Psicólogo // Finn Wolfhard. [✔️]

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Tn POV

- ¿Cómo has estado? - Preguntó Finn luego de que me comí mi dona.

- Bien, a excepción del golpe - Respondí apretando los labios.

- ¿Por qué lo hizo? - Cuestionó y me encogí de hombros - Tn.

- No estoy evadiendo, lo juro - Levanté las manos - Hacia tantas idioteces cuando estábamos juntos las cuales sigo sin comprender.

- ¿Te golpeaba antes? - Tomé aire.

- Sí - Asentí - Cualquier mínima cosa lo hacía enojar y se desquitaba conmigo, me abofeteaba o me daba puñetazos - Conté y me cubrí la cara - No sé cómo pase dos años así.

- ¿Era así cuando comenzó todo? - Negué con la cabeza.

- Los primeros cinco meses fue todo tranquilo, pero después comenzaron sus celos irracionales y violencia - Suspiré.

- ¿Puedo decirte mi opinión del por qué seguías con él a pesar de todo? - Lo miré y asentí - Despendencia emocional.

- ¿Osea que le tengo que sumar a mi fobia social, agarogobia y baja autoestima, dependencia emocional? - Cuestioné - Soy un desastre.

- No - Me llevó la contraria - Tn, si soportaste eso es porque lo querías - Habló - La persona suele soportar tantos maltratos por no perder a la persona porque la quieren.

- ¿Enserio? - Asintió.

- Creeme que no eres la única que ya podido pasar por eso, hay miles de personas que podrían estarlo viviendo ahora - Informó - No te tortures por eso.

Sonreí sonrojada y él me devolvió la sonrisa.

- ¿Haz hecho lo del espejo? - Preguntó y yo aparté la mirada - Tn, ¿Enserio?

- Se me olvida - Me excusé y él entrecerró los ojos - De verdad.

- Hazlo, ya han pasado tres meses - Asentí.

El resto de la sesión seguimos hablando tranquilamente aunque en ocasiones me hacia reír con algunas cosas.

- Eso sería todo por hoy - Habló cerrando el cuaderno - Nos vemos el miércoles.

- Nos vemos Finn - Sonreí y me levanté - Adiós.

- Adiós - Sonrió.

Salí del consultorio para dirigirme de regreso a mi casa.

...

Antes de llegar pregunté en varias tiendas de belleza el tono de mi cabello natural porque ya estaba cansada de decolorarlo de rubio.

Mi tono era castaño algo claro y no sabía cuál era con exactitud, pero mis raíces eran notorias.

Cuando logré encontrar mi tono inmediatamente compré el tinte y volví a mi casa.

Subí a mi habitación y me recosté en la cama mirando el techo y en solo segundos caí dormida.

...