Recuerdos - Jude Bellingham

𝟿. 𝙲𝚘𝚗𝚝𝚒𝚐𝚘 𝚝𝚘𝚍𝚘 𝚟𝚊𝚕𝚎 𝚕𝚊 𝚙𝚎𝚗𝚊

POV: Luna

Como hoy no tenía nada importante que hacer aproveché para dormir hasta tarde, ya que hacía mucho que no lo hacía. Eran cerca de las 12:30 cuando me desperté y unos minutos después de hacer el vago en la cama me levanté e hice mi rutina de mañana de Qatar. Mi outfit fue un top azul claro y unos pantalones tejanos negros cortos y como siempre las AirForce 1.  Me dejé el pelo tal y como estaba y me maquillé un poco. Tardé media hora en hacer todo eso así que a las 13:15 llegué al comedor y me senté con los de siempre. Ellos bromearon con que soy la bella durmiente de la vida real y sinceramente yo estaba de acuerdo con ellos así que me reí con ellos. Recibí la notificación de que me habían añadido a un grupo llamado "waka waka 🇪🇸🫶🏼" y segundos después llegó un mensaje de Ferran diciendo hola a lo que los demás integrantes del grupo (Ansu, Pedri, Gavi, Balde, Fer y Sira) contestaron. Se pusieron a mandar mensajes explicando anécdotas y fotos graciosas y yo me estaba aguantando las ganas de reírme. Jude, que estaba cerca de mí se dio cuenta y me preguntó:

- ¿Y esa sonrisita? ¿Con quién hablas?

- Con los chicos - le contesté -

- ¿Qué chicos? - me respondió con una pregunta -

- Los españoles. Están diciendo de quedar esta tarde. - le contesté mirando al móvil -

- Ah. Diles que no puedes. - me dijo -

- ¿Por qué debería hacerlo? - le contesté -

- Por qué tienes planes conmigo.

- ¿Ah sí?

- Sí. Te he preparado una sorpresa

POV: Jude

La sorpresa ya hacía días que la tenía preparada, pero aún no había tenido tiempo de decírselo a ella. La sorpresa se trataba de pasar la tarde en la playa donde haríamos un pícnic y veríamos el atardecer. También tenía pensado regalarle un ramo de rosas, pero no estaba muy seguro de si le iba a gustar. El motivo de la sorpresa era que quería demostrarle que conmigo las cosas son mejores que con Mason, Pablo o el chico que siempre la viene a recoger. Justo ayer me di cuenta de que no sé el porqué me molesta que esté con cualquier chico que no sea yo. Empiezo a pensar que me gusta, pero eso no podía ser verdad. Solo me preocupaba por mi amiga. Luna me sacó de mis pensamientos:

- ¿Entonces cuál es la sorpresa?

- Ya lo verás. A las 17:45 nos vamos. Ponte el bikini y ponte chanclas.

- Vale, pero dame alguna pista de adonde me llevas porfa. - me dijo ella haciendo cara de perrito para convencerme -

- Bueno, solo te diré que nunca has estado allí.

- Gracias por la pista tan clara que me has dado. - me contestó irónicamente - Hasta luego imbécil.

- Hasta luego enana de mierda - le contesté riendo -

Ella se fue y me quedé embobado viendo su trasero hasta que Saka me sacó del trance.

- Se nota que estás enamorado bro.

- ¿Qué dices? No estoy enamorado de Luna - le contesté -

- Yo nunca dije que fuese Luna. Tu mismo te has delatado. - me dijo sonriendo inocentemente -

Realmente no se lo podía negar, pero estaba confundido. No quería que me volviesen a romper el corazón como la última vez por qué me prometí a mí mismo nunca volver a sentirme así. Saka me ayudó con la sorpresa así que habíamos estado toda la mañana en una playa privada preparándolo todo y de verdad que no sé qué hubiese hecho sin él.