Los locos Addams 2 (M!Merlina x F!Reader)

Capítulo 5: Los sentimientos de Lucas

Debbie estaba sentada en una mecedora, leyéndole un cuento a Pubert.

—Y todos en el baile voltearon para ver a Cenicienta... "¿Quién es esa hermosa mujer?" Todos preguntaron.
Incluso el príncipe encanto notó su llegada. "¿Quién eres?" Le preguntó a Cenicienta.

Lucas miró a través de la puerta entreabierta y escuchó a Debbie leer.
Sin embargo, accidentalmente empujó la puerta e hizo un crujido. Debbie no se dio la vuelta, pero tenía la sensación de quién estaba detrás de ella.

—"Me llamo Cenicienta", le dijo al Príncipe. —continuó, como si no hubiera oído nada—. ¿Podrías decirme quién es ese hombre junto al tazón de ponche? Ese fascinante hombre, ese hombre tan sensual, ese hombre que me hace temblar bajo mi corpiño... ese hombre calvo?

Lucas jadeó y salió corriendo, mientras
Debbie tenía una sonrisa de suficiencia en su rostro.

Mientras tanto, Lago sostenía un tablero de dardos mientras Homero le lanzaba dardos.

—¡Homero, va a volverme loco! —Lucas exclamó mientras irrumpía a través de la puerta.

—¿Quién? —preguntó Homero, mientras lanzaba otro dardo.

—¡Debbie! Debbie, solo el decir su nombre, Debbie. ¡Ay, qué lindo es! Ella me hace pensar en plástico, dinamita —confesó.

—En serio Lucas, ¿ Por fin te ha ocurrido? —Homero preguntó con emoción.

—¡No lo sé, pero creo que sí! Todos estos años, te he visto a ti y a Morticia... por las ventanas, puertas, cerraduras, y me da mucho gusto por ustedes. Pero debo confesar, ¡me he sentido solo y celoso! He soñado que algún día habré encontrado a alguien para mí —dijo Lucas.

—¿Y Dedos qué? —sugirió Homero.

—Me encanta. ¡Pero quiero más! Quiero a alguien con brazos, ojos.

—¿Codos? —Homeri comprobó dos veces, lanzando otro dardo.

—Sí, creo qué debo invitar a salir a Debbie. ¿Pero y si dice que no? ¡¿Y si dice que sí?! Homero, ¿y si la invito me acompañaras?¿Tú y Morticia? —Lucas entró en pánico.

—¡Claro que sí! —Homero tranquilizó. Puso una mano en el hombro de Lucas y lanzó un dardo sobre su hombro.

El dardo aterrizó en la boca de Largo y se lo tragó.

———

Gary Granger hizo sonar su silbato.
—¡Salvavidas! —anunció.

Estaba de pie en el muelle entre un grupo de chicos y un grupo de chicas. Todos los chicos vestían bañadores azules, excepto Merlín, Pericles y Joel. Merlín y Pericles vestían trajes de baño negros de aspecto antiguo y Joel usaba aletas y una máscara de buceo con tubo. Y todas las chicas vestían trajes naranjas de una pieza, excepto T/n que vestía uno negro. Merlín no pudo evitar admirar sus piernas desnudas y lo bien que el traje de baño abrazaba su cuerpo.

—Bien, todos son buenos nadadores... ¡ahora van a probarlo y ganarán sus diplomas!

Todos menos Joel, Pericles, Merlím, y T/n aplaudieron

—Ahora, que pasen nuestros dos primeros salvavidas, ¿Amanda? ¿Merlín?

Amanda y Merlín caminaron uno hacia el otro.

—¿Es tu traje de baño? —Amanda preguntó con incredulidad.

—¿Es tu traje de tonta? —replicó.

—¡Una será la víctima que se ahoga, y el otro representará a nuestro salvavidas! —Gary explicó.

—¡Yo seré la víctima! —Amanda se ofreció como voluntaria.

—Toda tu vida —Merlím murmuró.

—Seré toda una actriz —se jactó, ignorando el comentario de Merlín.

—¡Bravo! —Gary elogió—. Ahora, Amanda, salta, nada unos metros y empieza a ahogarte.

Amanda saltó al lago y comenzó (horriblemente) a actuar como si se estuviera ahogando.

—¡Auxilio! ¡Auxilio! ¡Me ahogo!! —gritó dramáticamente antes de hundirse bajo el agua.

Gary miró a Merlín expectante.

—Yo no sé nadar —Merlín le dijo.

Gary suspiró decepcionado cuando burbujas de aire subieron a la superficie del agua.

3/5