X - ¡Despierten! -

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El clima era frío y la piel de Luzu se erizó al momento de despertar. Un jadeo somnoliento salió de su boca y se sentó con incomodidad por el sólido suelo en el que habían dormido. Sus extremidades se relajaron luego de estirarse y tras entrar en sus cinco sentidos, lo primero que hizo fue mirar a la persona que roncaba a sus pies. Staxxs tenía una curiosa hoja de papel pegada en su frente que se meneaba cada que él respiraba; fue inevitable presentir la sospecha y se paró para tomar la nota.

"Fuimos por unos cigarros, no tardamos ;)"

– Rubius– Pronunció el nombre del quien obviamente provenía la nota y suspiró como si realmente le extrañara algo así.

¿Qué de dónde sacó papel y pluma para escribir eso? Era lo que menos importaba. Ya que hablaba en plural, dio una rápida mirada al resto de hombres en el suelo, y no halló ni a Lolito ni a Juan, debían estar con él, pero ¿En dónde? Pensó, y tan sólo recordar a los dos chicos de la mansión, le caló en toda la espalda.

– Mierda...– Se volvió hacia uno de los cuerpos en específico y se acercó a él. Si a él ya le preocupaba está situación, no sabía qué tanto le pesaría a su amigo, a quien despertó a medias de sólo palmar su hombro– Vegetta, hay un problema.

Apenas abrió los ojos, tuvo que cerrarlos para permitirse tallarlos y evitar caerse inconsciente de nuevo; a Luzu lo escuchó lejano, pero le entendió, ahora sólo faltaba que él formulara correctamente una respuesta con su voz adormecida.

– Hm... ¿Qué tienes, Lucio...?– Se sentó estirando su torso para relajar la tensión en su cuerpo.

– Nos falta gente.

– No me digas...– Con los ojos cerrados, frunció su ceño y reprimió una queja– Doblas.

– También Lolito y Juan.

Finalmente se obligó a alzar sus párpados y confirmó lo que el castaño decía. Se puso en pie y Luzu lo imitó, sabiendo que no quería creer lo que era la aparente verdad.

– Ay, Dios mío– Suspiró con un cansancio emocional muy apagado. Bastante tenía con el oso como para que su novio y el otro tontito le siguieran. ¿Es que ninguno piensa en las advertencias de Sapo Peta? No era el momento ni el lugar para irse a hacer rebeldías o planes secretos, ni siquiera por tratarse de Quackity. De ser el caso, ¿De qué habría servido ponerse todos de acuerdo en ir a rescatarlo? Estaba claro que el hobbie favorito de sus compañeros era sacarle canas verdes.

– ¿Vamos a buscarlos?– Le preguntó sólo para afirmar que estaban en la misma página. Vegetta asintió girándose a él.

– Despertemos a los chicos primero.

– ¡No hace falta!– El chico de casco se sentó en su sitio levantando los brazos al cielo. Las quejas empezaron.

– ¡Cállate, Alex!– Gritó Staxxs.

– ¡Dejen dormir, coño!– Fargan se acostó de lado abrazándose con sus alas que simulaban una manta. Vegetta los contempló como un padre autoritario.

– ¡Nada de volverse a dormir! ¡¿Oyeron?! Debemos ir a por los bobos que se les ocurrió salirse en plena noche.

– Puaj, mejor mañana– Contestó el búho.

Willy se empezó a parar– ¿Un desayuno al menos?

– ¿Qué mierda es esto?– Murmuró el ender tras quitarse un papel pegado en su cara (el que Luzu ya había leído).

– ¡Arriba!– Alexby agitó a Fargan de un lado a otro– ¡Vamos! Que todavía hay esperanza, no nos ha llegado ningún mensaje de muerte.

Soltó un bufido a la vez que su mano era jalada para quedar sentado– ¿Siquiera el chat funciona aquí?

𝙋𝙚𝙧𝙙𝙞𝙙𝙤𝙨 𝙀𝙣 𝙀𝙡 「𝙎𝙈𝙋」 KarmalandV×DreamSMPWhere stories live. Discover now