O4.

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no estaba solo.

a comparación de lo que su simpático jefe diría, él realmente tenía a alguien de quien preocuparse: su hermana menor.

juyeon dejó su casa una vez se graduó, algo obligado por su madre, pero al menos tenía su departamento con ayuda y suerte.

él decía que lo hacía para dejarla "tranquila", pero en el fondo era por algo más profundo que eso.

por eso, rápidamente apareció la necesidad de ser un hermano presente.

además de que eunchae era encantadora, juyeon daría todo con tal de que la menor tuviese una buena adolescencia. y quizás, algo diferente a la suya.

a sus dieciséis años ya estaría experimentando los típicos deseos de despegarse del lado maternal, lo que evidentemente provocaría que buscase sabiduría en su hermano mayor, y él no tendría problemas en guiarla.

entonces ahí estaba, parado frente a la escuela de su hermana, esperando a que ésta saliera.

agradecía al cielo porque las clases de eunchae acabasen en la mitad de su horario de almuerzo, porque aún y con lo que conocía al amargado de jaehyun, sabía que éste jamás le dejaría salirse del horario laboral para ir a ver a su hermana.

aunque sonrió cuando se imaginó desafiando a su jefe con eso. era divertido pensar en formas de molestar a jaehyun.

para cuando tuviera más confianza, claro.

solo debía esperar unos... muchos años.

en medio de ese pensamiento, vió a eunchae -no muy difícil de notar-, misma que dejó a sus amigas perderse en el camino apenas divisó a su hermano, corriendo a él en un abrazo.

- ¡juyo! -solamente sus más cercanos le llamarían así, en realidad le avergonzaba un poco. era el clásico apodo que te dan de pequeño y que jamás se olvida- creí que estabas ocupado, ¿qué haces aquí?

- y lo estoy, pero siempre tendré tiempo para ti, tonta. - se separó de la menor para sostener sus hombros. - escucha, hoy vamos a hacer algo importante. vas a acompañarme a mi trabajo.

- ¿a cj? ¿por qué?

- ahora estoy en un nuevo lugar, debes saber donde encontrarme si mamá no contesta, pequeña. por cualquier cosa.

- de acuerdo, déjame mandarle un mensaje a mamá antes de-

- no le digas que estarás conmigo. no quiero que tengas problemas.

- sí, tranquilo. aunque, - la menor suspiró con algo de peso. - últimamente ha estado enferma, y eso la pone tan irritable a veces. ya ni siquiera puedo mencionar tu nombre... me pone un poco triste.

no quería lamentarse con su hermana, o más bien, frente a ella. era normal para él fingir ser la figura fuerte y responsable, sin embargo, nunca dejaba de doler.

- ya veremos que hacemos con eso, pero hoy me vas a acompañar un ratito. ¿bien?

- de acuerdo. - eunchae sonrió, y a juyeon le encantaba como ella podía arreglar su ánimo con solo una sonrisa. - me parece que estás un poquito-muy emocionado por tu nuevo trabajo, eh. ¿conociste a alguien? ¡cuéntame!

ni con su hermana podía ser menos obvio, fin.

- ¿quién te dijo que podías cuestionarme de esa manera, lee eunchae?

- nadie, pero eres mi hermano y te conozco. siempre quisiste llegar a cj.

c. j.

chanhee. jaehyun.

chocolates & faints ♡ (  jujae  ) Where stories live. Discover now