CAPÍTULO 4

49 9 0
                                    


PoV Edgar

Edgar: ...

Rubb: ¿Y entonces?

Edgar: ¿Mm?

Rubb: ¿Esta bueno?

Edgar: Sí, lo está. Y mucho.

Rubb: Jeje. Que bueno que te guste.

Edgar: ...

  Sí... Ahora mismo sentado cerca de la fogata comiendo carne de ciervo junto a Rubb, que estaba un poco al lado.

  Sí... Había decidido volver. No estoy muy seguro de porqué, pero lo hice. Y tampoco quería pensar mucho en eso. Aunque eso no fue lo único raro. Al regresar pude ver que el hombre bestia se había cambiado a otro ropa más normal de cuero, algo que lo hacía ver como un cazador normal. Cuando llegue y este me vio, pude notar en su cara que parecía un poco feliz de verme.

  De nuevo, mientras comíamos él se dedicaba a contarme muchas cosas. Todavía seguía sin entender ni la mitad de ellas, pero hacía el esfuerzo ya que él también se esforzaba en explicarme.

  Tras acabar de comer, nos quedamos reposando cerca del fuego mientras seguiamos hablando, o bueno, mientras Rubb me seguía hablando. Ya para ese entonces se estaba haciendo tarde y el cierlo rojo estaba pasando a azul oscuro. Por lo que seguramente dentro de poco íbamos a dormir. Rubb me siguió contando un par de cosas más, pero al acabar como ya no había otro tema de conversación finalmente decidimos entrar a la tienda. Igualmente no es como que tuviéramos mucho más que hacer.

  Al igual que ayer entre yo primero y me hice bien a un lado para hacerle el suficiente espacio a su gran cuerpo.

Rubb: ¿Ya?

Edgar: Sí.

  Entonces él también entra y se acostó del mismo lado que le había dado. Una vez ya se acomodó, otra vez estábamos acostados juntos... y bien pegados. Estar así todavía me sigue haciendo sentir incomodo.

Rubb: Tranquilo. Mañana dormirás mejor que ahora.

Edgar: ...

  No se que cara debí haber puesto, ya que él se dio cuenta de como me sentía.

Rubb: Claro. Eso será si todo sale bien mañana.

Edgar: ¿Si todo sale bien?

Rubb: ¿Eh? Esto...

Edgar: ¿...?

Rubb: Me has pillado ahí.

Edgar: ¿Qué pasa? - Habla con neutralidad -

Rubb: Haa... - Suspira - Mira. Necesito que confíes un poco en mí.

Edgar: ...

Rubb: Te contaré como haremos las cosas.

Al día siguiente. Mañana.

  "Iremos a mi reino temprano por la mañana"

Rubb: ¿Listo?

Edgar: Sí.

Rubb: Bien. Vamos entonces. Sígueme.

Edgar: ...

  Habíamos recogido la tienda y alguna que otra cosa, pero como no teníamos mucho encima lo hicimos rápido, para luego marcharnos de ahí. El T-Rex seguía con la misma ropa de ayer y andaba delante mío con esa esa mochila en su espalda. Al ver el tamaño de su equipaje me sorprendió ver que no llevara mucho, aunque no entendía como le hizo para guardar su equipamiento de antes ahí dentro.

  Mientras caminábamos yo solo me limitaba a mirar a mi alrededor y no perderlo de vista a él. Lo cual me llamó la atención que no me dijese nada en el camino, pero supongo que tiene que ver con lo que me dijo ayer. "Tenemos que ser discretos. Así que cuando lleguemos intenta mantenerte en silencio hasta que estemos seguros". Esas fueron sus palabras. Y claramente como lo dijo me hizo sentir que había peligro si nos descubrían.

Tiempos SalvajesWhere stories live. Discover now