identidad

11 2 0
                                    


No tengo identidad.

      Tampoco qué extrañar; escombros y ruinas de lo que alguna vez fue.

Mis conocidos han evaporado en la bruma del exilio.

La familia persiste completamente rota.

Pero,
ya lo sabes

Yo no tengo identidad.
Carezco de nacionalidad,
No pertenezco a un lugar.

Ya se me ha olvidado la historia,
y el ritmo de las canciones de mi infancia.

La justicia es ciega y tiene miedo:

Hemos sido abandonados.
El barco ha zarpado.
Mira a los lados, nadie nos está buscando.

Y en mis alucinaciones recuerdo:

El despuntar del alba
y el olor a café en las mañanas.

Los arreboles de enero empapados de esperanza.

El deseo ingenuo de vivir en aquella época sepultada en el tiempo.

Y la creencia de que algun día todo volvería a su lugar.

Se me ha desprendido el alma en mi propio territorio; ya no encuentro mis valores, vivencias o colores.

Tú y yo fuimos condenados al olvido.

¿Cómo detengo ésta sensación de desplazamiento que devora a mi alma y no me deja en paz?

¿Por qué tuvimos qué vivir esto?

¿Por qué?

Desconozco mi reflejo,
me siento huérfana de patria,
sumergida en un mar de fonemas,
perdida en otra tierra,
ahogada en sus prejuicios.

Acosada,
asfixiada.

Yo ya no tengo casa.

Yo,
ya no tengo nada.

TEXTOS FAMÉLICOSWhere stories live. Discover now