Los locos Addams 2 (M!Merlina x F!Reader)

Capítulo 3: Nueva nana

Morticia y Homero estaban sentados en el cementerio bajo el cielo iluminado por la luna.

—Mírate. Medianoche, la luz de luna, rodeada por la muerte —Homero elogió.

—Me sienta bien —dijo Morticia.

Los dos se inclinaron para compartir un beso, pero fueron interrumpidos por voces provenientes de la casa.

—¡Hazlo! —Merlín exigió.

—¡Mantenlo quieto! —se quejó Pericles.

Un arma disparó y rompió una de sus ventanas.
—¡Fallaste! —Merlín regañó.

Homero y Morticia intentaron besarse nuevamente, pero fueron interrumpidas una vez más.

—¡Toma, atrápalo! —Merlín dijo.

—¡No lo quiero!

Otra ventana se rompió.

—Una casa, tres niños, una futura nuera. Tantos inviernos —comentó Morticia.

—Querida, eres tú quien me preocupa. El estrés, tantos pleitos —Homero se preocupó.

—Oh, estoy bien —tranquilizó—. Soy una mujer moderna que intenta tenerlo todo. Un esposo, una familia... solo quisiera tener tiempo para buscar las fuerzas oscuras unirme a su infernal cruzada. Es todo.

—¡Hazlo, hazlo, así debe ser! —Homero prometió.

—¿Pero cómo?

———

—Niños, como su nueva nana, sé que todos nos preocupamos por nuestro medio ambiente.

Una mujer con coletas y varios collares de cuentas estaba sentada en una silla cruzada frente a Merlín, T/n y Pericles. T/n estaba sentada frente a Wednesday con la espalda apoyada contra su pecho, mientras sus brazos rodeaban su cintura.

—Y esta mañana, discutiremos cómo prevenir incendios forestales.

—¿Prevenirlos? —Merlín sacó una caja de fósforos y encendió uno de ellos.

———

—Muy bien niños, ya me tienen hasta aquí.

Esta niñera tenía la piel oscura, y era un poco más gorda, con anteojos y una expresión seria.

—Ahora solo respóndame una simple pregunta. ¿Dónde está ese bebé?

—¿Qué parte? —Merlín preguntó.

———

—¡¿Qué tal, niños! Soy Polly el muñeco feliz.

Una mujer mayor tenía un títere en una de sus manos y hablaba en un tono de voz muy alto.

—¿Qué vamos a hacer hoy? ¡Ya sé!
¡Limpiemos la casa y jugaremos! —sugirió el títere.

Merlín sacó una marioneta del diablo. —Hola Polly. Limpiaré mi cuarto... a cambio de qué me vendas tu alma —hizo que el títere se frotara las manos con maldad.

———

Un fuerte golpe en la puerta sonó a través de la casa. Largl abrió la puerta para revelar a una mujer joven con cabello rubio corto, que vestía un vestido blanco.

—Hola, ¿residencia Addams? —preguntó mientras entraba a la casa—. Oh, es antigua.

Se volvió hacia Largo y lo miró de arriba abajo.

—Y grande —ronroneó.

—Largo —Morticia dijo desde las escaleras.

—¡Hola! Soy Debbie Jellinsky, vengo de la
Agencia de colocación —se presentó.