Parte 10 [La llegada a la fiesta]

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Anteriormente...

Acenix: ..... *Lo abraza más fuerte* tienes mi apoyo.

Mayo: *sorprendido*

Acenix: *se separa y lo mira* No tienes porque siempre tratar de cumplir todas esas espectativas.. y sé que tratar de detenerte sería imposible, estás tan determinado.. tu amabilidad y incredulidad es tan soprenderte *menciono mientras reía levemente* pero siempre estaré para apoyarte. *saca su bolso de maquillaje y empieza a maquillar los moretones de las manos y brazos de Mayo* Y sí lo que quieres es callarlo, pues seré una tumba *sonríe* pero que conste que eso no significa que estoy de acuerdo en que soportes ese maltrato apenas termine el tiempo que tanto esperas, yo mismo ire y golpeare a ese tipo hasta el cansancio!

Mayo: *sonríe conmovido mientras pequeñas lágrimas recorrian sus mejillas* Gracias.

Continuemos:...

Acenix: No es nada, lo hago por ti

Había tocado límite, sin poder aguantar más, las lágrimas salieron a mares de los ojos del peli-morado, agradecía al cielo, a los angeles, al destino y incluso a la vida o a quien sea! Por haberle mandado aquel ángel a su vida.

Mayo: *llorando* Que hice para tener tu amistad? *Pregunto sonriendo*

Acenix: Aceptarme, eso es lo que hiciste. Cuando otros me dieron la espalda y me sentía solo, tú llegaste y estuviste ahí para recordarme que no estaba solo, asique ahora es mi turno *Respondió con una mirada llena de ternura*

El mitad gato aún recordaba claramente cuando conoció a su amigo; Cuando sus padres se despitaron solo un segundo de él, este camino unos cuánto pasos y cuando se dio la vuelta sus padres ya no estaban, trato de llamar la atención de la gente y pedir ayuda pero nadie ni siquiera se detenía a mirarlo, estaba tan solo... sintiendo que talvez se quedaria así hasta el final de su vida, pero entonces un pequeño ruido llegó a sus oídos, un tintineo muy llamativo para él, talvez sea porque despertó su lado mitad-gato o talvez fue cosa del destino pero curioso se acercó manteniendo una pequeña distancia y lo observó, ese sonido llamativo provenía de un pequeño cascabel que iba de llavero en una cartera, cartera que llevaba un pequeño joven de cabellos morados y piel blanca, este pequeño caminaba junto a una mujer de mediana edad, sin darse cuenta el pequeño peli-morado se fijó en aquella mirada y al avisarle a su madre, ambos se acercaron y con una ternura y cariño le hablaron al pequeño mitad-gato, al enterarse de la situación de aquel niño, lo ayudaron, lo cuidaron y le dieron un techo mientras buscaban a sus padres, y apesar del poco tiempo que estuvo ahí, consiguió la amistad del otro joven, descubriendo que su nombre era Mayo, y también consiguió llevarse muy bien con la señora Margareth madre de Mayo, en poco tiempo se sintió como de aquella familia. Hasta que tuvo que volver a la suya, y que para su suerte, estos entablaron amistad con la madre del joven peli-morado y les permitieron a ambos jóvenes verse más seguido, así hasta que ambos se volvieron inseparables.
De no haber sido por Mayo, quien sabe cuántas cosas le pudieron haber pasado al mitad gato, y por eso este último mencionado estaba tan agradecido con su amigo, que por si no fuera poco el echo de que lo ayudo, también lo aconsejo y acompaño siempre, convirtiéndose en su primer y mejor amigo.

Mayo: *ríe levemente* No hice tanto

Acenix: *sonríe* claro que si, incluso fuiste tú quien me dio uno de mis mayores tesoros *dijo mientras señalaba en su cuello el collar con un cascabel*

Fuiste mi luz después de la oscuridad... [mayictor] Where stories live. Discover now