El dibujo (Dia 527)

En başından başla
                                    

En la universidad existe una clase en donde nos revuelven con alumnos de otras carreras, ahí conocí un nuevo amigo llamado Edwin un chico sumamente alto de tez morena clara quien estudiaba ingeniería en sistemas, el y yo nos comenzamos a llevar bastante bien a los pocos días de conocernos.
En esa clase llamada Literatura y redacción la maestra Paty quien era psicóloga nos pidió realizar un dibujo de una mujer y al reverso de la hoja un hombre, Edwin y yo realizamos tal actividad resaltando que ninguno de los dos era gran dibujante, la maestra fue llamando uno a uno a su escritorio y mantenía una conversación bastante personal y alejada de todos según su dibujo, por cierto por mi apellido iniciar con la letra "R" ese día no me tocó pasar con ella, hasta dos días más tarde.
— Reynoso Gema mencionó la maestra desde su lugar
Levante la mano de manera sigilosa y ella me pidió pasar a su lado, me levante de mi lugar y me acerqué a ella
— Siéntate Gema dijo mientras señalaba la silla gris frente a ella
Primero observó fijamente el dibujo de la mujer y mencionó algunas cualidades mías así como inseguridades con mi cuerpo y en forma de ser, quede totalmente asombrada pues lo que decía era verdad, después dio la vuelta a la hoja y mencionó que a mi lado tenía un buen hombre quien también tenía una inseguridad, dijo algunos aspectos positivos de Gerry y de nuevo quede asombrada, no podía creer que me estuviera diciendo cosas de las cuales yo no le había mencionado, después de mencionarme varios aspectos de ambos dibujos bajo la hoja y la coloco en el escritorio, tomó un gran respiro y se puso seria
— Gema, pide notar algo en tu dibujo que llamo bastante mi atención.
— ¿De que se trata maestra?
Ella me miro fijamente a los ojos y me hizo una pregunta la cual sacaba a la luz mi más grande secreto que nadie más que mi madre sabía, ni si quiera Gerry ni mis tíos conocían eso de mi.
Ante sus palabras no pude contener mis lágrimas pues me sentía totalmente expuesta, no podía creer que tantos años lo oculté y en segundos una desconocida lo descubrió, me preguntaba que tanto lo reflejaba mi personalidad para que aún me afectara si aquel hecho llevaba más de 10 años escondido y según yo era algo que había quedado superado y olvidado, no respondí nada a su pregunta solo baje la mirada y sentí mi rostro caliente y seguramente color rojo
— Maestra ¿Me puedo ir a mi lugar?
Ella acarició mi mano con la de ella — Ve a tu lugar Gema, si gustas salir puedes hacerlo.
Seque mis lágrimas con mis dedos, tomé un respiro y volví a mi lugar junto a Edwin
— ¿Que te dijo la maestra Gema?
Sonreí y le platiqué la mayoría de cosas excepto lo último
— ¡Woow! Es como una especia de bruja ¿o algo así?
Reí ante tal comentario y blanqueé los ojos.
La maestra llamó a Edwin y él se acercó a ella, lo espere pacientemente y cuando volvió lo primero que dijo fue — Gema, si es como una bruja la maestra
Volví a reír y pregunté lo que le había dicho, él me platico algunas cosas y volví a asombrarme pues ella mencionó un futuro bebé y para la sorpresa su novia se encontraba embarazada de apenas pocos meses, charlamos un poco acerca de lo sucedido hasta que la clase finalizó y cada uno volvió a sus respectivos salones.
El día entero no paraba de pensar en lo que la maestra Paty me había dicho, la pase completa te sería durante las clases y en descanso decidí no salir a comer, no me sentía con él suficiente humor. En la última clase la de el Maestro Esau, mi profesor favorito con quien participaba en varias ocasiones me pidió salir del salón lo cual me sorprendió y me asusto pues me preguntaba que había hecho mal, me levanté de mi lugar y me dirigí hacia la puerta, pocos segundos después él salió tras de mi
— ¿Que sucede estudiante? Pregunto
— Nada profesor todo bien
— Te notó diferente el día de hoy, en clases pasadas eres participativa y hoy ni siquiera estas haciendo la actividad que pedí realizar
— Ahorita me apuro a hacer su actividad maestra dije con la mirada hacia el suelo
— No es por la actividad Gema, es por el hecho de que mi labor como docente no solo es proporcionar conocimiento también es detectar cuando algo no está bien y ofrecerme si es que desean platicarme lo que sucede, eres una buena estudiante y creo que algo está pasando contigo, si deseas hablar te escucho y si no es así puedes salir a comprar algo o a caminar un poco para despejarte.
Levante la mirada, lo vi a los ojos y me inspiró tanta confianza que quise platicarle lo que sucedía pero no podía hacerlo, nadie tenía que saber ese secreto así que le platiqué lo que había sucedido con mamá, le dije que me tenía sensible tal hecho.
Él me brindó algunas palabras de apoyo y después de ellas le pedí volviéramos a la clase.
— Si gustas puedes tomarte la clase y salir a caminar un poco, por la actividad de hoy no te preocupes.
— No se preocupe maestro, puedo continuar en el salón sin ningún problema
— ¿Estás segura?
Lo mire a los ojos y di un si con la cabeza
Entré al salón de clases nuevamente y a pesar de no haberle platicado lo que realmente sucedía sus palabras me ayudaron bastante a resolver uno de mis conflictos, el problema con mamá. De igual manera me motivo a él día que yo sea maestra observar a mis alumnos y no solo preocuparme por su aprendizaje si no también por su bienestar, desde ese día con mayor razón se volvió mi profesor favorito.
Cuando llegó la noche y llegue a casa cansada por la escuela y sentimental por todo lo que había pasado durante el día me acosté sobre mi cama olvidándome de toda tarea, le escribí a Gerry que dormiría temprano pues no me había ido del todo bien, de inmediato recibí una videollamada de él preguntando que hacía sucedido, por supuesto tampoco le podía decir así que sólo le expliqué que había sido un mal día
— Cena algo rico y descansa preciosa
— No tengo hambre
— No puedes ir a la cama sin comer
Lo que él no sabía es que la muchos días iba a la cama sin probar alimento pero su insistencia hizo que fuera a cenar con él en la pantalla de mi celular para corroborar que si me alimentara, al terminar fui a la cama con la idea de dormir lo cual no logré del todo pues no salían de mi cabeza las palabras de la maestra Paty.

1460 días junto a él Hikayelerin yaşadığı yer. Şimdi keşfedin