CAPÍTULO 5 TRAMPA

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Nick
No le doy tiempo a nada, la arrincono contra la pared sometiendola con mi cuerpo y tapando su boca para que no grite. Por supuesto ella no puede contra mi fuerza y eso me anima, el saber que ya no tiene escapatoria y que por fin cumpliré mi anhelo. Empiezo a recorrer su cuerpo con mis manos, diciéndole palabras obscenas, le empiezo a decir lo que quiero hacer con ella, cuando siento que alguien me aparta con brusquedad y me derriba de un golpe en pleno rostro, el dolor no me deja pensar con claridad, seguro me rompió la nariz, jamás nadie me había dado tan fuerte. Intento incorporarme pero me siento mareado y vuelvo a caer, quien quiera que me haya golpeado debe de ser un luchador profesional, porque yo soy grande y fuerte, nadie puede contra mi. Escucho como ella llora, levanto la vista y no puedo creer lo que veo, ella está en los brazos de Fabián y el la consuela, pero... él está... muerto... o debería estarlo... yo mismo lo vi perderse entre las aguas, estuve varios minutos asegurandome de que no saliera y no lo hizo, los bellos de mi espalda se erizan ¿cómo es que está ahí? Tiene que estar muerto.

Intento levantarme de nuevo y lo consigo. Me avalanzo sobre él, pero me recibe con otro golpe. De verdad no entiendo como lo hace, yo soy fuerte, aguanto mucho, hasta ahora nadie ha sido capaz de vencerme pero este sujeto me derriba de un solo golpe. Me quedo hincado en el piso incapaz de ponerme de pie.

_ ¿Que haces aquí? - digo sofocado. _ deberías estar muerto.

_ Solo defiendo a la mujer que acabas de atacar. - dice sin alterarse.

_ ¡Yo no ataqué a nadie! - niego.

_ ¿Te atreves a negarlo? - interviene ella indignada.

_ ¡No hice nada y lo sostendré ante quien sea!

_ ¿También negarás que intentaste matarme? - me enfrenta Fabián

_ ¡Negaré todo! - sonrío malicioso. _ nadie dudará de mi palabra contra la de ustedes. _ y era verdad, ni siquiera a ella le creerían, porque yo alegaría que ese idiota la sedujo y ahora hace lo que él le diga, mi plan no es descabellado y dudarán de ella antes que de mi, porque jamás les he dado motivos para hacerlo, todo lo que he echo lo he hecho a travéz de otros, es por eso que la familia confía en mí, y yo hubiese sido el siguiente encargado, si Mateo no hubiese traído a su protegido. Pero de nada le valió yo saldré triunfante, esté muerto, o no.

_ ¡Quisiste matarme! - insistió Fabián. _ ¡y quisiste abusar de la señorita Georgina!

_ ¡Sí! ¡lo hice! - acepto. _ pero nadie le creerá a un sucio inmigrante como tú y a ella tampoco, porque está enamorada de ti y el amor lo hace a uno cometer tonterías. - rio de nuevo. Ellos saben que no tienen oportunidad si van en mi contra, me incorporo con un poco más de fuerzas, esta charla me está sirviendo para recuperarme y atacar, se que lo puedo vencer, es un pobre lisiado que depende de un bastón para mantenerse en pie y que corrió con suerte al golpearme, pero ya estoy bien. Solo haré creer que fue él, quien la atacó y que yo la defendí.

_ ¡Además has estado robando a la familia por años! - me confronta de nuevo.

_ ¿Y qué? - no tengo ganas de negarlo, es cierto pero igual nadie le creerá, pensarán que es su último recurso para zafarse del problema en el que se haya ahora. _ Tú puedes decir lo que quieras, nadie te creerá.

_ No hablaré yo. - me mira a los ojos. _ las pruebas lo harán puro mi.

_ ¡Solo inténtalo, estúpido analfabeta! - me río en su cara, ni siquiera sabe de lo que está hablando, yo soy un experto en el manejo del rancho, he cubierto bien todas mis huellas, ¿que va a saber ese, de lo que en un rancho como este se hace? ¿que va a saber de cuentas, de transacciones y de bancos? Dudo que sepa leer siquiera. _ para tu conocimiento, sí, he robado, y he hecho muchos negocios por mi cuenta, pero compruébalo idiota. - me posiciono delante de él amenazante.

Georgina está detrás de él aterrorizada, ya no me importa que ese tonto me haya estropeado el momento, cuando lo echen de aquí o que vaya a la cárcel o a migración, me da igual, entonces yo tendré mi momento con ella pero juro que no se me escapará.

Por lo pronto le daré su merecido y me cobraré lo que me hizo. Me avalanzo sobre él, dándole con mi puño en el rostro, no se lo esperaba y me complace tanto verlo caer, no espero a que se ponga de pie me dejó ir sobre él con todo, lo golpeo, pero él hace lo suyo y me vuelve a dar en el rostro, lo que me deja desorientado y confundido una vez más, ¿que tiene en las manos? ¿hierro? No lo sé, pero jamás nadie me ha dado con tanta fuerza, me dispongo a contra atacar cuando escucho más voces y alguien me noquea.

Cuando despierto, sigo en la oficina de Fabián, pero no estamos solos, están los padres de Georgina, está la policía, pero eso no es lo peor, lo peor es que yo me encuentro esposado y en cuánto ven que reacciono, uno de los policías se adelanta y me empieza a leer mis derechos.

_ ¡Él es quien debería de ser arrestado! - grito señalando a Fabián. No he escuchado lo que él policía, que lee mis derechos, ha dicho, ni me interesa, se que se han equivocado, no tienen pruebas contra mi, esto es una arbitrariedad y se los hago saber.

_ ¿Cómo pudiste? - me reclama el padre de Georgina. _ ¡confiaba en ti!

_ ¿Le van a creer a ese idiota? - exploto. _ ¿no ven que los está engañando? Fue él quien me atacó, yo solo quise hacerle ver a su hija que no le conviene porque, sí saben que él la está enamorando ¿verdad? Se quiere aprovechar de ella  y de paso de ustedes.

_ ¡No mientas más! - me enfrenta. _ ¡Sabemos la verdad!

_ ¡Su hija miente para salvarlo! - intento convencerlo. _ ¿no se da cuenta de que él la tiene controlada? - los miro con frustración. Se que en este momento no me creen pero lo harán, cuando vean que no hay nada que me incrimine.

_ ¡Basta! - me dice colérico. _ ¡ya escuchamos todo! - toma un teléfono que está en el escritorio y empieza a reproducir un vídeo, soy yo desde el momento en el que entré a ese lugar para esperar a Georgina. En ese momento me doy cuenta de que estoy perdido, todo lo que hice y lo que hablé, está en ese maldito video, caí en una trampa, ese mugroso pueblerino se salió con la suya y me derrotó, ya es inútil negar nada, todo está ahí.  Pero no me iré solo, todos los que estuvieron a mi lado caerán conmigo, incluyendo a Juan el antiguo administrador, se que él no es culpable pero me vengare llevándomelo a él por delante, lo aprecian mucho y eso les dolerá.

UNA LUZ EN MI OSCURIDAD/No. 2 De La Serie: HERMANOSWhere stories live. Discover now