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Estaba anocheciendo y nosotros seguíamos sentados escuchando música y tomando cervezas, aunque claro nosotras unas pocas y ellos casi todas, seguíamos hablando hasta que vinieron unos 2 chicos y se acercaron a nosotros.

—Hey preciosas, ¿por qué no dejan a estos torpes sin vida y vienen con nosotros?

Al parecer los chicos eran nuevos en el lugar, porque no sabían con quien se estaban metiendo. Belch se iba a levantar para golpearlos pero Bev lo detuvo poniéndole una mano en el hombro y dirigiéndome una mirada, nos fuimos hacia ellos, los chicos y Lolita nos veían confundidos.

Nos acercamos hacia ellos y colocamos nuestras manos en el cuello de los 2.—Mmm claro, pero hay un pequeño problemita.— Le dije al chico y este me cogió de la cintura pegándome más a él.—Preferimos estar con ellos que con ustedes, ¡Ahora!.— Le dije a Beverly y las dos alzamos la rodilla haciendo que le diéramos un golpe en la entrepierna de ellos dos.

—¡Muerete, pedazo de mierda!— Grito Bev dándole una patada al chico ya que este le agarró el trasero hace un momento.

—¡Joder! ¡Son unas Zorras!

—¡¿Qué dijiste marica?!— Victor reaccionó y se fue corriendo a darles un golpe seguido de Belch y Patrick, mientras que Henry iba ayudar pero Lolita lo detuvo.

—Si las vuelves a llamar así nunca más vas a volver a ver el sol, ¡Perra!- Gritó Víctor pegándole una patada a uno de ellos.

—Y tú no volverás a dirigirle la palabra a nuestras chicas, ¿Oíste pedazo de mierda?— Dijo Patrick agarrando el cabello del otro chico y poniéndole una navaja en el cuello, ya le había dejado algunas marcas con esa navaja en el cuerpo, pero al parecer, quería más.

Al ver toda esta locura, mire a Bev susurrando un "La cagamos", Beverly asintió y me dirigió una mirada abriendo grandes los ojos, la cual entendí al instante.

Bev y yo fuimos rápidamente a separarlos, yo trataba de que Patrick dejara al muchacho y Beverly trataba de que Víctor y Belch dejarán de pegarle al otro.

—¡Ya chicos! ¡Déjenlos! ¡No valen la pena!— Grita Loli llevándose a Belch y Bev jalaba de la muñeca a Víctor.

—Ya Patrick déjalo, que se pudran.— Los separé y me puse enfrente de Patrick tratando de que no fuera y le arrancara el cuello.—Y ustedes ¡Lárguense! ¡Fuera malditos, si no quieren que los maten!

Ellos trataron de levantarse y corrieron lejos mientras se podía ver cómo escurría un poco de sangre de sus camisas.

Patrick estaba detrás de mí y podía sentir su respiración en la parte alta de mi cabeza mientras que Víctor y Bev se estaban cogiendo de la mano.

—Bien...Em...Creo que deberíamos irnos, se está haciendo tarde y nuestras casas quedan un poco lejos de aquí.— Lolita se separa del brazo de Henry y nos hace una seña de que nos fuéramos rápidamente.

—Cariño, ya es muy tarde, es mejor que nosotros las llevamos en el auto de Belch.— Henry dirige una mirada seria a Belch y él asiente sin dudarlo.

—Bien, pues, andando.— Dice Victor jalando levemente a Beverly con la mano mientras que ella nos mira con cara confundida.

Alzo una ceja y miro a Lolita, ella me da una sonrisa triunfante como diciendo: "Tengo la razón otra vez" y yo chasqueó la lengua también caminando hacia el auto.

—Bien, como lógicamente no cabemos todos en el auto, 1 persona tiene que cargar a otra, yo iré en el asiento delantero con Henry para dar más "espacio", por así decirlo.— Lolita le da un beso apasionado a Henry y este se monta para después Lolita montarse encima de él.—Decídanse rápido que el tiempo corre.

Belch era quien conducía así que no había problema para él, al final solo quedamos nosotros 4 dándonos miradas de quién se subía primero, y en un momento de descuido Patrick me jala de la mano llendonos rápido al coche haciendo que Bev y Victor se queden desconcertados.

