Estamos lejos ( Lucerys Velaryon)

Ann

La septa aguardaba en la habitación para dar le la noticia que nadie se esperaba , habían sido dos niñas , una con el cabello como el del rey y el otro como la reina consorte , por más que eran gemelas no se parecían en nada , ni siquiera en el carácter .

La septa ahora encargada de cuidarla le fastidia un poco el carácter rebelde que posee , Alicent asegura que ese no es digno de su casa por lo que culpa al de su esposo , sin en cambio al parecer a ella físicamente hace que el guarde un cariño más grande .

- varios días ha seguido haci parece que no tiene remedio - Alicent gira para ver severamente a la septa - su alteza -

- no olvide solamente que sigue siendo una niña y que ella es la hija del rey , puede comportarse como el animal que ella quiera después de todo tiene más derecho que las dos juntas - la septa asintió sin mas - retira te - le ordenó la reina y la septa salió cabizbaja - y tú jovencita si sigues así me obligaras a casarte

La niña rodó los ojos , retando a su madre

- Ann ¿Qué os dicho ? - Alicent suspiro - al parecer queréis que busque y aparte a un chico feudal para....- la niña negó

- no su clemencia y grandeza reina consorte -

- puedes irte -

Ann se inclino y corrió hasta la habitación de su hermano mayor para hacerle alguna travesura junto con su hermano el príncipe Daeron pero , sin en cambio se encontró con nada menos que el príncipe Jacaerys Velaryon su sobrino , primogénito de su hermana y aquel que le rogó a su madre para que esta le pidiera la mano al Rey Viserys , sin embargo las negociaciones no se dieron dado que Alicent argumento que su hija aún era muy chica para tal enlace , y esa vez no había sido la última , hace poco la princesa Rhaenyra había vuelto a pedir la mano de la princesa para fortalecer el vínculo de amistad y lealtad entre las dos ramas de los Targaryen, pero Alicent no contesto a ninguna apresurando así el compromiso de sus hijos Aegon y Helaena para hacerlo más tarde oficial .

Apesar de todo lo ocurrido después , Ann y Lucerys no se tenían odio entre si , nadie logro entender como una simple niña había evitado el dolor más grande y la enemistad que podría derrocar a un imperio .

- no es justo , Viserys ella es tu sangre - le dijo su madre

- no importa madre , Aemond ganó un dragón yo solo una herida....-

- una marca que será permanente , el daño y todo el sufrimiento que te traerá , será inevitable - se agachó hasta su hija pero ella solo la esquivo

Ann no quería la lástima de nadie ni siquiera de la mujer que decía decir que se preocupaba cuando realmente quería aprovechar se de la situación.

- Sr Criston quiero que el príncipe Lucerys posee la misma herida que la princesa Ann - el caballero asintió sin dudar

- basta madre - grito Ann

Y todo paso como sospecharon que acabaría , la familia de Rhaenyra hacia Dragonstone y ella en la fortaleza roja junto con sus hermanos para terminar de criarlos y que estos satisfacieran al reino y sacar beneficios de las uniones que en un futuro se harían .