La Pasión de Miguel

I

Me habían invitado a la exposición de un desconocido en el museo de arte moderno de la ciudad, por la mañana no tenía ganas de asistir ya que el día anterior tuve mucho trabajo en la editorial y terminé cansado.

Pero al ver nuevamente la invitación que estaba encima de la mesa del comedor, de volverla a leer y quedarme como idiota viéndola me anime a ir.

Espero que el jefe no me pida trabajo sobre esto.

¡Espera Parker! Me digo a mi mismo ¿Con quién vas a dejar a Mayday?

May es mi hija, tiene apenas un año y su madre y yo nos separamos porque ambos buscábamos cosas diferentes tanto en lo personal como en lo profesional y aunque la amo todavía no podía retenerla a mi lado.

La dejaré con su madre. Es todo lo que pensé como resultado para el asunto de mi hija.

Mi mañana resultó común y corriente y a las doce del día empecé a arreglarme para ir a la exposición que iniciaría a las tres de la tarde. Me metí al baño a darme una ducha.

Una hora con veinte minutos después ya estaba arreglado, al verme al espejo note que mi figura no le hacía el favor al traje a la medida que había comprado hace tiempo.

Estaba un poco pasado de peso y...¡No importa! Solamente hay que ir a disfrutar la exposición de...

Salí de casa junto con mi hija en brazos, ella estaba dormida, parecía un angelito

Cinco minutos después llegó un coche azul marino de último modelo, se estacionó frente a mi, era mi esposa que seguía hermosa como de costumbre.

–Espero que lo que estés haciendo no sea tan tardado o peor aún que acabes borracho–tomo a mi niña con cuidado, la puso contra su pecho y la siguió arrullando, MJ se despidió de mi con una sonrisa dejo a la niña en una sillita especial en la parte trasera del coche y después de todo...el coche se alejo.

Caminé hacia la estación más cercana al metro para que me llevará al museo.

Cuando llegue al museo veinte minutos antes de la exposición, en la sala donde sería la inauguración ya había bastante gente que no toda iba vestida de manera formal como yo que le había exagerado a mi vestimenta.

–Sânge, leyendas de sangre y pasión, la colección que te hará creer que los vampiros existen.

Si, como no me dije a mi mismo sin embargo me quedé callado cuando frente a mi estaba una pintura al óleo de una persona siendo mordida por una vampiresa en la oscuridad de una calle parisina.

–¡Para inaugurar está exposición, queda con ustedes el creador de estás magníficas obras: Miguel O' Hara!

Ese tal Miguel ha de ser un total viejito de sesenta años ...

Un hombre quizá en sus veintes, piel morena clara y cabello negro, alto y con una buena apariencia física vestido con una camisa blanca con dos botones desabrochados se acercó al hombre que lo había mencionado.

Ver a Miguel, digo al artista me impacto.

Miguel dio una breve explicación de su arte y que esperaba que el público la entendiera, después de su discurso tomó las tijeras y dió por inaugurada su exposición.

Entre a la sala uno que se llamaba Origen y había algunos óleos y esculturas que contaban la historia de los vampiros

–¿Interesante no?–Una voz grave detrás de mí me espanto

Era la voz de Miguel

–¿Todo lo hiciste tú?–pregunte nervioso

–Todo lo hice yo–me respondió de manera segura–mis manos

Observé sus manos rápidamente

–...crean o destruyen–Una sonrisa maliciosa se esbozo en su rostro

Cuando le iba a decir algo el se alejó de mí y se fue con un joven de cabellos castaños que le había preguntado algo al parecer.

Paso quizá más de una hora cuando Miguel se acercó a mi nuevamente y me propuso ir a platicar a la terraza del museo.

Accedí y nos salimos de la exposición para subir en el elevador a la terraza del museo.

Mientras subíamos en el elevador no podía dejar de observar el movimiento constante de los pectorales de Miguel mientras hablaba .

Parecia que me quería hipnotizar.

–Es la primera vez que subo a esta terraza–le comenté a Miguel pero el no me hizo caso al parecer.

Al salir del elevador note que ya estaba el atardecer en su punto máximo, Miguel agarró con fuerza la copa que tenía en sus manos.

–No he venido aquí a platicar contigo Peter–Miguel soltó de manera sería.

–¿Entonces?

Miguel me empujó a la bodega de intendencia y por poco me tropiezo con un bote lleno de agua, mi acompañante me tenía tomado de las manos, no podía zafarme de el.

–¿Quieres o no quieres, Peter?–la respiración de Miguel estaba entrecortada debido a la excitación que estaba sintiendo.

No sé por qué pero accedí a tener sexo con el.

Miguel sonrió como lo hizo la primera vez y con una fuerza sobrehumana se desabrochó rápidamente el pantalón y la camisa para estar solamente en boxers negros.

A mí me puso contra la pared y me despojo de mi traje quedando completamente desnudo, me dio pena estar así frente a el ya que mi figura...

¡No puedo con esto! Me dije a mi mismo cuando empecé a sentir a Miguel dentro de mi y poco a poco empezó a embestirme.

Primero fue lento y poco a poco subió la intensidad.

En un momento sentí como el cuerpo mojado por el sudor de Miguel se acercó al mío, sentí sus abdominales contraerse con mi espalda,tomo mi mejilla y me dio un beso que me raspo un labio, como si un colmillo me lo hubiera raspado

–Por favor, sigue ...–suplique como si mi vida dependiera de ello, Miguel causaba un placer que sentías que estabas en el paraíso.

De pronto empecé a sentir como las embestidas de Miguel subían con más intensidad, escuché el sonido de unas garras, su respiración parecía la de un león y de pronto.

Todo acabó...

Hola!!!

Esta en sus manos:

¿One shot o continúo la historia? 🤔🤔