CAPÍTULO VI

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-anoche te llamé y no me respondías, ¿Dónde estas? - pregunta Edward desde el otro lado de la línea

- si, he estado con Shari y Hanna - miente  la abogada con algo de culpa

-¿segura? -

-completamente ya sabes nos estamos poniendo al día - dice mientras juega nerviosa con el borde de su bonito vestido en forma de campana color violeta pastel.

-Camille tu sabes que confío en ti pero porque me estás mintiendo, anoche hablé con Michael para preguntarle algo y me dijo que estaba con Shari en una convención en Washington y que Hanna se había quedado con tus papás, porque no me lo dijiste y así podríamos haber pasado el fin de semana juntos-

-bueno.... Si lo... Lo siento Edward, la idea era ir con Shari pero olvidó decirme lo de la convención y al final pospusimos todo para el fin de semana que viene-responde rendida

-bien pero porque no me lo dijiste-

-quería pasar un tiempo sola y distraerme en otras actividades-

- ¿donde estás? Porque  no me respondiste cuando te llame -

-decidí tomarme un tiempo y venir a Paris-

-¿Paris? ¿Sola? - pregunta el rubio algo incrédulo

-no Edward, no te voy a mentir no estoy sola, Johnny.... - y antes de que la mujer pudiera terminar la oración fue interrumpida por su novio.

-claro es obvio que ese tipo tiene que ver en todo esto, antes no solías mentirme y ahora lo haces, no me digas que te estás dejando  influenciar por ese hombre que ya hasta se te está pegando lo mentirosa-

-un momento Edward no te permito que digas algo así y menos que quieras insinuar que Johnny es mentiroso, no tienes ningún derecho a decir eso porque no lo conoces ni siquiera has tratado con el-responde la mujer con notoria molestia en su voz frunciendo el ceño - y si no te dije que vine a París fue porque quiero estar un rato lejos de todo lo que me agobia - y al cabo de unos segundos se dio cuenta de lo que acaba de decir

-o sea que ¿nuestra relación te agobia? - y un silencio inunda la conversación, lo más lógico es que Camille dijera que no y le profese amor eterno al británico pero a este punto la abogada no está segura de lo que realmente siente por el hombre de intensos ojos celestes.

-hablamos más tarde - opta por decir y sin esperar respuesta alguna cuelga la llamada soltando un pesado suspiro y lleva ambas manos a su cara cubriéndola completamente.

En eso se oyen golpes en la puerta de su habitación en señal de permiso para entrar.

-adelante - responde la mujer

-buenos días cam cam - saluda Mark con una amplia sonrisa

-buenos días -

-venía a decirte que el desayuno está listo -

-gracias bajo en un momento - dice la mujer y Mark no puede contenerse

-Camille yo... Yo sin querer escuche la conversación que acabas de tener con tu chicle británico - revela algo avergonzado

-¿mi que? - pregunta Camille con una sonrisa divertida en su rostro

-oh es así como sean y yo le decimos a Edward y no nos puedes juzgar el tipo realmente parece un chicle no se quiere despegar de ti - confiesa el pelirrojo y Camille suelta una carcajada

-así que escuchaste mi conversación-

-si y me tomo el atrevimiento de expresar mi opinión al respecto -

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