NO ME LLAMES "AMOR" ©

Capitulo.31- UN CORAZÓN SELLADO

Un nudo en mi garganta se forma, no puedo llorar. No ahora, tengo que dejar eso en el pasado ya van 7 meses que eso se terminó, 7 meses que no se nada de Marco, 7 meses que salió huyendo como un cobarde, lo último que supe de él es a donde huyo y que se fue con toda su familia.

Cuando en el Instituto se enteraron de todo lo que había pasado comenzaron hablar de ello, algunos decían de que Marco no había huido como un cobarde que se tuvo que ir por otras cosas pero en mi cabeza solo cabía la idea de que huyo.

Cuando él se fue todas las personas en el Instituto me miraban con lastima -algo que yo odiaba-, y comenzaban a odiar a Clarissa, y entonces Clarissa no soporto la idea de eso y su odio se multiplico hacia mi, intentando dañarme cada vez que tenía la oportunidad mientras intentaba hundirme y poner a todos en mi contra. Fue un largo verano en el que sufrí demasiado a causa de Clarissa y el estúpido de Marco. Pero eso es tiempo pasado, no puedo dejar que los errores del pasado dañen mi presente. Ahora tengo a alguien maravilloso a mi lado que amo con locura y no destrozare eso a causa de errores del pasado.

Ya no extraño nada de Marco ni siquiera su estúpido amor hipócrita, pero no es fácil olvidar el dolor, no es fácil seguir adelante cuando te dejan un hueco, cuando ya no confías en nadie mucho menos en el amor, cuando te das cuenta de que todo lo que creías para siempre ya no lo es, solo ahora es un terrible pasado lleno de malos recuerdos que te hunden. Por eso es que me es tan difícil seguir adelante y al recordar quiero llorar por pensar que me utilizaron y que nada de eso fue cierto que fui un juguete solamente, que desperdicie mi vida, que una estúpida chica me hizo la vida fatal que alguna vez desee morirme, que intentaron lastimarme tanto, que ame a alguien que me tiro a una arena movediza y dejo que me hundiera.

Pero ya no llorare más, eso es pasado, algo que no volverá a suceder.

-¿En qué piensas hermosa?- me pregunta una linda voz sacándome de mis pensamientos

Me quedó callada. No puedo hablar ahora, tengo un nudo en la garganta.

Respiró hondo.

>>Tengo que dejar eso en el pasado y seguir adelante<< repito esas palabras en mi mente.

Trago saliva. No lloraré, basta de llorar, sonríe, ¡basta de sufrir!.

-En la vez que conocía a los papás de mi ex Marco-me tragó el nudo en mi garganta

Ian me voltea a ver.

Solo siento mis ojos llenos de lágrimas que aun no salen.

Ian aprieta mi mano con fuerza pero no lastimándome.

-No te quiero ver triste princesa- da un largo suspiró-. No vale la pena

Una lágrima resbala por mi mejilla. Me la limpio rápidamente con fuerza.

¡Maldita sea! ¿No entiendes la palabra "no llorar"?

Cambio mi mirada hacia la venta para después recargar mi frente en el vidrio transparente.

-Háblame de otra cosa, lo que sea pero que no tenga nada que ver con mi pasado- hundo la cabeza en mi hombro y cierro los ojos

Él se queda callado un momento. Tiene la mandíbula apretada y esta demasiado tenso.

-¿Quieres que te platique la vez que fui a tu casa y que tu papá me invitó a cenar y en ese entonces tu me odiabas?- me pregunta

Aún recuerdo ese día, cuando yo me quería largar de ahí sobre todo cuando mi papá nos llamo novios.

-Oh cariño, aun te sigo odiando- forzó una sonrisa

Aquella noche fue una buena cena y la verdad es que son unos buenos recuerdos que no duelen.