Un chico normal

2.

Monse y Lilian entraron unos minutos despues al aula.

-¿Pero que carajo hacian?- dijiste molesta.

-Oye tranquila- contesto Monse -Aidan nos dio su autógrafo y ¿sabes que es lo más emocionante?

-¿Qué vas a reprobar si sigues pensando en él?- dijiste en tono sarcastico mientras miraste a otro lado.

-Obvio no- Monse sujeto tu mano -Aidan tendrá una cita con alguna de nosotras muy pronto- un grito de emoción escapo de ella y tu cubriste tus oidos.

-Será mejor que en lugar de estar pensando en ese actor...

-Actor, modelo, cantante, super guapo, encantador, el chico de mis sueños, que se preocupa por el medio ambiente- interrumpió Lilian.

Tu no le hiciste caso e intentaste mantener la calma.

-Es mejor que se pongan a estudiar, pronto seran los examenes, ademas la clase esta por comenzar.

Ellas voltearon la mirada hacia el pizarrón mientras tu anotabas la fecha en tu cuaderno. El profesor entro pero tu no levantabas la mirada, era como si no te importara en lo absoluto su llegada.
De repente un aroma a coco lleno el aula, era tan rico que incluso cerraste los ojos para poder disfrutarlo: "un aroma asi no es común" pensaste mientras buscabas la explicación de donde podia provenir.

-T/N, por favor señorita venga conmigo- escuchaste al profesor decir eso desde su escritorio.

Estabas tan concentrada en ese exquisito aroma que ni siquiera te diste cuenta de que Aidan entro en tu aula y de que él era el portador de ese aroma a coco que te gusto tanto.

-¿A mi?- preguntaste confundida mientras mirabas a Aidan quien se dio la vuelta para mirarte.

-Solo venga aquí

Te levantaste de tu asiento y comenzaste a caminar al frente. El profesor te explico que tu eras la unica que faltaba por anotarse en la "famosa lista de citas de Aidan" y como no sabian con quien saldría Aidan primero, las citas comenzarían al dia siguiente en un orden diferente.

-Pero profesor, no me gustaría pertenecer a esto- dijiste con la mirada fija en una hoja en blanco.

-Ordenes son ordenes- dijo el profesor- la directora pidio, exigió que este trato se cumpliera y asi será.

-Esta bien- comenzaste a caminar directo a tu asiento, disfrutando del aroma a coco -que rico aroma-

-Oye TN- dijo Aidan acercándose a ti.

Tu corazón comenzó a palpitar muy rapido y tu cara se puso roja, te sonrojaste y al mismo tiempo te dio pena.

-Si dime- contestaste con voz tenue.

-Espero salir muy pronto contigo, asi que tendrás que cumplir el trato que tu directora hizo ¿de acuerdo?

-Si Aidan, un trato es un trato- No sabias que contestar y eso fue lo primero que se te ocurrio.

Aidan sonrió para despues darse la vuelta, camino hacia la puerta del aula, te percataste que todos te observaban ya que eras la primera persona con la que Aidan hablaba, Aidan levanto su mano sutilmente:

-Espero verte pronto T/N- dijo y se retiro.

Tomaste asiento.
"Que arrogante es ese tipo, solo lo dijo para quedar bien, mi corazón nunca va a ser correspondido, tengo que olvidar lo que siento por Aidan" pensaste mientras tenias el cuaderno en la cara.
Lilian y Monse te miraban y susurraban cosas sobre ti, lo notaste sin embargo no le diste importancia.

El día continuó normal, tus clases eran las mismas de siempre, misma temática, misma rutina solo que ahora todos te miraban y murmuraban cosas como "Aidan le hablo" "¿qué tiene ella?" "¿porqué Aidan no me hablo a mi?" Y muchas más. Te sentías prisionera y juzgada, incluso Monse y Lilian casi no intercambiaron palabras contigo despues de que Aidan saliera del aula.
Decidiste no hablar con nadie el resto del dia ya que te sentías incomoda.
Cuando regresaste a casa te tumbaste en la camas y te quedaste dormida, estabas tan agobiada por todas esas miradas y comentarios que tu unico consuelo fue el dormir, no querías que nadie hablará sobre Aidan y tu porque seguías con la idea de que él no era un chico normal.