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Mi graduación, momento que anhelé con muchísimas ansias y que por fin llegó.
Me encontraba conversando con mis mejores amigos en una cafetería, como hacemos habitualmente.

–Oye, maldito San, ¿vas a ir a la fiesta hoy? No me dejes solo
–Primero, si me dices maldito otra vez te voy a partir los dedos, y segundo, no pienso ir, prefiero quedarme en casa con Blacky en vez de juntarme con un grupo de mensos que ni tomar saben.
–Pero San, nos graduamos, hay que festejar, además no es una fiesta como las habituales, es una cena un poco informal, nada serio. – Dijo, mirando al chico y esperando su respuesta.
– Dan, te dije que no, y no es no. Mira si viene el estúpido de Jay, no quiero estar amargado por su presencia.– Miré al piso recordando al maldito de mi ex, aquel que me hizo sufrir demasiado.
–No seas una nena, ven y si te lo encuentras no le prestes atención, total estamos Sun y yo para hacerte de guardaespaldas
–¡Ey!, a mi no me metas, voy a ir a cenar con mi familia. – Exclamó rápidamente el susodicho.
–Bueno, pero me parece que eres un maricón, tienes miedo de que te despeinen y arruinen tu imagen de muñequito de porcelana.
–Cuando te levantes te voy a arrastrar de las orejas, tenlo en cuenta.
– Ya basta chicos, ando en crisis y ustedes comportándose como chimpancés, dios santo. – Los miró con una mueca de desagrado (demasiado) falsa.
–Si bueno Maria Magdalena, ya cállate.
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Al terminar, San volvió a su casa, y ni bien vio a su gato se abalanzó hacia el.
– Blacky~ ¿ Me extrañaste, pequeña bola de pelos? – Decía mientras acariciaba suavemente al felino.
– Meooow~ – Maullaba y ronroneaba debido a las caricias de su dueño.
– Adivina que, ¡papá se graduó! –aplaudió de manera tierna y luego tomó las patitas de su gato para simular un aplauso.– Blacky, ya tienes 5 años, no es genial eso? Me acompañaste durante mucho tiempo, eres el mejor gatito de todo el universo– De la nada sonó su teléfono debido a una llamada entrante.
–¿Número desconocido? Blacky, ya vuelvo, no te comas mis papitas. – Fue a tomar su celular y contestó la llamada.
– ¿Hola?, ¿Quien habla?
– Voy a vender tus riñones...
– ¿Eehh? – Pronunció esto de manera aguda y fuerte, casi llegando a ser grito.
– Jaja, es broma menso, soy Dan, solo que tengo el teléfono de un amigo, bueno quería pedirte un favor.
– Maldito bastardo, ¿quien en su sano juicio contesta una llamada y dice eso? Ahora no te ayudo una mierda.
– Ey, cálmate tigre, era una broma, Por favoooor, ayúdame, ¿porfis porfis? – Puedo imaginar su puchero a través de la pantalla.
– Ush, maldito, ya suelta lo que tienes que decir o lo mando a Blacky a que te deje tajos en la cara.
– Bueno lo que pasa es que entramos en código arcoíris, mi buen amigo– Al escuchar esto comencé a emocionarme
– ¿Quien es el homosexual y que necesitas de mi para ayudarlo? – Hace mucho que esto no pasaba.
– El tema es que esta vez soy yo, ¿puedo ir a tu casa y explicarte?
– Si, claro, te espero, ahora adiós que estoy ocupado.
– Adi–fue interrumpido por San el cual colgó la llamada.
– Blacky, toca esconder todo, salte salte, nadie puede enterarse de mi plan. – Dijo mientras liberaba la mesa llena de libros y apagaba sus múltiples computadoras.

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Dios, me da risa volver a escribir este tipo de cosas, además de que está muy mal hecho lo escribo mientras planeo cosas de un viaje, yo el menos menso.

Bueno espero que les guste la historia (perdón por tanto relleno), es muy random pero es lo que hay, así es su escritor.

Apoyen la historia, los amo <3

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⏰ Ultimo aggiornamento: Feb 01, 2023 ⏰

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