Me desperté cerca de las 10:30 de la mañana, pero como me dio pereza levantarme me puse a buscar una película en Netflix. Después de estar 10 minutos buscando elegí "Mi primer beso", todo un clásico para cuando no sabes qué ver. Justo le acababa de dar al play cuando llamaron a la puerta y como me daba palo levantarme pregunté desde la cama:
- ¿Quién es?
- Soy tu inglés de confianza - respondió una voz que se me hacía familiar -
- Déjame adivinar; eres Jude el imbécil número uno - dije mientras caminaba hacia la puerta -
En cuanto abrí la puerta se autoinvitó a entrar y se sentó en la cama.
- ¿A qué viene tu inesperada visita? - le pregunté -
- Digamos que ya llevo unas cuantas horas despierto y me aburría demasiado, así que se me ha acudido venir a molestarte. - dijo tranquilamente -
- Pues que bien. Bueno, ya que estás aquí, ¿te apetece ver "Mi primer beso" conmigo?
- No me gustan las pelis románticas, pero haré una excepción.
Se tumbó a mi lado y le di al play. Sin darme cuenta terminé acurrucada con él y me quedé embobada viéndolo dormir como un angelito hasta que el sueño se apoderó de mí también.
POV: Jude
Abrí los ojos y lo primero que vi fue la tele con el mensaje "¿sigues aquí?" de Netflix. Bajé mi vista a la persona que estaba durmiendo plácidamente en mi pecho abrazada a mí y en ese momento lo único que pensaba era que no quería que ese momento se terminara. Luna se veía tan mona durmiendo que no pude evitar coger mi teléfono y sacarle una foto que después colgaría a Instagram.
@judebellingham
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Decidí quedarme allí hasta que se despertase para más tarde irnos a hacer algo productivo, pero no entiendo el cómo me volví a dormir. Nos despertamos sobresaltados por unos fuertes golpes a la puerta y a continuación escuchamos unos gritos:
- ¡Sal de ahí! ¡Sé que estás aquí!
Ella salió a ver quién era y al salir de su habitación a Luna le cambió la cara por completo y yo salí rápidamente para ver el motivo. Había un chaval que supuse que conocía a la enana de algo, y no de algo precisamente bueno. El chaval al verme se puso cómo loco y empezó a gritarle a Luna:
- ¡Eres una zorra! ¡Me has estado engañando con este tío!
- ¡¿Pero tú de qué coño vas?! ¡Tú y yo hace mucho que no estamos juntos! ¡No tienes derecho a presentarte aquí y reclamarme algo que yo no he hecho y menos cuando tú sí que me pusiste los cuernos! - le contestó ella -
- ¡Cállate! ¡Tú te vienes conmigo de vuelta a Londres!
No podía quedarme callado así que me puse entre ellos dos y le dije al chaval:
- Ella no se va a ninguna parte. Y menos contigo.
- ¡¿Tú quién eres para hablar?! - me contestó él -
- Soy su novio, si tienes algún problema con ella vas a tener que decírmelo a mí.
- Me da igual quién seas, ella es mía.
- Me temo que eso no es verdad. Ahora, hazme el favor de irte de este hotel inmediatamente o me veré obligado a llamar a seguridad. - le dije cabreado -
El chaval se fue corriendo y tan pronto como desapareció de nuestra vista vi cómo Luna relajaba los músculos de su cuerpo y suspiraba aliviada.
- No sabes cuánto te agradezco esto - me dijo Luna para después abrazarme -
Me fijé en la hora y sin darnos cuenta ya eran las 13:30 y ya debían estar todos comiendo en el comedor. Se lo dije a Luna y ella me pidió que esperase 5 minutos para que se arreglase un poco, aunque en realidad fueron 15 minutos los que esperé viendo tiktok sentado en una esquina de la cama. Salió del baño un poco maquillada, con el pelo planchado y su outfit que consistía en unos leggings cortos negros, un top de tirantes azul y como no las AirForce 1 que siempre usa. La obligué a bajar las escaleras rápidamente, ya que no quería comer las restas del buffet libre que dejaran mis compañeros. Al llegar al comedor recibimos algunas miraditas por parte de Mason y Grealish, pero nos dio igual y nos fuimos a sentar con Phil, Saka y Rashford. Durante la comida hablamos de nuestras predicciones del mundial y que otros países aparte del nuestro apoyábamos.
POV: Luna
Pasé toda la tarde con el imbécil que ya no era tan imbécil. Estuvimos unas horas en la piscina y luego nos fuimos a la terraza del hotel para ver el atardecer. Lo que me sorprendió es que lo sugirió él y me abrazó mientras veíamos el sol esconderse y la luna aparecer. No sé el porqué, pero sentí mariposas en el estómago durante toda la tarde. Me negaba a creer que podía gustarme Jude, pero tenía mis dudas. El silencio que había se rompió por el sonido del móvil de Jude.
- ¿Quién es? - le pregunté -
- Es Saka, ¿te molesta si lo cojo?
- Adelante, tranquilo.
- Hola bro, ¿qué pasa? - le preguntó Jude en la llamada - ¿Qué dices? No me había dado cuenta. Ahora venimos.
Colgó la llamada y se dirigió a mí:
- Ya están todos cenando solo faltamos nosotros.
- ¿Pues a qué estamos esperando? Mueve tu culo escaleras abajo anda. - le dije medio riendo -
Mi cena fue una ensalada de pasta y de segundo pollo frito. Tenía tanta hambre que no me enteré de lo que Jude había cenado. Después de cenar la mayoría fuimos a la sala de cine del hotel a ver Francia versus Dinamarca y Marcus y yo éramos los únicos que íbamos con Francia y tuvimos tanta suerte que Francia ganó 2-1 y se lo pudimos restregar en la cara a los demás. Después de comentar un rato el partido con Rashford, le di las buenas noches y subí al ascensor para irme a mi habitación. Una vez ya tenía el pijama puesto me acordé de que no le había dicho buenas noches a Jude y como su habitación estaba en frente salí al pasillo con el móvil en la mano y llamé a su puerta.
- ¿Quién es? - preguntó él desde dentro de la habitación -
- Tu vecina de delante - le contesté -
Abrió la puerta con una sonrisa en la cara.
- ¿A qué se debe tu visita nocturna? - me preguntó -
- Solo venía a decirte buenas noches. Ah y también que mañana pasaré el día con los españoles y no sé cuando volveré por qué vete a saber tú a que hora termina el partido y depende de si ganan o no saldremos a celebrarlo.
- ¿O sea que me estás diciendo que me abandonas todo el día para estar con Pablo Gavi?
- Con Pablo y los demás. Y no seas exagerado que no es para tanto; hoy he pasado todo el día contigo. Dame un descanso que tanto estar contigo que lo imbécil al final se me va a pegar. - le contesté riendo -
- ¿Quieres callarte de una vez? - me dijo medio serio y medio riendo -
- Atrévete a callarme - contraataqué desafiante -
- No deberías de haber dicho eso.
- ¿Por qué? - le pregunté curiosa-
- Por esto.
Se acercó a mí y me besó mientras ponía sus manos en mi cintura para acercarme más a él.
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