Recuerdos - Jude Bellingham

𝟾. ¡¿𝚀𝚞é 𝚋𝚎𝚜𝚊𝚜𝚝𝚎 𝚊 𝚚𝚞𝚒é𝚗?!

El sonido de una llamada entrante en mi móvil hizo que me despertara. Vi que me estaba llamando Pablo y acepté la llamada y me puse el teléfono en el oído.

- Buenos días, Pablito - le dije medio dormida -

- Por fin te levantas bella durmiente - dijo burlón - ¿Quieres que venga Fer a recogerte?

- Sí, pero que venga dentro de un rato por qué si viene ahora se tendrá que esperar.

- Era de esperarse; tú antes muerta que sencilla. - dijo riendo - Ahora le digo a Fer que te mande un mensaje y os ponéis de acuerdo.

- Valee. Hasta luego amore.

- Adiós Lunita.

Al colgar la llamada me di cuenta de que estaba en la habitación de Jude y justo entonces él salió del baño solo con unos shorts puestos y aparté la mirada para evitar sonrojarme. Solo él lograba ponerme nerviosa sin hacer nada en particular. Esto me frustraba, ya que no sentía eso desde hace mucho. Intenté no darle muchas vueltas al asunto y centrarme en alistarme para irme con mis amigos españoles.

- Eeeh... Tengo que irme. Me pasan a recoger dentro de nada. - le dije -

- No soy sordo, te he escuchado hablando por teléfono desde la ducha; hablas bastante alto por si no lo sabías. - me contestó -

- Entonces no hace falta darte detalles. Perfecto. Si no te importa me voy ya.

- Puedes irte, tranquila. Ya me dirás como te ha ido.

- Por supuesto. Adiósss. - dije cruzando la puerta -

- Chaooo - me contestó él -

No tenía mucho tiempo; Fer pasaría a recogerme en 45 minutos. Me puse unos leggings cortos negros, la camiseta de la selección española y obviamente las AirForce 1. Me maquillé rápidamente y el pelo lo tenía bien así que lo dejé tal y como estaba. Recibí un mensaje de Fer diciéndome que ya estaba abajo así que cogí mi bolsito y baje con el ascensor hasta la entrada. Corrí hasta su coche para evitar a los paparazzi y nada más subir yo él arrancó y en unos 15 minutos ya estábamos en el hotel de la roja. Al llegar fuimos directos a la sala de juegos donde estaban algunos jugando al FIFA, otros jugando al uno y las chicas en unos sillones chismoseando. Me uní a ellas y seguimos dándole al chisme durante un buen rato. Llegó la hora de comer y vino Luis Enrique a avisarnos para que fuéramos todos al comedor. Me sentía un poco intrusa estando ahí, pero todos me hicieron sentir como si fuese una más de la gran familia que era la selección española. Durante la comida se notaban los nervios de todos, ya que había más silencio de lo normal. El partido era a las 20:45, pero ellos tenían que estar allí 2 horas antes. Aún nos quedaba tiempo así que aprovechamos para ver el partido de Japón contra Costa Rica en la sala de cine. Como esos países estaban en el grupo de España también estaban algunos miembros del staff; incluyendo a Luis Enrique. Después del partido los jugadores ya se fueron y las chicas y yo fuimos al "Al Bayt Stadium" una hora después. Al llegar al palco donde nos sentaríamos pude ver que algunos aficionados ya estaban allí mostrando la bandera de España. El rojo se veía en las gradas y eso era buena señal. El partido comenzó y aunque España estaba jugando mucho mejor que Alemania, iban empatando 1-1 con un gol de Morata en el 62' y uno de Niclas Füllkrug en el minuto 83. Todos pensábamos que el partido se quedaría con ese resultado, hasta que Ferran marcó en el minuto 90 un gol inesperado y le dio la victoria a España. Los alemanes se marchaban del campo cabizbajos mientras que los españoles celebraban. Nos dejaron bajar al campo a felicitar a los jugadores y en cuanto dejaron solo a Ferran fui directa a abrazarle.

- Menudo gol Ferran. Esto hay que celebrarlo - le dije -

- Estoy totalmente de acuerdo. - me contestó -