Un rato más esperando y llego su amigo, Rissotto, se saludaron como de costumbre y conversaron un rato hasta que abrieran el segundo piso, ya ahí podía sentirse un poco más a gusto, pidieron algo de beber, un cigarro y se propusieron a jugar ajedrez mientras charlaban.
—Abbacchio, ¿Por qué no viniste el sábado? ¿No dices que estás de vacaciones?
—Ah, eso— suspiró moviendo su primera ficha, un peón —Me fui de vacaciones una semana
—¿Con tu novio?
—Hm— asintió —Fuimos a la casa de mis suegros
—¡Jaja! ¿Pero, qué vacaciones son esas, hombre?— se burló del gótico riendo a carcajadas
Se encogió de hombros —Ni creas que quise ir— retiró un momento el cigarro de sus labios para beber la cerveza, el sitio empezaba a llenarse de gente, por lo que la temperatura ascendía
—Tu lo niegas, pero yo pienso que te dejas mandar por ese rubiecito— alardeo luego de tomar una ficha del contrario
Hizo una mueca de seriedad, no apostaron nada, pero tampoco le gustaba perder —Puedes decir lo que quieras, después de todo estas a los pies de un rubio también— miró al pelinegro con una sonrisa irónica
—Idiota— solto de golpe —Creeme que tiene sus beneficios, Prosciutto es hermoso y congeniamos bastante bien
—¿Ya están juntos?
—Empezamos a salir hace unos días
—Entonces, ¿Qué tanto hablas? Creo que apenas y le has agarrado la mano
—Tch— gruño, tomando otra pieza —Es un avance
—Jajaja, si, lo que digas— esta vez fue su turno de reírse
—¿Quieren compañía, preciosos?— una pelirroja de curvas exageradas se acercó a la mesa con su amiga
—¿O tal vez una bebida?— hablo melosamente la de cabello marrón
Leone puso los ojos en blanco, algo que si odiaba del sitio, es la cantidad de prostitutas que habían y lo ofrecidas que eran, entendía que era su trabajo, pero siempre se negaba ¿no entendían o qué?
—A mi amigo le hace falta un masaje, está agotado, sus suegros le dejaron con la cara de mierda que tiene
Escuchó a Risotto hablar con total sarcasmo —¿Qué idioteces dices?
—¿Es eso así?— canturreo la pelirroja —Puedo ayudarte en lo que desees
—No, ve a buscar a otro, mujer ¿Cuándo te cansaras de insistirme?
Hizo un puchero —¿Ni siquiera recuerdas mi nombre, Abba?
—No me llames así— chasqueó la lengua con total molestia —Y ya vete, no quiero arruinar mi noche tan temprano
—Risotto, dile algo— insistió la pelirroja al otro gótico
Se encogió de hombros —Lo siento chicas, a mi amigo no le atraen cuerpos como los suyos
—¿No? ¿Entonces qué te gusta, Abba?
—¡Mierda!— miro con enojo a los tres y se levantó de ahí para ir a la barra, a pedir otra cerveza ya que del enojo se terminó la primera, poco tiempo después escucho la risa del pelinegro a un lado de él
—Solo estaba jugando, Abbacchio— pidió otra cerveza también
—Deja de joderme ¿Quieres?
—¿Por qué de tan mal humor? ¿Mis palabras eran ciertas?
YOU ARE READING
•|Se Fossimo Insieme|• •|AbbaGio|•
FanfictionLeone Abbacchio nunca tuvo la mejor vida posible, paso por varios momentos que marcaron su vida, se volvió un desastre, si es que no lo fue siempre, sin embargo, en su vida aparecio alguien que cambiaría sus oscuros y solitarios días, y que aunque G...
