte... Por ti, por fin vivo de nuevo.

— Sal de mi cabeza... No quiero tus agradecimientos... Ni tus poderes... Solo quiero volver a como estaba antes...— Luchaba por levantarme, pero el mareo que tenía era demasiado como para siquiera levantar la mirada.

— Oh, vamos, una parte de ti quería cambiar su vida y alejarse de esos tontos. Y con mi ayuda, no solo podrás hacer eso, ¡también podrás viajar entre mundos, y tener aventuras! Justo como querías.

— Yo... No soy... Stanley Pines... ¡No soy un genio del que puedas aprovecharte..! Apenas apruebo matemáticas con 6... Y yo... No quiero que mi felicidad me cueste la relación con mis padres... Yo quiero que salgas...

— Sabes que eso es mentira, ademas, aún si quisieras, o si yo quisiera, ¡ahora tú y yo somos uno! Pero igual, no creas que a mí me anima mucho estar dentro del cuerpo de una niña de 14 años; al menos Stanley podía pararse en esta dimensión, contigo no necesito esa cadena.— Dijo, y chasqueando los dedos me quitó la cadena que ataba mi pierna a la pared de la "casa"; yo gruñí.

— Tal vez ahora no puedo... Pero verás como te va a ir cuando yo...— Antes de terminar mi amenaza, un punzante dolor me tomó por sorpresa, haciendo que dejará de hablar para no gritar, aún así, no pude evitar chillar por el dolor.

— Jaja, ups, mi error, ¿quién diría que un cuerpo joven es tan sensible a que le arranquen un nervio?

— T...Te mal...maldigo Bill Cifher...

— ...Bueno, creo que ya tienes que irte, pronto llegarás a tu nuevo hogar, ¡gracias a mí! Saluda a tus padres de mi parte, ¿sí? Y cuida no ocupar mucho el brazo.

-{ ◬ }-


Desperté aturdida pero tras unos segundos me recuperé, miré a los lados para reconocer donde estaba y ahí me di cuenta de que el auto ya estaba abierto, ya habíamos llegado. Me acerqué a mi padre, quien apenas me vió puso una cara que denotaba su fastidio.

— Y... Dime, papá, ¿dónde estamos?

— ¿No leíste el cartel de bienvenida al pueblo?

— Estaba dormida...

— Gravesfield, estamos en Gravesfield.— "que raro, el nombre tiene parecido con Gravity Falls... Coincidencia, supongo". Pensé, después fui al carro de nuevo y saqué mi teléfono, cuando sentí un dolor en mi brazo, que no tardó en recorrer al resto de mi cuerpo, chillé levemente pero entonces recordé lo que dijo Bill

Otra clase de demonio ♡ HunterxlectoraWhere stories live. Discover now