Cuando nuestros ojos se toparon por primera vez, vi sorpresa, curiosidad, intriga, duda y solo un poco de miedo.
No se que vio ella en mi mirada, pero estoy seguro de que vio algo bueno, porque al igual que yo detuvo su ataque.
- Hola - susurro
Yo no dije nada, pues su mirada esmeralda aun me tenia cautivado. aquellos ojos y sus misterios se convirtieron en mi adicción
ESTÁS LEYENDO
El castigo de los amantes alados
FantasyPorque para convertirse en demonio primero hay que vivir el infierno en carne propia. Ángeles como tu no pueden ir al infierno conmigo. quizás yo no pueda bajar al infierno, pero tú tienes alas así que toma mi mano y vayamos juntos al cielo. Los re...