41: El Monumental

6.4K 502 182
                                    

JAZMÍN.

Semanas después.
Lunes, 20 de marzo.

Habían pasado varias cosas desde los premios. Todo mejoró para Emiliano. No había perdido ningún solo partido con el Aston y la emoción de volver a casa está latente. Ver a todos los chicos reunidos, a las familias. Es algo que esperabamos con ganas.

Emi y yo nos preparamos el domingo temprano, para un largo viaje de Inglaterra a Ezeiza. El amistoso contra Panamá se jugaría recién el jueves, pero los chicos debían estar días antes para entrenar como selección.

No iba mentir, me moría de ganas de verlos jugar a todos. A ser un equipo unido de nuevo. Sabía que Emi era feliz con ellos, todos los chicos se la pasaban muy bien. Y eran campeones del mundo, la concha de su madre... claro que iban a estar felices de volver a pisar una cancha como equipo.

—Que ganas tengo de ver a los chicos, hace rato no los veo —dije, felizmente. Emi sonrió y me siguió manteniendo sobre el, ofreciéndome calidez.

—Debes extrañar a tu hermano vos.

—Re sí —sonrío enormemente— Pero ya lo voy a ver, viste. A todos. ¿Vos no estás feliz por verlos?

—Claro que sí, Jaz. Ni siquiera me importa ganar o perder el amistoso. Nada se compara a la felicidad de volver a jugar con los chicos y compartir con los hinchas. Ese es el verdadero propósito de todo. ¿No?

—Tenés razón —asentí, acariciando su pelo— Ví que sería toda una fiesta. Altas ganas de conocer a Wos y lanzarle mi bombacha.

Emi me miró mal, a lo que me cagué de risa. Me empujó de su regazo, mientras yo me reía a carcajadas.

—Y con ésta loca me voy a casar —susurró para si mismo, rodando los ojos.

—Y el que soporte, mí rey —le lancé un besito. El se levantó "enojado" a servirse un vasito de agua. Estábamos en un Jet privado, bastante lujoso, de camino a Ezeiza.

—Sos una inmadura.

—Pero ésta inmadura te gusta mucho —lo provoqué, aventándome sobre el. Emi me cargó sobre su cuerpo y comenzamos a besarnos, como los hormonales que éramos.

Había que aprovechar, antes de el embarazado me impida hasta agacharme.

—No solo me gusta, sino que la amo —me sonrió, revolviéndome el cabello— Mi minion favorita.

—Ay, callate.

. . .

Llegamos temprano al predio de la AFA, aunque me moría de sueño. Las familias no tenían permitido ingresar al predio con los chicos, pero Scaloni hizo una excepción conmigo. Anto y sus bebes por ejemplo, tuvieron que marcharse a Rosarito.

Igual, no iba a abusar de la hospitalidad de la selección. Me comunicaría con mi familia de San Martin para ir con ellos. Los chicos debían entrenar, no quería ser una distracción para ellos. Solo era un partido amistoso, pero igual no había que subestimar al rival. Imagínense tanto show y terminaba ganando Panamá. Sería un poquito vergonzoso.

Aunque confiaba en que ambas selecciones nos darían un partido digno.

—Pero si es nuestra minion favoritaaaa... —gritó Licha, apareciendo en compañía de Nahuel y de Cuti. Yo me reí, corriendo hasta ellos.

—¡Pero si es la banda del palo santo!

—Dejaaa ¿Hasta vos viste eso?

—Igual el humo me llegaba hasta mí eh, nada que ocultar —los miré divertida y nos abrazamos todos. Sí, hasta Cuti.

Fugaces | Dibu Martinez (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora