VIVE TU VIDA CONMIGO

CAPÍTULO XVI

Camille, despues de haberse dado una ducha y ponerse una pijama se sirve un té para despues sentarse en la barra de su amplia cocina con muchas cosas pasándole por la mente.

Realmente se sentía cansada de la situación pues le estaba costando adaptarse a su nueva realidad, un día era una excelente profesional con una vida exitosa y privada, sin ser criticada o juzgada y al día siguiente seguía siendo aquella excelente profesional con una vida exitosa pero con el ligero detalle de que ahora miles de personas la conocían y algunas de ellas se sentían con todo el derecho de juzgarla como si la conocieran de toda la vida a demás de que ahora sostenía una relación sentimental con uno de los camaleones de Hollywood que a demás era su cliente.

Es algo que jamás hubiera podido imaginar, como ella había dicho un sin fin de ocasiones le resultaba surrealista todo lo que estaba ocurriendo y el giro tan drástico que su vida había dado de pronto la pantalla de su iPhone dorado se ilumina mostrando un mensaje de su adorado amigo y de vez en cuando guardaespaldas, Sean

SB: hey muñequita ¿estas bien?-

CV: si estoy en mi casa-

SB: te pido por favor que cualquier situación sospechosa o que tu creas que es rara no dudes en llamarme o a Mark-

CV: gracias Seanzy, descansa :)-

SB: descansa muñequita de pastel de bodas-

Sube a su habitación y trata de quedarse dormida pero sentía como si algo le hiciera falta y sabía perfectamente lo que era, extrañaba que los grandes brazos del hombre oriundo de Kentucky la rodearan antes de dormir pegándola contra su cálido cuerpo o estar recostada en su pecho mientras escuchaba los latidos de su corazón que la arrullaban para dormir.

No es que hayan compartido muchas noches juntos pero unas cuantas habían sido suficientes para acostumbrarse a esa sensación de paz y armonía que sólo el podía transmitirle.

Al día siguiente siendo fin de semana la mujer tomó la decisión de salir temprano en la mañana y conducir hasta donde sus padres vivían no sin antes pasar un puesto callejero de comida Colombiana para comprar algunas delicias que a su padre sin duda sabía que le gustarían bastante.

Después de tocar el timbre de la bonita y elegante casa, se oyeron unos pasos acercarse a la puerta para que después esta se abriera.

-mi pequeña princesa-dice marilia bástate feliz de ver a su hija mayor

La castaña con una amplia sonrisa se acerca a abrazar a su madre, sin duda necesitaba de aquel abrazo y la calidez que este le transmitía.

Después de saludar a sus padres los tres se encontraban desayunando en el jardín de la bonita y acogedora casa .

-¿hija cuéntanos, como van las cosas con Edward?- pregunta Leonel dándole una mordida a su arepa de queso, la castaña soltó un suspiro y sonrió de lado removiéndose en la silla

-terminamos - responde, obteniendo una mirada fija por parte de sus padres

-¿Porque? Si eran el uno para el otro - dice marilia con un semblante de preocupación llevando su mano izquierda a la base del cuello

- difiero querida, honestamente y con todo respeto hija, ustedes podrán ser idénticos en cuanto a estilo de vida se trata pero en alma son completamente diferentes, simplemente no conectan y eso es bastante obvio-opina el patriarca de los vasquez, en eso el celular del hombre comienza a sonar haciendo que se levante de la mesa y se aleje un poco para contestar aquella llamada.

-¿fue por Christopher cierto?- pregunta Marilia sin rodeos, Camille abre los ojos como platos para después poner una notoria cara de sorpresa.

Christopher...asi era como Marilia llamaba a Johnny pues en una cena de Navidad pasada en la que el actor fue invitado a la casa de los vasquez, el hombre en una conmovedora plática le dijo a la mamá de Camille que por más que amaba su trabajo y las buenas cosas que este le había traído habían ocasiones en las cuales le resultaba bastante abrumador que su nombre se haya vuelto sólo un objeto comercial con el cual algunas personas buscaban conseguir algún tipo de beneficio.