𝟸. 𝙿𝚛𝚒𝚖𝚎𝚛 𝚙𝚊𝚛𝚝𝚒𝚍𝚘

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Me desperté con la luz del sol entrando por la ventana, me levanté de la cama y me alisté. El outfit de ese día fue un top blanco básico, unos pantalones chándal Nike grises y mis AirForce 1. Después de terminar de hacer todo, bajé a desayunar al comedor del hotel y desayuné unos pancakes con Nutella y frutas y un cafecito. Aproveché para contestar los mensajes que me habían llegado y revisé las redes sociales. Terminé de desayunar y llamé a mi madre para proponerle que fuéramos a dar un paseo por las calles principales y ya de paso ir de shopping. Mi madre aceptó mi propuesta y nos encontramos en la entrada del hotel para coger un taxi que nos llevaría al centro. Vimos aficionados de diferentes países, muchos hoteles de lujo, tiendas de marcas famosas, en resumen muchas personas de diferentes nacionalidades. Vi una tienda de deportes y arrastre a mi madre adentro. En la tienda me compré una camiseta de la selección española, una camiseta de la selección brasileña, una de Argentina, una de Países Bajos y por último una de Francia con el dorsal de Mbappé. Se podría decir qué apoyo a muchos países en este mundial de Qatar 2022. Mi madre recibió una llamada de mi padre recordándonos que ya era hora de ir a comer, así que nos fuimos directas para el hotel. Después de comer subí a mi habitación y me puse la camiseta de Inglaterra con el dorsal de mi hermano por encima del top, agarré mi bolso y fui en busca de mis padres a su habitación. Nos subimos todos a un taxi y nos dirigimos al estadio Internacional Khalifa dónde se jugaría el partido. Nada más llegar dentro del estadio, una señora nos dio a mí y a mis padres una identificación que llevaban los familiares de los futbolistas. Mis padres dijeron que se iban ya al palco, mientras que yo decidí ir a los vestuarios a desearle suerte a mi hermano. Estaba distraída con el móvil mandándole un mensaje a Phil diciéndole que iría a verle a los vestuarios que sin querer me choque con una persona la cual no se tomó muy bien que hubiésemos chocado

- Mira por donde vas imbécil - dijo dándome un leve empujón con el puño -

- Eso aplícatelo a ti, gilipollas - le contesté enfadada y le saqué el dedo del medio -

- Ese dedo te lo metes por donde te quepa - me dijo indignado y enfadado a la vez -

- Gracias por tu amable sugerencia, me tengo que ir. Ten un mal día. - dije con mucha ironía -

- Igualmente. Por cierto, por tu culpa llegaré tarde al vestuario y el entrenador me va a matar. Muchas gracias.

Me fijé en que llevaba puesta la equipación de post-partido de Inglaterra y no pude evitar peguntar

- ¿Juegas con la selección de Inglaterra?

- Sí, y ahora apártate de mi camino. - dijo el chico -

El chico se dio la vuelta y empezó a andar hacia al vestuario y yo le seguí, ya que íbamos al mismo sitio. El chico se dio cuenta, porque en cuanto llegamos a la puerta se giró bruscamente hacia mí y me dijo:

- ¿Por qué coño me has seguido? ¿Te gusto o algo?

- Ya te gustaría a ti. Vengo a ver a mi novio y a mi hermano. - le mentí en la parte del novio, pero ya buscaría una solución -

- Sí, claro. - dijo con ironía - ¿Puedo saber quien es tu noviecito?

- Eeemm... Es Mason Mount y mi hermano es Phil Foden, ahora si te apartaras de la puerta y me dejaras entrar me harías un favor.

En vez de dejarme entrar, entró él y gritó:

- ¡Mount, tu novia está a fuera! -

Escuché como varios de sus compañeros le estaban diciendo que saliese a verme y que me dejase entrar. Entonces la puerta se abrió, dejándome ver la cara de Mason de "qué coño está pasando". Le dije que me siguiera la corriente y que ya le contaría después. Entramos en el vestuario mientras Mason me abrazaba por la cintura como si fuésemos novios de verdad. La cara que puso el chaval de antes no tenía precio, se le había quedado la boca abierta al vernos. Sonreí victoriosa mientras Mason y yo íbamos donde mi hermano, quien nos miraba raro. Me senté a su lado y le conté lo que estaba pasando.

