LIRIO ―PABLO GAVI, PEDRI GONZÁLEZ

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La llamada.

Todos habían sido bastante amables con ella, Álex había despertado hace un par de horas por lo que estaba ansiosa por verlo lo más rápido posible.

Lordes salió por la puerta regalándole una sonrisa, poco después salió Reina indicándole con su mirada que se acercará.

---Te quiere ver ---le susurró dándole un leve empujoncito para que pasará.

---¿Esta muy mal? ---preguntó temiendo por la respuesta, la mujer negó un par de veces.

Lirio suspiró y tocó un par de veces la puerta antes de entrar, al ver al chico postrado en la camilla con una bolsa de sangre al lado su corazón se encogió, se sentía culpable.

---Álex... ¿Como te sientes? ---preguntó acercándose a el, el azabache la miró conectando sus ojos verdes con los avellana de ella.

---Me siento mucho mejor, perdí mucha sangre ---respondió.

---Fue mi culpa, no sabes cuanto lo siento Álex, por favor perdóname..

---No fue tu culpa, eres mi mejor amiga y lo haría mil veces más si fuera necesario ---la cortó enseguida---No voy a dejar que nadie te vuelva a lastimar, eres la mejor persona que he podido conocer Lirio.

La rubia soltó una lágrima involuntaria mientras se acercaba a el acariciándole el cabello con ternura tratando de no lastimarlo, el sonrió antes su tacto.

---Además mamá te ha tomado cariño, me ha dicho que si quieres podrás irte hoy mismo ya que tú familia debe estar preocupada ---dijo al separarse.

Lirio deseaba irse de ese lugar lo más pronto posible, pero con su amigo en esas condiciones realmente no pensaba hacerlo, no hasta que el estuviera bien.

---Me iré, pero hasta que sepa que tus estás bien ---respondió con seguridad.

---Yo estoy bien, pero me haría muy feliz que estuvieras conmigo un rato más, es aburrido estar aquí solo, Adán regresará mañana a la universidad y no lo veré hasta las próximas vacaciones ---agrego con una sonrisa.

---¿Que pasara con Alicia? ---preguntó después de recordar a su hermana.

---No lo sé, probablemente vaya a la cárcel puesto que es mayor de edad ---respondió sin saberlo muy bien tampoco, pero a este punto dudaba en si ella seguía viva.

La chica se removió en su lugar al notar la cara del muchacho, aunque le costará admitirlo ella la seguía queriendo, Alicia era su hermana y eso no cambiaría jamás aún sabiendo lo mucho que ella la odiaba.

---¿Donde te estás quedando? ---preguntó el chico con una sonrisa tratando de aligerar el ambiente.

---En una habitación de invitados, es mucho más cómoda de en la que anteriormente estuve ---respondió.

---Mi habitación es mucho más cómoda y grande, hoy en la tarde me iré a descansar a ella, tu vendrás conmigo ---sonrió coqueto, Lirio negó devolviéndole la sonrisa.

---Necesitas descansar tu lo has dicho..

---¿Tu como sigues de tu herida? Mi papá me ha comentado que llamo a unos médicos para que te revisaran ---preguntó mirándola con interés.

---Gracias a ellos me he podido recuperar, Adán fue muy cuidadoso conmigo y fue por el que no tuve una infección peligrosa ---respondió.

---Me alegró... pero habíamos quedado en que te quedarías en mi habitación ---regreso al tema volviendo a sonreír.

---Pero lo hicimos antes que tú padre se diera cuenta, ahora que lo sabe me puedo quedar incluso en el establo ---respondió con burla.

---Mi habitación es la más grande de todas, creo que los dos nos podremos instalar cómodamente en ella...

---No me quedaré por mucho tiempo, mis papás deben estar preocupados por mi y Alicia ---dijo sintiéndose mal, se sentía cruel al tener la oportunidad de irse y desaprovecharla.

Pero Álex había puesto en riesgo su vida por ella, eso era lo mínimo que podía hacer por el, quedarse al menos un par de días más.

---Le diré a papá que te presté un celular para que les puedas llamar, sería bueno que lo hicieras ahora ---añadio acomodándose en la camilla---¿Podrías decirle que pase?

Lirio asintió contenta, camino de prisa hasta la puerta para buscar al hombre, al verlo sonrió y le hizo una señal.

---Lo quiere ver ---dijo saliendo del camino, estaba tan feliz.

Llamar a su familia era lo único que necesitaba, llamar a Pablo.. Decirles que no se preocuparan porque ella estaba bien, eso la llenaba de felicidad.

---Ven conmigo, acompañame ---dijo el hombre haciendo que ella salga de su ensoñación, ella corrió tras el para alcanzarlo.

Juntos caminaron hasta la oficina del adulto, era muy bonita y elegante, con colores opacos que le daban el toque.

---Te daré este celular, nadie lo podrá rastrear ---le entregó un celular que a simple vista se miraba corriente---Si mi hijo confía en ti yo también lo hago.

---Muchas gracias ---agradeció tomándolo, luego de eso salió de la oficina mirándolo encantada.

Lirio corrió hasta abajo donde podría llamarle a su madre, no había nadie más por lo que le fue más fácil poder sentirse cómoda.

---¿Hola? ---su corazón casi se sale de su pecho al escuchar su voz.

---Estoy bien mamá ---fue lo único que pudo decir, no sabía muy bien que más agregarle ya que aún no se lo podía creer.

---Mi amor, ¿Donde estas? ---preguntó alarmada, ella no podía decirle donde estaba ya que ni siquiera lo sabía.

---No lo sé, pero estoy bien ---respondió sentándose en el muro que estaba a su lado, suspiró al sentir como su madre soltaba un quejido---Muy pronto voy a regresar, te lo prometo.

---¿Lirio? ---pudo sentir como le quitaban el celular a su madre, y esa voz era la de su padre.

---Papá, estoy bien ---dijo llevando sus mano a su cabeza soltando un par de lágrimas, el estaba bien.

---Todos estamos preocupados por ti, tu hermana no nos quizo decir nada ---eso provocó que Lirio dejará de llorar, ¿Alicia estaba con ellos?

---¿Alicia..

---Eso es un problema aparte, lo importante aquí es que tú estás bien ---la cortó sin dejarla acabar, eso la angustio.

---¿Que hay de Pablo? ---preguntó rápido, quería saber de él.

---No ha parado de venir a la casa preguntando por ti, está enfermó de hecho, lo internaron hace un par de días pero ya está mejor ---dijo dando un suspiro, no queriendo hacer sentir mal a su hija.

---¿Y Pedri? ---preguntó al recordar al canario, no sabía nada de él.

---El estuvo aquí algunas veces pero tuvo que ir a Fracia por un partido, desde entonces no ha regresado, pero ha estado llamando cada vez que le queda lugar ---explico.

---Le llamaré a Pablo después, te debo cortar ---dijo enseguida al ver como sacaban a Álex de la habitación, seguro lo llevarían a la suya.

---Te queremos.. ---fue lo último que escuchó.

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| No he subido nada porque estoy enferma, pero aquí les dejo este.