Capítulo 13. La confesión

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Al día siguiente me levanté a las 12:00 de la mañana. Álvaro todavía seguía durmiendo en su cama. Yo miré el móvil y vi llamadas perdidas de Magi. De repente le llamé.

            *LLAMADA TELEFÓNICA*

-Perdona Magi pero estaba durmiendo. Que pasa?

-Vale tranquila. No pasa nada. Sólo quería decirte que ya tenemos fechas de lo conciertos.

-¿En serio? Pero eso es genial. ¿Qué fechas y dónde son?

-el 14 de noviembre en Madrid, el 15 en Barcelona, el 19 en Sevilla, el 22 en Alicante y el 1 de diciembre en León.

-Vale-dije un poco desilusionada ya que Toledo no estaba entre las primeras.

-Hoy tómate el día libre y mañana empezamos a trabajar, ¿vale?

-Vale. Gracias y adios

-Adios.

       *FIN DE LLAMADA TELEFÓNICA*

Preparé el desayuno y desayune sin esperar a mi primo. Tardaría mucho en levantarse. Cuando terminé de desayunar le mandé un whatsup a David diciéndole que le esperaba en el parque de la otra vez. El me contestó enseguida un ok y la cara con los corazoncitos.

Me arreglé y bajé. Nada más salir a la calle llegaba él. Él no me vio pero yo sí. De repente me acerco a él sigilosamente y le tapo los ojos.

-¿Quién soy?

-Mmmm un bombón que se ha escapado de una pastelería.

Yo me reí y me senté a su lado.

-¿Qué tal todo?-pregunté

-Pues bien. ¿Y a ti qué tal?

-No me puedo quejar. El día 14 actuo aquí en Madrid.  Mañana Magi me dirá el sitio.

-¿En serio? Eso es genial.

-Sí.  Bueno.

-¿Qué te pasa?

-Que de las fechas que ha dicho ninguna es en Toledo y bueno, estoy un poco triste. Porque aunque lleve aquí 9 meses lo echo de menos.

De repente pensé:"mierda.¿Por qué muestras tus sentimientos? Nunca lo has hecho". Pero mi concienciame decía que tenía que hacerlo.  Compartir lo k pienso con alguien.

-Ya será. No te preocupes que seguro que vas.

Yo le sonreí y él me sonrió. Yo me acurruque en él y él me abrazó. Me sentía genial. Volvía a ser otra vez una niña pequeña. De repente supe que tenía que hacerlo. Le miré y él me volvió a mirar. Yo iba a decírselo cuando de repente el habló.

-Verás, lo siento pero no puedo aguantar más. Tengo que decírtelo.

-¿El qué? -pregunté asustada.

-Son ya 9 meses que nos conocemos, y bueno, lo he intentado pero ya no puedo esconderlo más.

-¿El qué no puedes esconder?-volví a preguntar asustada. Me estaba dando miedo.

-Te quiero. Y me gustaría que fueses mi novia.

Yo me quedé boquiabierta. Era justo lo que yo iba a decirle.

-Sí que quiero-le dije con una sonrisa y le abracé. Por fin estábamos juntos. Después de 9 meses. Luego nos separamos y de repente me plantó un beso. Yo le seguí. Los dos queríamos que ese primer beso quedara grabado en nuestras mentes. Por eso le hicimos especial. Fueron los 5 segundos más bonitos de mi vida.

-Te quiero-dije.

-Y yo princesa. Y yo.

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