Historias cortas de Babymetal y Sakura Gakuin

Borrachera

- Pero tú te encuentras igual o peor que ella, Raura

- Nah, nah, no te preocupes, Moa. Esta Jefa Panda se hará cargo de La Reina

- Déjame que las acompañe, por favor

- Tranquila, Momo-chan. Tú sigue de fiesta con Nene-don y Moa, ¿ok?

- Ok, Rau-chan...

- No te preocupes, Moa. Rau sabe cuidarse muy bien

- Eso ya lo sé, Nene-don. Pero a decir verdad, no estoy preocupada por Raura o por Su

- No te entiendo, Moa-chan

- Mira, te explico mejor lo que quiero decir, Momo-chan. Raura, sobria, es de temer

- Muy cierto, muy cierto

- Sin embargo, Raura ahora se encuentra completamente borracha. A lo que voy es... ¿¡quién cuidará a las demás personas, de una Raura borracha!?

Nene y Momoko comenzaron a morirse de la risa frente a la ocurrencia de Moa, quien también comenzó a reírse a carcajadas de su propia broma.

- ¡Ayyyy, las odio!  ¡Especialmente a ti, Kikuchi!- gruñó Raura.

- Es solo un chiste, Rau. No te enojes con Moa

- Ya, ya, Nene-don. No me enojo. Bueno chicas, estos dos hermosos y sensuales cuerpos les dicen adiós

- Adiós, Rau. Adiós, Su - saludó Nene.

- Chau, senpais - se despidió Momoko.

- Adiós Su-chan, hasta mañana - musitó Moa.

- A-adious... adious... c-chicuas...ayyy, ya no puedo ni hablar...

- Jajajaja ¡Estás muy borracha, Su!

- Jajajaja - rieron Moa, Momoko y Nene al unísono, viendo como Suzuka y Raura se alejaban.

- Mira cómo te encuentras. ¿Quién diría que la grandiosa Su-metal, no puede aguantar más de tres tragos?

- Hey, tú tampoco luces muy bien que digamos, Rau-chan

- Bueno... pero yo sí tomé más de tres tragos, Reina

- Jajaja, deja de llamarme así, Jefa Panda

- Jajajaja, a mí me gusta mi apodo. Todas las chicas me obedecían cuando entraba en modo Jefa Panda, durante nuestra época en Sakura Gakuin. ¿No lo recuerdas?

- Pfffffff. A mí me obedecían mucho más cuando entraba en modo Su-metal, querida Pandita. - Suzuka acercó su nariz a la mejilla de Raura y la frotó tiernamente, y torpemente también, debido a su borrachera.

La Jefa Panda no pudo evitar sonrojarse frente a ese acto tan repentino, y tan dulce, que realizó La Reina.

- Ayyyyy, no hagas eso, Su-chan...

- ¿Qué cosa? ¿Esto, Pandita?

Suzuka tomó el rostro de Raura y comenzó a frotar nuevamente su nariz sobre la ahora acalorada mejilla de su amiga.

- Sí, eso mismo. Es muy.... es muy...

- ¡Tierno! - exclamaron ambas chicas al mismo tiempo.

La coincidencia hizo reír mucho a las dos, quienes continuaron abrazadas con sus pasos erráticos en dirección a el departamento de Suzuka, llevándose todo por delante.