sobrenatural imaginas

~•Overprotective Brothers? - Crowley

Acompañar a los Winchester tuvo sus altibajos, hoy resultó ser un bajón. Rara vez peleabas con ellos dos, pero cuando lo hacías, se ponía bastante feo. Esta fue una de esas veces. Fuiste a buscar un demonio cuando te dijeron que no debías, estabas en peligro, podrías haber sido asesinada, bla, bla, bla. Para resumir, saliste furiosa y te dirigiste al bar más cercano.

Sentada en el bar con un vaso de bourbon en la mano, estabas enojada porque incluso hubo una pelea. Sobre reaccionaron, de verdad. Puedo cuidar de mí misma, seguías pensando. En medio de tus pensamientos, una voz tristemente familiar vino de tu izquierda.

"¿Este asiento está ocupado?" Dejaste escapar un suspiro de frustración y volviste tu mirada hacia el mismísimo Rey del Infierno.

"¿Qué diablos quieres?" Te quejaste, arreglando

Su atención de nuevo en su bebida.

"Ooh, ¿quién escupió en tu bebida? No hay necesidad de arremeter, Bunny", se rió Crowley y casi escupiste tu bourbon.

"¿Disculpa?" ¿Como diablos acaba de llamarme? Parecía que no había hecho nada malo

"Bueno, están Moose, Squirrel, tenía que pensar en algo para ti, Bunny acaba de encajar"explicó, pero simplemente suspiraste y bebiste el resto de tu bebida, llamando al cantinero por otra. "Lo que sea. ¿Vas a decirme lo que quieres o seguiras molestándome?" suspiraste.

"Olvidé lo ágil que eres cuando estás borracho..." murmuró, sentándose en el taburete de la barra junto a ti. "¿Qué hiciste para enojar a los idiotas de Winchester esta vez?"

Dudaste ante la pregunta, mordiéndote el labio. El cantinero te sirvió otro bourbon, pero esperaste para tomar un trago. "Tuve una pelea..." murmuraste finalmente, bebiendo la mitad del alcohol teñido de caramelo.

"Déjame adivinar, ¿la rutina de los hermanos mayores sobreprotectores?" preguntó Crowley. Lo miraste e incluso en el bar tenuemente iluminado podías ver que estaba sonriendo. "Por suerte para ti, tengo una propuesta que tal vez quieras considerar" Esto te llamó la atención. Tus cejas se juntaron y giraste hasta estar frente a él.

"¿Qué podría querer el Rey del Infierno?" Preguntaste sarcásticamente, sabiendo que esto debería ser bueno.

"Una sociedad. Aunque es posible que los Winchester no lo vean, puedes manejar más que tú misma. Bastante brillante si me preguntas, honestamente no sé cómo los dos cabezas de chorlito no lo ven. Resuelves la mitad de sus casos por ellos, la otra mitad prácticamente los estás cargando a los dos" Pusiste los ojos en blanco, pero una parte de ti sabía que eso era al menos cierto.

"Ve al grano", dijiste entre dientes.

"Todo eso es solo con pistolas y cuchillos, imagina lo que podrías hacer con la ayuda de los demonios", Crowley levantó una ceja y solo un pensamiento pasó por tu cabeza.

"Tienes que estar bromeando", te reíste ligeramente. ¿De verdad cree que dirías que sí a esto? ¿Para ponerse del lado de los demonios?

"Me temo que hablo perfectamente en serio. Serías imparable, seríamos imparables. Y por mi parte, no te impediría patear traseros" habló con tanta calma que estabas convencida de que en realidad era serio.

Sacudiendo la cabeza ligeramente, lo miraste directamente a los ojos. "Gracias por pedirme que traicionara por completo a mi familia, pero preferiría estar detrás del arma, no al frente con ustedes, monstruo de ojos negros" respondiste con calma, pero Crowley solo sonrió para sí mismo. Se puso de pie con cuidado y te volviste hacia la bebida que tenías frente a ti. Hasta que escuchaste a alguien justo detrás de ti.

"Solo piensa en Bunny", susurró Crowley justo al lado de tu oído, enviando escalofríos por tu espalda. Te diste la vuelta, pero Crowley no estaba a la vista.