Catástrofe [Gally y tu]

Capítulo Quince

"Love you like a brother, treat you like a friend, respect you like a lover"
Sure Thing - Miguel

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Capítulo Quince

Desperté temprano, pasando por las hamacas, note a Gally en el suelo, al lado de Chuck, sonreí. La hamaca al lado de Teresa seguía vacía. Después de lavarme los dientes fui a ver las puertas del laberinto, que no tardaron en abrirse, viendo a el pequeño Tomás del otro lado. Dedicándome una sonrisa y corriendo abrazarme.

—Me fue muy bien. Mate a tres— lo vi sorprendida.

—Ve y dile a Sartén que te haga un buen desayuno con tocino, es una orden— el chico, exhausto, siguió la orden. Después fui a darme un baño y demás cosas.

Fui a la cabaña a cambiarme y me tope a Gally acostado en la cama.

—Te extrañe.

—¿Sí? ¿Cómo te fue?.

—Mi espalda duele. Dormí en el suelo.

—Te lo merecías.

—Lo sé, ven— palmeó a su lado. Arqueé mis cejas.

—¿Quieres dormir?— asintió —¿El gran Capitán Gally faltará al trabajo?.

—No, solo llegaré tarde. ¡Oh, vamos! ¡Mi espalda está matándome!— cerré la puerta con seguro detrás de mí y me arroje a la cama, Gally inmediatamente me tapo con las cobijas, quedando los dos tapodos viendonos cara a cara, mientras el posaba su mano en mi cintura —Te amo, perdón por lo de ayer— mis ojos podían estallar, me había dicho que me amaba.

—También te amo, Gally— bese su frente.

—Abrázame— hice caso, se puso boca arriba y yo apoye mi cabeza en su pecho, y me mano la metí por debajo de su camisa —¿Me la quito?— sentí el calor subir por mis mejillas. Y asentí. Él se deshizo de ella y besó mi frente. Volvimos a nuestra posición, yo sobre él. Y caímos profundamente dormidos.

Al despertar, observé la cara de Gally. Tranquilo, pacífico, como si no hubiera ninguna preocupación en este mundo. No fui capaz de contenerme y besé sus mejillas eufóricamente. El despertó riendo. Sacó su mano de la manta y acarició mi collar.

—¿Qué es?.

—Es…Un collar, me lo dio George— el arrugó la frente.

—¿El de la lápida?...

—Sí…Fue el tercer habitante aquí, desgraciadamente, no pude salvarlo, no sabía todo lo que sé ahora, y no pude. El día que íbamos a escapar, me dio esto, para que siempre lo recordará, supongo que, por si él no lograba salir.

—Fue lindo de su parte…¿Qué le pasó? Si puedo saber.

—Corrió por la noche, y no regresó.

—Lo siento…

—Está bien. Me motiva, trato de verlo así, me esfuerzo en salir de aquí todos los días, porque sé que él lo hubiera querido así. Y estamos cerca— continuó jugando con el collar, hasta que su mano se deslizó a mi hombro, acariciándolo. Una pequeña corriente eléctrica me recorrió, acaricie su espalda, el se removío, rozando su pelvis con la mía y bajo sus manos a mis caderas, haciendo pequeños círculos.

—Estuve pensando en lo de ayer. Todo el drama con Teresa y demás. Y, quiero pedirte algo— asentí —Quiero que seas mía— un escalofrío recorrió de la punta de mis dedos de los pies a mi cabeza —Y yo quiero ser tuyo. No quiero que nadie más se interponga, no más besos con otras personas. Mantengamos lo nuestro, solo nuestro.

—Gally, te amo— me acerqué a él, y junté nuestros labios. Él me permitió acostarme, posó su mano en mi cintura mientras jugaba con su dedo. A medio beso, suspire.

—¿Y sí no salimos?.

—¿A qué te refieres?.

—¿Si nos pusieron aquí con la intención de nunca salir?.

—No, Gally, sé la salida— después de contarle a detalle mi información, él asintió.

—_____, no todos somos corredores.

—¿Qué significa eso?.

—¿Cómo sacarás de aquí a treinta chicos, con cinco defendiéndolos?...Lo que digo es, que debes entrenarlos a todos, para salir. Además, no conocemos el laberinto, necesitamos separarlos en grupos para eso— asentí. Tenía razón.

—Estás en lo correcto. Debo entrenarlos a todos.

—Ahora no— suspiro y metío su cabeza en mi cuello, dando un beso en mi cuello —Estoy muy feliz ahora.

—Ahora no— sonreí, besandolo.

—Hay que dormir.

—¡Gally!— golpeé su pecho —Es lo único que hacemos siempre— rei.

—Trabajo mucho— se encongió de hombros —Y me siento bien durmiendo contigo.

—Yo tambien— le di un toquesito en la nariz.

—Entonces...

—Vamos a dormir.

—Yey— me tomo por las caderas y me puso sobre él, regresando a nuestra antigua posición, donde él introdujo sus manos bajo mi camisa y yo bajo la suya.

Dos días después

Hoy daría el anuncio, de que todos pasarían un entrenamiento intensivo de tres días para salir. Pues ya habíamos confirmado nuestras sospechas de la salida del laberinto.

Preparé mis cosas y las de Minho, para después dirigirme al centro de la explanada, donde Alby y Newt ya estaban.

—Como algunos ya saben, el trabajo de los corredores yace sobre la base de encontrar una salida. Después de mucho tiempo, me complace anunciar que lo hicimos— todos animaron —Salir no será fácil, puesto que somos cinco protegiendo a treinta. Así que, para conseguirlo, todos— dirigí mi mirada a el pequeño Chuck y Teresa —Pasarán por un entrenamiento intensivo, aprenderán a defenderse, no esperamos que sean tan rápidos como un corredor, o tan fuertes como un constructor, ni siquiera tan ágiles como los carniceros, solo esperamos que cuando necesiten enfrentarse, podrán. ¡Porque yo no me iré de aquí! ¡Hasta que todos y cada uno de ustedes salgan! ¡Si no salen los cuarenta de ustedes, será porque morí por ello!— observe a mis amigos hacer una mueca, mientras el resto gritó con fuerza, levantando sus puños en el aire —Alby les comentará sus horarios de práctica.

—¡Bien! ¡Serán tres horarios, diez en cada uno!...

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Fin del Capítulo Quince

Capítulo Dieciséis: Disponible el Lunes 20 de Marzo

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