Trabajo

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Pete: Está hecho, deje el dinero faltante en el lugar acordado

Pete: *Foto*

R: El dinero está ubicado

Pete

Recogí el bolso con dinero y me dirigí a casa, hoy había asesinado a un exjefe militar, era un tipo bueno en combate pero estaba viejo así que no tuve muchas complicaciones en entrar a su casa y dispararle, montar la escena del crimen para que luciera como un suicidio tampoco fue difícil, el pobre hombre estaba solo y era odiado profundamente por muchos, nadie lo extrañaría demasiado para indagar la verdad.

Una vez llegué a casa tomé una ducha y me recosté en cama a contar el dinero, debía separar una gran suma para enviársela a mis abuelos y que así se mantuvieran ocultos de la primera familia. Había pasado poco más de un año desde que el infeliz de Tawan me había inculpado. Cuando escapamos comencé a tener trabajos pequeños pero ninguno me daba lo suficiente para mantener a mis abuelos ocultos, así que cuando un tipo en un bar me ofreció dinero a cambio de matar a un par de personas no me pude negar. Al comienzo me prometí que solo estaría en este negocio hasta que mis abuelos se establecieran en otro país, pero los gastos son altos y si dejo esto jamás podría mantenerlos a salvo. 

Había pensado en la venganza hacia Tawan pero no encontraba la forma correcta, el solo matarlo sería muy misericordioso, aún más después del infierno que hemos vivido por su culpa, además de hacerlo jamás podría demostrar mi inocencia y jamás viviría en paz de nuevo. Le di vuelta al asunto un par de veces en mi cabeza mientras cenaba, pero las ideas no venían a mi, así que decidí ir a dormir dejando el tema de lado.

Vegas

-¿Ni siquiera puedes matarlo?, ¿no puedes hacer ni eso bien?- gritó mi padre

-No es fácil es el líder de la primera familia- dije con la mirada baja.

-No importa, él me mató, debes tomar venganza.

-Tu jamás pudiste matarlo en vida y esperas que yo lo haga en ¿un par de meses?- dije, a lo que el respondí con un golpe.

-Realmente eres un inútil, no me levantes la voz- gritó y me tiró al piso- No importa si estoy vivo o muerto, yo siempre estaré por encima de ti.

Me levante de la cama bruscamente, mis sueños habían sido pesadillas desde que él había muerto, parecía un fantasma siempre acechando, siempre dispuesto a hacerme ver lo inútil que yo era. Bajé a la cocina por un vaso de agua, el cual terminé aventando contra la pared cuando lo vi.

-¿No se supone que llegabas mañana?

-Tawan te quería sorprender, ¿no estás feliz de ver a Tawan?- dijo y corrió hacía mi mientras hacía una cara de triste insoportable de ver.

-No me gustan las sorpresas, si dices que harás algo de una manera más vale que lo hagas así-contesté con brusquedad evadiendo su abrazo.

-Deberías tratar mejor a tu prometido, Tawan se siente triste.

-Si, tratarte mejor, claro- dije y me di la vuelta.

-Te ves cansado, ¿Tawan debería ir a la habitación a prepararte una sorpresa?- dijo y me rodeo por la espalda, el sexo con él no era nada especial pero servía para descargar mis emociones, justo lo que necesitaba en este momento.

-Claro, espérame allá- dije y me solté de su agarre antes de caminar a mi estudio.

En cuanto encendí la computadora mi contactó envío un correo.

R: Señor, conseguí el contacto.

Yo: ¿Verificaste la información?

R: En efecto, es el mejor.

PsychoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora