One Shots - Famosas y tú.

Victoria De Angelis pt. 2

Rodó los ojos con una media sonrisa.

Más habían pasado, lamentaba tener que admitir que por más muros que pusiera. Victoria me atraía. Al menos un poco.

Curiosamente, no habían pasado acercamientos. Intentos de besarme o algún toque inapropiado. Miradas, de sobra. Pero no más que eso... ¿Esperaba que yo lo hiciera? Me lo preguntaba.

Martes, 2:34pm

Saliendo de la universidad la vi. Recostaba de un árbol al igual que su bici, con su casco en mano y mirando alrededor seguro en busca de mi.

—¿Que haces aquí?— murmuré sorprendiéndola.

Ella sonrió.

—Es obvio eso, ¿no?— metió su mano en el bolsillo trasero de su jean y extendió su mano hacia mi. Un Flyer que indicaba horario y lugar para un toque. Presentando a una nueva banda local: Måneskin.

—¿Luz de luna?— sonreí de poco sorprendida de que hace noches me enseñaba Danés, entre tantas palabras en el balcón de su dormitorio le pregunté sobre cómo se traducía en danés "moonlight". La manera en la que fue pronunciada de su boca, con su voz ronca, la manera en la que me enseñó a pronunciar lo correctamente hizo que se volviera de mis palabras favoritas en el idioma.

—Måneskin. Si. Conseguimos un nombre. ¿Te gusta?— inclinó su cabeza a un costado y pareció dudar de si había hecho lo correcto.

Asentí. —Si, me encanta.

Me sonrió de vuelta y tome el folleto. —Espero verte esa noche. No puedes faltar, ____.

—No lo haré, Vica.

—Me gusta que me llames Vica— murmuró risueña, dejando situar sus manos en las mías. Empujándome hacia ella, reí.

—¿Si?— asintió.

—Hola, bella— su voz ronca chocó con mi piel una vez que sus labios besaron mi mejilla. Erizó mi piel como de costumbre.

—Hola, Vica.

El toque había salido de maravilla, los padres de cada integrante estaban en el lugar. También conocí a Verónica, mejor conocida como Nica: su hermana menor.

—Gracias por venir, bella.

Fueron las primeras palabras que dijo Victoria al verme, una vez que su familia había terminado de abrazarla y felicitarla.

—Estuvieron increíbles.

—¿Solo ellos?

—Tú en especial.

—Eso estuvo mejor— sonrió feliz de escucharlo y beso mi mejilla como de costumbre. Pase mi mano por su fleco, sin importar el sudor en su frente. Arregle un poco más su cabello hasta que una se sus manos tomó la mía, llevándola a su boca y besando el dorso de esta. Haciendo que mi corazón saltara en su lugar y casi de saliera de si.

—Estoy feliz de verte aquí, ___. Gracias.

Tragué con un nudo en la garganta. Y asentí.

—Gracias por invitarme.

Con el bajo en su estuche y sobre sus hombros caminamos hasta el departamento que compartía con Thomas. Quien decidió quedarse esa noche junto a Ethan y Damiano. Victoria me llevo a casa aunque su noche la pasaría con los chicos.