Seres

Capítulo 3 - Abjasia

¿Quéeee?

Lo primero que dice Rita al verme bajar con mis maletas.

Después de haber hablado con Andrea, me dirigí corriendo a la tienda más cercana para gastar algo de mis ahorros comprando unas maletas y empacar mis cosas. Pasé toda la noche empacando todo, dormí como 3 horas y ahora me encuentro bajando las escaleras con mis maletas, queda media hora para el horario acordado en el que debo estar en el salón municipal.

—¿A dónde crees que vas?

Lejos de ti, quisiera decir, pero me limito a estar calmada, solo unos minutos más y me iré.

—Fui seleccionada para ingresar al mundo sobrenatural.

—No, claro que no —responde convencida. — Tú no apareces en la lista de seleccionados.

—No, pero me llegó una invitación, tal vez olvidaron poner mi nombre.

—Si, claro — respondió burlona —tú no puedes salir de aquí. Yo soy tu tutora.

—Eso era cuando me adoptaste y era menor de edad —Respondo dirigiéndome a la puerta, mi taxi ya llegó.

—Eres una malagradecida —me dice con enojo —sabes que no durarás mucho allí, siempre serás una huérfana.

Aunque venía en son de paz, me ha molestado un poco y no me quiero ir sin defenderme, ya he aguantado sus malos tratos por mucho tiempo.

—Y tu siempre seras una señora engreída, desagradable y con hijos buenos para nada. Adiós. —cierro la puerta dejando atrás su rostro ofendido.

Después de unos minutos ya me encuentro en el salón municipal. Por lo general son 5 personas en todo el continente las escogidas para integrarse al mundo sobrenatural. Por lo que, cuando entro por la puerta, muchos de los presentes allí se quedaron un poco confundidos.

Hay 1, 2, 3...

Cuento mentalmente a los elegidos y si, en efecto, yo soy la número 6.

—¿Y tú qué haces aquí?

—Lo mismo que tu —Le respondo a Valentina, quien se acerca rápidamente a donde estoy.

—Pero tú no estabas en la lista —Dice enojada.

—Al parecer se ha tratado de un error —Le digo despreocupada, aunque en el fondo ni yo misma lo comprendo bien— He recibido una carta con la invitación en mi casa.

—Pero eso es imposible —Dice confundida— Debe ser algún error.

—No hay ningún error, señorita Smith. —Menciona un hombre mientras se acerca al grupo. Hasta ahora me fijo que Andrea aún no llega ¿Dónde estará?— La señorita Gomez ha sido seleccionada, por tanto este año serán 6 los que se integrarán.

—Lamento llegar tarde —Menciona Andrea entrando apurada por la puerta.

—No se preocupe, señorita Rodriguez —Responde de nuevo aquel hombre. —Llega justo a tiempo.

¿Dónde estabas? Le pregunto por lo bajo cuando se ubica a mi lado.

"Luego te cuento" fue su respuesta.

—Veo que estamos ya todos completos —Comenta— Mi nombre es Arturo Barone y seré su guía. —Necesario— Nos vamos a desplazar al autobús que se encuentra en la salida, pero primero les contaré brevemente acerca del mundo sobrenatural.

AKA una guía de supervivencia.

El señor Barone es un hombre más bien bajito. Cabello ligeramente despeinado y con una pequeña mota de cabello rebelde que se alza sutilmente por sobre su frente. Su mirada café escondida tras los vidrios de sus anteojos era gentil y afable y su rostro levemente ovalado era además adornado por una nariz aguileña y un pequeño mostacho arriba de sus delgados labios rosados.