dazai Osamu termino enamorándose de su compañero de clases, sin saber que hacer gracias a su falta de experiencia en comunicar sentimientos, termina haciendo cartas anónimas para aquel pelirrojo.
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- ¿trampolines? - pregunto con curiosidad el pelirrojo
- si, vamos a los trampolines que están cerca del acarde
- hmmm, bueno por qué no. - acepto chuuya con una pequeña sonrisa.
Era algo raro que dazai quisiera ir a un lugar así, por los niños y gente que podría haber. Dazai no es muy bueno conviviendo a veces. Pero aún así, seguían siendo adolescentes, los cuales solo querían divertirse.
- horas antes -
- dazai, invitalo a salir. - dijo una joven de cabello negro, un poco morado, que tenía un broche de mariposa en el.
- eh? No bromees yosano, el y yo salimos juntos siempre, y eso no a cambiado nada.
- tonto, digo que lo invites a salir, A UNA CITA
- si le digo cita directamente, se va a espantar y no va a querer volverme a hablar
- eres tan malditamente pesimista Osamu, así no lograrás nada, cobarde
- solo soy precavido. - dijo dazai cruzándose de brazos
- precavidos mis pelotas, haz lo que quieras.- respondió la chica, moviendo la mano a forma de que quería expresar desinterés
- ¿Pero como a que lugar podría ir con el- cuestionó el castaño
- tu lo conoces ¿Que cosas le gustarían que no hayan hecho antes?
- mmmm, pues chuuya es algo extremo, le gusta la adrenalina y diversión.
No sabe cómo, pero el,junto a yosano, llegaron a la conclusión de que sería buena idea el llevar a chuuya a un "jumping"
Ya ni siquiera avisaban o pedían permiso a sus padres o tutores, tanto el padre de dazai, como la madre de chuuya, sabían que esos dos eran como mugre y uña, estaban juntos demasiado tiempo.
Al salir de la escuela, fueron directamente al jumping.
Al entrar, se encontraron con que estaba prácticamente vacío, debido a que recién acababa de abrir, y sus clientes eran robados por el acarde que estaba cerca de ahí.
todas esas paredes y pisos cubiertas de trampolines para solo ellos dos.
Comenzaron con juegos tontos, a perseguirse y empujarse, saltando sobre el otro.
Chuuya era alguien muy atlético, se sabía mover bien, tenía mucha agilidad, logrando hacer trucos del tipo gimnasia en el lugar.
Dazai estaba hipnotizado por este chico.
Cómo se divertía y jugaba, como las acrobacias y movimientos de gimnasia lo hacían ver más atractivo.
Comenzó a sentirse caliente, probablemente por tanta actividad física, o eso quería pensar.