—¡Hey!, no se vale, juguemos piedra, papel o tijeras para ver quién carga a quien, yo juego por Beverly y tú por Maddie.— Patrick sale del auto rodando los ojos.

—Esto es ridículo, por que no simplemente aceptas que quieres llevar a Beverly encima tuyo, porque si es cierto que estas pegado a ella como un estúpido chicle.— Todos miramos sorprendidos a Patrick mientras que Bev estaba como un tomate.

—¡Cállate idiota! Terminemos esto de una vez— Empiezan a jugar, quedaron empatados y juegan otras rondas más hasta el que perdió fue Patrick, Víctor queda con una sonrisa satisfecha mientras que yo me quedo con una cara de pokerface.—¡Ja! ¡Si vez! ¡Nombeeee' soy muy bueno en esto! Afuera Maddie, que Patrick te va a cargar.

—Maldito juego de mierda, ni que hubiera tanto problema.— Patrick me mira con una sonrisa de psicópata mientras yo lo miro con cara de miedo, se sienta y me hace una seña de que me siente encima de él y yo sin más opciones voy y entro al auto para que Belch arranque.

—Para ser un idiota eres muy malo en el juego.— Él chasquea la lengua y me mira serio mientras yo me río levemente.

El corto camino fue incómodo, claro solamente para mi, los demás estaban tranquilos disfrutando de el viaje, Patrick me tenía rodeada la cintura con sus fuertes brazos que parecía que no me quería soltar nunca, su respiración estaba en mi cuello, había ocasiones donde decía "Chica, no te muevas tanto" haciendo que me estremezca.

Llegamos y apenas Belch paro el auto, abrí la puerta y salí rápido casi cayendo al suelo susurrando un "Gracias Dios" , pero el pelinegro me atrapo impidiendo que cayera completamente. —Wow wow, tranquila nena, te puedes caer y romperte la cara, o peor, el cuello.— Me mira con una cara seria que siempre da miedo.

—Mmm...Esta bien... ¿Me puedes soltar ya?— Él me suelta para acto seguido yo caer al piso, el pelinegro se ríe y yo le doy una patada en los pies haciendo el que el chico eche una cara de dolor y ahora la que se ríe soy yo, el me da la mano para ayudarme a levantar y suelto una risita leve mientras que el solo sonríe despreocupado por lo que acababa de pasar.

—Pero bueno, ¿Desde cuando los tortolos demuestran su amor?— Dice Belch haciendo que miremos a los otros que por cierto nos miraban como si fuéramos la pareja mas tierna del mundo, Patrick carraspeó su garganta dejando pasar el comentario,  por un momento me olvide ellos.

—Wow Maddie, y yo que creía que no eras de esas personas cursis.— Bev me mira burlona, rió sarcásticamente y le saco el dedo de en medio.

Lolita se ríe y le planta un beso a Henry. —Bien, nos vamos, no queremos que nos regañen y no nos dejen salir nunca, adiós cariño y gracias por todo, cuídense chicos.— Se despide de los otros y empieza a caminar lentamente para esperarnos.

Yo me despido con un "adiós" y empiezo a caminar hasta que una mano me detiene y me voltea rápidamente, me doy cuenta de que es la jirafa pelinegra mirándome sin expresión. —¿Te vas a ir sin despedirte?

—Te dije adiós, ¿Qué eso no te basta?

—Tal vez a los otros les baste pero a mi no, despídete como se debe.— Señala con su dedo los labios y mirándome con amenaza.

Yo lo miro como si estuviera loco pero después le sigo el juego, coloco mis manos alrededor de su cuello y el las pone en mi cintura relamiéndose los labios, sé que los chicos nos están mirando pero no me importó.

Me acerco a él lentamente para darle un beso en la boca, ya a escasos centímetros me devuelvo rápidamente a su oreja y le digo: "En tus más preciados sueños dejaré que me beses...te falta mucho camino por recorrer" acto seguido le doy un pequeño beso en su mejilla y me alejo de él como si fuera la puta ama.

Pequeña Estúpida || Patrick HockstetterWhere stories live. Discover now