- El chaval ese - dije señalándolo - no me quería dejar entrar y he tenido que mentir.

- Oh, ese chaval tiene nombre, es Jude Bellingham. A veces puede ser muy borde con las personas que no conoce.

- Pues que aprenda a comportarse, no podría aguantar ni un segundo más con él.

- Hablando del rey de roma... - dijo mi hermano debido a que el tal Jude ese se acercaba a nosotros -

- Que sepas que te he escuchado, - dijo Jude - y la opinión es mutua.

- Me alegra oír eso. - le dije con ironía -

- Me temo que tendréis que pasar mucho tiempo juntos, Luna es mi amuleto de la suerte y va a estar en el banquillo en todos los partidos. - dijo mi hermano interrumpiendo nuestra discusión -

- ¿Me lo estás diciendo en serio? - dijimos Jude y yo a la vez -

- Os lo digo muy en serio, ahora sentaros y callaros que el entrenador ya está aquí. - nos contestó mi hermano. -

El entrenador les dio una charla y luego les indicó a los titulares que se cambiaran la camiseta. Sin darme cuenta me quedé embobada viendo los abdominales de Jude y este no tardó en darse cuenta.

- Estoy empezando a pensar que te gusto de verdad. - me dijo él divertido -

- Sigue soñando, solo admiraba las vistas.

- Ya lo veo. - dijo riendo - Si sacas una foto las vistas duran más. - dijo guiñándome el ojo -

No pude evitar sonrojarme ante su comentario y apartar la vista rápidamente. Minutos después, los jugadores suplentes ya tenían que ir al banquillo, así que le desee suerte a Mason y me fui con mi hermano. El partido empezó muy bien con tres goles en la primera parte; el primero de Jude Bellingham, el segundo de Saka y el tercero de Raheem Sterling. En la segunda parte, en el minuto 62, Saka marcó el cuarto gol del partido alegrando a toda la afición inglesa. Tres minutos después, Irán marcó un gol y minutos después entro mi hermano al campo y salió Mason. Después de ese cambio marcó un gol Marcus Rashford y todos estábamos muy contentos, ya que 20 minutos después marcó Jack Grealish y todos estaban eufóricos. En minuto 90+3 Irán marcó otro gol, pero eso no les sirvió de mucho. El partido finalizó con un 6-2 a favor nuestro. Fuimos con los demás jugadores a celebrar la victoria y se me ocurrió una idea para molestar a Jude.

- Bellingham, guapooo dame tu camisetaa - le grité a unos metros de distancia -

Él me miró raro, pero luego se acercó a mí y se quitó la camiseta para dármela y yo no pude evitar bajar mi mirada a sus abdominales. Me quité la camiseta de mi hermano y me puse la camiseta de Jude bajo su atenta mirada.

- Gracias por la camiseta imbécil. - le dije y luego le saqué la lengua en modo de burla -

- De nada enana de mierda - me contestó él -

- A mí nadie me dice enana de mierda. Te vas a enterar - le dije con un tono de voz amenazador -

Empecé a perseguirle por todo el campo hasta que me cansé y tuve que limitarme a tirarle una mirada de odio. Me despedí de mi hermano y de algunos jugadores y llamé a mi madre para saber donde estaban. Me dijeron que me esperaban en el taxi, así que fui hacia allí y me subí al taxi. El taxi nos dejó en la puerta del hotel y como yo estaba que me moría del sueño, le desee buenas noches a mis padres y me fui a mi habitación directamente. Al llegar me puse mi pijama que consistía en una camiseta de futbol de mi hermano que me iba grande y unos pantalones de pijama cortos normales. Me tumbé en la cama viendo el techo hasta que finalmente me dormí.

Recuerdos - Jude BellinghamWhere stories live. Discover now