Como conquistar a tu Crush || KookTae ||

C - 6

El día siguiente aparecieron sus amigos y su media hermana, estos le sonreían y comenzaban a hablar con el azabache, el único que no sonreía como de costumbre era HoSeok, el chico estaba muy triste, su mejor amigo, casi hermano de infancia no lo recordaba nada, Tae le dio todo su apoyo y cuando ya caía la noche Tae y HoSeok fueron los únicos que se quedaron con JungKook, el nombrado les sonreía a ambos mientras estos le contaban pequeñas anécdotas, la mayoría de los recuerdos que Hobi contaba JungKook asentía dando una clara señal de que recordaba aquello, Jung le miraba y le decía que era él con quien hacía la mayoría de las travesuras y demás cosas.

– De verdad, Hobi, lamento tanto, tanto no recordarte bien, pero me alegra tener un mejor amigo como tu.– JungKook lo despidió con una sutil sonrisa ya que el castaño se iba a su casa.– El sentimiento está, de eso nunca dudes.– esas últimas palabras quebraron a HoSeok quién lo abrazo fuerte rompiendo en llanto, Tae quién los miraba desde lejos sonreía con una gran felicidad, amaba que JungKook se haya despertado y que poco a poco todo comenzaba a volver a la normalidad.

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– JungKookie...– Tae lo llamó entrando a la habitación, el nombrado tenía una mueca de puro enojo que cuando vio a su mayor se intensificó, con molestia giro su rostro para mirar a la televisión e ignorar a su mayor.– JungKookie, ¿sigues enojado?

Ante esa pregunta, Jeon quién de inmediato volvió a mirarlo con una cara de ofensa asintió con fuerza mostrando sus cachetes rojos de la molestia, que mas que fingida estaba, se notaba de sobra que solo era un berrinche.– ¿Cómo no estarlo? ¡Me dejaste solo!– eso formó una sonrisa juguetona en el rostro del castaño.– ¡Me abandonaste con la enfermera! Aun cuando te pedí que te quedaras.– susurro lo último bajando sus defensas viendo como Tae se acercaba a él para abrazarlo, no quería aceptar su abrazo pero lo hizo a la final, era su novio, y a la final era un drama más.

– Tenía que hablar con el doctor mi amor.– besó su mejilla pero un olor le hizo mucho ruido a Jeon quien al notarlo apartó a su mayor con sutileza y se acercó a su cuello para olerlo.

– ¿Tae...– dejó su nombre al aire oliendo su ropa y luego cerca de su boca.– Tu estas fumando?

El castaño cerró sus ojos maldiciendo en lo más profundo de su mente, ese ligero detalle se le había pasado por completo, salió un minuto a liberar su estrés y llegó el doctor para regañarlo y luego para darle una increíble noticia que le hizo olvidar absolutamente todo, incluido su olor, no quería que JungKook se diera por enterado pero no podía mentir, era decirle la verdad si o si.

– No...– quiso mentir pero la mirada de Jeon se confundió el doble haciendo que soltara la verdad, ya que.– Bueno, mira, déjame explicarte.– se alteró un poco cuando el azabache alzó una de sus cejas, al contrario de lo que él pensaba su menor no estaba molesto ni lo más mínimo, solo quería saber si lo hacía o no simplemente.– Cuando empezaste con el coma tu madre se iba por mucho tiempo y era yo quien se quedaba contigo, eso ya lo sabes, pero...– lo pensó un par de veces antes de contarle a JungKook el porqué su vicio más dañino.– Eso ocasionó mucha presión en mi, tus cuidados, tus medicinas, tus atenciones, todo, todo era mi responsabilidad, no me estoy quejando, solo que el estrés que eso me producía, además, de que todos los días al salir de esta habitación llegaba un enfermero o el mismo doctor preguntadome si te iba a desconectar o no me llenaba de mucha ira, no entendía ni entiendo porque no podían esperar un poco más...– se quedó callado para apreciar el rostro de su novio, este lo miraba con preocupación, pero no decía nada, solo lo dejaba desahogarse.– El punto es que un día que salí de aquí al parque y me acerque a un pequeño bodegón, vendían unos pequeños cigarrillos y no se porque pero los compré, solo quería saber si era verdad si servían y lo peor es que si lo hacen...– bajó la cabeza sintiendo las manos de su menor tomando sus brazos.– Lo siento.– sus ojos estaban llenos de lagrumaas que no terminaban de caer y eso lo hacía sentir peor.

– El que te tiene que pedir perdón soy yo, TaeHyung.– JungKook lo abrazó fuertemente besando su hombro.– Lamento que todo lo que has vivido ha sido por mi culpa.

Tae negó con fuerza seprandose del abrazo.– No no, ninguno de los dos tiene la culpa, tu nunca hubieses querido que eso te pasara.– lo iba a besar pero tapó de inmediato los labios de su novio, se negaba a besarlo así, el menor era muy sano para eso.– Como sea, iré a lavarme los dientes.– JungKook quiso abrazarlo de vuelta pero la fuerza que Tae ejerció para separarse de él fue muy abrupta dejándolo en la cama con una mueca.

– Mi vida.– se levantó de la camilla sintiendo un espasmo repentino por el toque del frío suelo con sus pies calentitos.– Bebé vuelve aquí por favor, no tienes que sentirte así.– caminó hacia el baño viendo como Tae se cepillaba con mucha fuerza y rudeza, JungKook se acercó de inmediato arrancadole el cepillo de la mano escuchando las quejas del más bajo, chaqueo su lengua un poco molesto tomando el mentón de su novio con agresividad para cepillarlo él.– Calla, yo lo haré.– besó la punta de su nariz viendo con dolor como las encías del castaño sangraban por su poca delicadeza. Posicionó el cepillo en frente de sus labios viendo como Tae mostraba sus dientes apenado no queriendo mirarlo, movía el cepillo de arriba a abajo con cuidado de no lastimarlo más de lo que ya estaba, le pidió que abriera la boca y cepilló con cariño sus muelas y terminó con su lengua, lo dejó enjuagarse viendo la sangre salir, volvió a enjuagarse y salió más sangre, cuando ya por fin ambos salieron de baño, JungKook cargó al más pequeño y se lo llevó al sofá, este era más cómodo que la roca que se hacía llamar cama.– No quiero que te vuelvas a lastimar de esa manera.– besaba su cuello aspirando el olor a cigarrilo, debía aceptar que aquel olor era muy adictivo en el lindo cuerpo de su novio.

TaeHyung por su parte abrazaba a JungKook por los hombros hundiendo su rostro en la curvatura de cuello y el hombro del azabache, el mismo dio la vuelta dejando a Tae ahora encima suya viendo con dolor unas espesas lágrimas bajar por sus voluminosas mejillas.

– Lo siento.– susurró el castaño haciendo que JungKook lo abrazara con fuerza dejando al mayor desahogar todo lo que había callado en todo ese lapso de tiempo.– Lo siento tanto.