Rutina

47 7 1
                                    

Entrenar con esta familia era desgastante emocionalmente, aunque su lema era tratar a los guardaespaldas como familia era obvio que solo utilizaban a muchas de estás personas como animales de cacería. El entrenamiento era parecido a un lavado de cerebro, hacían que todos estuviesen dispuestos a dar la vida por la familia sin pensarlo, sinceramente en casa de lo primeros era igual, pero por alguna razón aquí sentía que me usaban.

La primera vez que vi a Vegas posterior a mi primera noche aquí fue una semana después de comenzar mi entrenamiento, él parecía estar algo borracho y me miraba extrañado, cómo si quisieras descifrar algo. Ese día escuché gritos y llantos en su habitación, posiblemente una pelea con Tawan. Esas escenas se repitieron día y noche durante aproximadamente dos semanas, y aunque eran insoportables, de alguna manera me satisfacía saber que Tawan sufría. Habría dado lo que sea por seguir escuchando eso antes que los ruidos de placer que procedieron a salir de su cuarto el viernes de su reconciliación.

Después de vivir tres semanas en este lugar llegué a la conclusión de que este era el peor trabajo que había aceptado. Usualmente vigilaba a las víctimas una o dos semanas consecutivas antes atacar, los investigaba a profundidad y cumplía en un plazo de máximo un mes, claro siempre haciendo un trabajo de calidad. Sin embargo, en este caso, el plan de Vegas no avanzó nada las primeras semanas de mi estadía, y por ende, podía descifrar que esto tomaría más tiempo del necesario, además vivir en este lugar era sofocante y ver a Vegas con Tawan me asqueada.

La negativa de Vegas hacia revelarme nuevas partes del plan me frustró demasiado al comienzo, así que solo pude dedicarme a entrenar, lo cual era la única forma de mantener mi mente ocupada. Al mismo tiempo, pensé profundamente en mi venganza, sabía que el único punto débil y alcanzable de Tawan era Vegas, pero no sabía cómo proceder en ello. Mi primer pensamiento fue enemistar a ambas partes, pero descarté la idea cuando vi la manera en la que Vegas le trataba, parecía constantemente molesto y fastidiado de él, pero apresar de esa pésima actitud Tawan jamás se enojaba, era obvio que no se alejaría por una pelea. Mi segundo plan consistía en conseguir otra pareja para Vegas, pero eso parecía muy difícil, lo siguiente fue tratar de conseguir que Tawan engañara a Vegas, para conseguí pruebas de infidelidad y hacerlos terminar, pero la devoción de ese estúpido a su novio era infinita. Al final del primer mes había elaborado al menos un plan por cada letra del abecedario, pero no había llevado ninguno a cabo, principalmente porque no quería poner en riesgo la misión principal, necesitaba el dinero, necesitaba asegurar la vida de mis abuelos.

Mis días giraron entorno al plan y al entrenamiento durante demasiado tiempo, así que, cuando por fin dieron por concluído mi periodo de entrenamiento sonreí ampliamente y me dirigí a la oficina de Vegas.

-Solo escucha- ordenó en cuanto entre a la habitación. - Te una serie de infiltrados entre los guardias de la primera familia, necesito que los conozcas antes de entrar, generalmente me informan de la situación una vez a la semana, cumplen con tareas sencillas dentro de la casa, así que ellos te cubrirán y te ayudarán dentro.

-Bien, ¿Cuándo entraré?

-Te dije que solo escucharás- advirtió.- No puedo dejar que te unas directamente, porque aunque regreses jamás volverás a ser la mano derecha de esa familia, no después de lo ocurrido.

-Eso lo sabíamos desde el inicio, yo te dije...

- Pete no interrumpas y solo escucha- comentó algo frustrado.- La única manera de hacer que ellos recuperen la confianza es que tú mismo expongas a Tawan.

- ¿Y cómo demonios se supone que haré eso? - expresé disgustado.

-¡Mierda Pete!- exclamó levantándose de su asiento y me tapó la boca con su mano.- Solo cállate y escucha, es todo lo que te pido. Fabricaremos pruebas para inculpar a Tawan, el va a copera así que no te preocupes por ello, ahora mismo céntrate en aprender la información que hay en las carpetas de la mesa, son los datos de las personas infiltradas, sus funciones y en qué te pueden ayudar. Durante la semana me acompañaras en las reuniones con ellos para que los conozcas, así que aprende rápido. ¿Entendido?- preguntó a lo que solo pude asentir con la cabeza, tenerlo tan cerca resultaba extraño y su mano en mi boca me ponía nervioso. - Tus labios son suaves- dijo quitando su mano lentamente, arrastrando un poco mis labios con sus dedos. Bajo su mano un poco y tomó mi barbilla con algo de fuerza, acercando nuestras caras, lo que me hizo ponerme en guardia. - Te estoy dando información importante y valiosa, confío en ti Pete, no sé te ocurra traicionar mi confianza, recuerda que yo puedo ser más peligroso que la primera familia- advirtió sonriendo.


PsychoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora