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KAIRI

La amiga de su madre que era profesora le había conseguido trabajo, estaba agradecida, pero aún ella no terminaba sus estudios y aunque fuese la mejor de su clase antes de graduarse del bachillerato y entrar a la universidad, no sabía si podía darle clases de inglés a alguien más, era algo que jamás había intentado.

Actualmente Kairi estaba en su segundo año de la universidad y le quedaban pocos meses para graduarse de su licenciatura en inglés, y quizá se convertiría en profesora, así que era una buena oportunidad para darse cuenta de si era lo que quería hacer.

No se negó a la propuesta de enseñar al alumno de la amiga de su madre y aceptó sin quejarse, también necesitaba el dinero así que no había otra opción.

Por la tarde luego de sus clases regulares, se encaminó a la dirección que le había dado la amiga de su madre, las clases serían por la noche, la duración era de una hora o dos si lo consideraba necesario, pero como era la primera vez, se quedaría menos tiempo sólo para conocer al muchacho y ver cuál era su mayor dificultad con el idioma.

Lo único que sabía de aquel chico era que estaba en su último año de bachillerato, por lo que no eran tan diferentes en edad, ella apenas había terminado su bachillerato hacía dos años atrás, así que no sería tan incómodo. Eso esperaba.

Su profesora hablaba bien de él, pues no tenía dificultades con su comportamiento, lo único negativo de la situación podía ser sus bajas calificaciones en inglés, por lo que la madre del chico estaba desesperada por ayuda urgente.

Al llegar a la casa dos chicos corriendo a su lado y entre risas entraron a la casa, no sé dieron cuenta de que ella estaba ahí, negó y camino hacia esta y tocó la puerta dos veces, y cuando lo iba a intentar una tercera, la puerta se abrió dejando ver la radiante sonrisa de la que seguramente era la madre del chico.

─tu debes ser Kairi, mucho gusto.

─mucho gusto señora, así es, soy Kairi.

─puedes pasar, mi hijo acaba de llegar, ¿no te importa esperar a que se cambie?

─no hay problema ─responde entrando a la casa y siguiendo a la señora hacia la sala de estar. Ambas se sientan en el sofá y conversan unos segundos.

─me contaron que aún estas estudiando ─Kairi asiente.

─en pocos meses me graduare.

─que gusto, entonces debes ser muy inteligente, ¿también eras la mejor de tu clase en la escuela?

─bueno... Sí.

─eso es maravilloso, entonces no tengo duda de que ayudaras a mi hijo.

─eso espero, si le parece hoy sólo conoceré a su hijo y veré cuales son las cosas que más se le dificultan, también si tiene alguna tarea por hacer le ayudaré en eso y mañana podemos empezar con las  lecciones.

─me parece perfecto, ¡Ni-Ki! ¿ya estás listo? Ven a conocer a tu tutora ─Kairi sonríe.

El menor aparece en la sala de estar junto a su amigo.

─mamá, ¿Taki puede quedarse?

─sí puede, pero antes ven a conocer a Kairi, ella será tu tutora y vendrá dos veces por semana, los jueves y viernes.

─ah... Hola ─saluda el chico.

─es un gusto conocerte, ¿Ni-Ki?

─es Riki, solo mis amigos me llaman Ni-Ki ─Kairi asiente.

─no seas grosero ─le dice su madre.

─sólo dije que mis amigos me llaman así, no creo que fui grosero.

─como sea, Kairi ¿no te molesta acompañar a Ni-Ki a su habitación? Es un lugar muy espacioso, ahí podrías darle las lecciones.

─¿mi habitación? ─protesta el menor.

─sí, ahí no le molestara el ruido y podrás prestar atención.

─pero...

─Lleva a Kairi a tu habitación y dile todo lo que se te dificulta, también si tienes alguna tarea por hacer.

─okay... ─dice de mala gana y se vuelve para regresar a la habitación, Taki lo sigue y detrás de ellos va Kairi.

Cuando están frente a la puerta Riki se detiene y no la deja pasar.

─espera un segundo aquí ─dice y entra a la habitación cerrando la puerta.

Seguro debía ordenar un poco, pensó ella y espero ahí hasta que él abriera la puerta.

─ya puede entrar ─dice el chico.

Kairi entra a la habitación y está estaba toda desordenada, había basura en el suelo, ropa (seguramente sucia) papeles, botellas de agua y gaseosa.

─perdón, este fin de semana no limpie ¿no te molesta por esta vez verdad? ─ella niega.

─esta bien, tampoco te pediré que limpies tu habitación cada que vengo.

─gracias por comprender ─dice él, se escucha las risas de su amigo desde la cama.

Había una mesita en el suelo así que se sentaron ahí y el rubio busco lo necesario, su cuaderno, bolígrafo, libro de inglés, todo lo necesario.

─bien, dime, ¿en qué puedo ayudarte?

─soy malo en casi todo, pronunciación, no sé formular oraciones coherentes, no comprendo que significan las palabras y...

─entiendo, entonces es como empezar de cero.

─pero puedo presentarme, eso es algo ¿no? ─la chica ríe un poco.

─claro, es importante que sepas eso.

─sí...

─¿tienes alguna tarea por hacer? Quiero ver que tipo de cosas te ponen para sabe como ayudarte.

─claro, aquí está, está es la última que hice, pero como ves no me fue muy bien ─dice mostrándole.

─bien, empezaremos con que comprendas como ultizar los verbos.

─verb to be ¿no? Eso es tan fácil ─dice Taki.

─shh, no están hablando contigo ─dice callando a su amigo.

─así es, empezaremos con el verb to be.

─ah... Que horror.

─una vez sepas eso, será más fácil para ti formular las oraciones.

─¿cómo? Tampoco comprendo las otras cosas que cosas, no sé que significan.

─también te ayudare en eso.



























La Tutora | NI-KI | [EDITANDO] Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt