Capítulo 4.

1.5K 130 22
                                    

Para Mikey, nunca habría algo más importante que ToMan, se sentía orgulloso de ser líder de la pandilla, se sentía en la cima, le encantaba ser fuerte y estar rodeado de tipos fuertes. Lo que más le gustaba, sin dudas, era sentir aquel sabor a victoria, tener un enemigo en frente y lanzarse a divertirse en medio de un montón de idiotas.

Y es que para él no era más que eso, diversión.

Su amor a la Tokyo Manji era tanto, que no se sentía empatizado al escuchar a ____ hablar sobre porque odiaba a las pandillas, él también recibía algunos regaños de Shinichiro de vez en cuando, no era la gran cosa.

A todo esto le agregaba el hecho de que ella era bastante dramática o exagerada, por lo que podía hacerse una supuesta visión de lo que sentía.

— Oye ahora que pienso un poco en tu apellido, creo saber quienes son tus hermanos.

Era un sábado por la tarde, y ambos tenían un espacio libre, por lo que decidieron dar una vuelta en el centro de Roppongi para charlar y comenzar a planear una presentación "accidental" a alguno de sus familiares.

— Si te paseas mucho por aquí de seguro has escuchado su nombre una o dos veces —dijo con desinterés, algo acostumbrada a la mala fama de sus hermanos.

— ¿Ran y Rindou? Tal vez. —recordó Mikey.

En realidad no captó nunca ninguna relación con el apellido de ____, fue Draken quien le hizo conectar los cables, también recibió un par de advertencias por el hecho de que ellos eran parte la pandilla que Izana manejaba hasta el momento.

— Si, tranquilo, no son tan rudos como aparentan —____ hizo un intento de calmar a Mikey, incluso cuando este no estaba ni inmutado por los hermanos. Es más, no conocía sus caras.

— No estoy asustado, no deben ser la gran cosa como para intimidarme —era muy consciente de que él ganaría esa pelea, pero no era el momento de alardear, además se haría dar a sospechar.

— Oye ¿Tu vives solo con tus hermanos?

— No, los tres vivimos en la casa de mi abuelo, mi otro hermano no vive con nosotros, está independizado, y el mayor ayuda con los gastos y por eso sigue en la casa, prácticamente, él se hizo cargo de nosotros toda la vida —explicó, ____ se sentía algo incómoda por preguntar por sus padres, por lo que simplemente no lo hizo. 

— ¿Y tú? —devolvió la pregunta.

— Oh, bueno, vivo con mi padre y mis hermanos, pero suelo estar bastante sola en casa, ellos salen seguido y mi padre solo tiene algunos días libres en el trabajo,  la verdad es que ya hace varios meses no veo a mi madre, no creo que a ella le interesa verme tampoco —explicó sin rastros de tristeza.

Su madre era una prostituta que se tiró a su padre cuando eran jóvenes, y ella había nacido de ese rapidin, a decir verdad, al principio la visitaba con frecuencia, claro, cuando su padre lo autorizaba y su madre no trabajaba, era difícil que estas ocasiones coordinaran, por lo que sus visitas no eran constantes.

Luego de un tiempo, se dio cuenta de que ella no significaba mucho para su madre, por lo que se desapegó lentamente de ella, y simplemente, consideró como familia a sus hermanos y a su padre únicamente.

— Y tú... ¿Estás bien con eso? —indagó, era extraño que no tuviera remordimiento al mencionar lo de su madre.

— Si, no tengo porque sentir tristeza por alguien que no la sentiría por mi —explicó. — Oye, dime algo ¿Dónde compras tu ropa? —desde que había comenzado la tarde, no pudo evitar pensar en como alguien podía combinar dos colores que no pegaban ni con moco.

𝗡𝗼𝘃𝗶𝗮 𝗳𝗮𝗹𝘀𝗮 [𝗠𝗮𝗻𝗷𝗶𝗿𝗼 𝗦𝗮𝗻𝗼, "𝗠𝗶𝗸𝗲𝘆"]Where stories live. Discover now